Este blog ha sido el que siempre ha almacenado los comentarios del Galatea y contiene todos los realizados en la página web "Buque Escuela de Maniobra Galatea". En él se encuentran los publicados desde 2010 hasta finales de 2014.
A partir de diciembre del año 2014, los nuevos comentarios se van almacenando en el nuevo blog titulado: El Galatea y sus Comentarios. Gracias a todos por visitar esta página.


Comentarios del Galatea 2012 III

Anónimo dijo...
Con esta visita a bordo del viejo Buque Escuela de Maniobra "Galatea", pienso se va culminar el deseo plasmado hecho realidad, de todos cuantos estuvimos embarcados y no olvidamos como buenos bregados por las cosas de la mar y de los barcos.
Un afectuoso saludo y enhorabuena porque ya contamos con madrina y todo! Alberto Vera Meizoso.


Arminio dijo...
Gracias Alberto me encanta verte por esos lugares, que siempre sabes que son tuyos, ya que has sido el que han iniciado esta singladura, como pionero para que el Galatea navegue de nuevo.
Un abrazo muy fuerte, de quien te lleva siempre en el pensamiento.
Anónimo dijo...
Querido correligionario amigo: El valor de la amistad, el heroismo como meta y la responsabilidad como motor de la intachable conducta moral, encuentran su plasmación definitiva en el mundo, por los barcos y las cosas de la mar, que encuentra don Arminio añorando al viejo "Galatea" del que todos los marineros han sido exiliados y al que solamente con la fabulación poética cabe el modo de regresar mediante el sinfin del reloj magistral que marca la hora de ese encuentro final con todos los entusiastas que juntos habremos de brindar con esa copita de chapán, ja, ja y jaja...
Estoy soltero, pero si también hace falta padrino...no hay problema. Alberto Vera Meizoso alias el anónimo. Gracias Arminio, muchas gracias a nuestra Madrina del Galatea.
martes, 01 mayo, 2012
Fernando dijo...
Queridos galateanos, a petición de Miguel y Castrillón escribo unas letras.
El pasado sábado 28-A, celebramos en Cartagena el encuentro tan esperado del C.I.A.F. Fué apoteósico, nos juntamos unos 70 aproximadamente, a algunos no los había visto desde el año 68.
También estuvimos conversando largamente con Montejano Navarro y Regueiro, los cuales están en la lista de Glasgow y así mismo ya contacté con el compañero de las gorras y los polos.
Más adelante habrá más información de todo ello así como fotos, pues ya se lo comenté a Jaume Matamala y quedamos en ello.
Bueno por ahora no hay más que contar, sólo que viendo lo de los bocadillos de pulpo y las patatas con chorizo del Bar La Uva se me está abriendo el apetito. Un abrazo.
Arminio dijo...
Saludos a todos, que bien se lo merecen, ya que hemos coincidido todos en un fin de semana: Fernando, Ureña, Miguel, Castrillón, Meizos, Massa y días antes, Jaume y Soledad. Creo no olvidarme de nadie.
Yo en cambio no recuerdo el nombre de los lugares, pero me gustaría acordarme de ese lugar que frecuentaba, que tenía un gran comedor abajo. A la izquierda, en una esquina un pequeño lavabo, para lavarse las manos y la cocina, y a la derecha uans escaleras que subia a las habitaciones donde nos cambiábamos.

Estaba muy cerca de una tienda de fotos que hacía esquina, se llamaba fotografía Jaadin, Plaza del Callao 21, según puedo leer en una foto que me hice allí.
En cuanto al cine también recuerdo ir a los cines, cerca de una plaza con jardines, donde se encontraba la calle donde estaba uno de los cines.
La calle la separaba un muro de granito de los jardines que estaban más altos que la calle y el cine , enfrente.
Los famosos bocadillos que comenté ayer, los daban en el bar que había a la entrada de la playa de Doniños y una vez acabado el tiro, subíamos a tomar esos exquisitos bocatas, con un vaso enorme de vino tinto, que cuando caía una gotas en el mostrador, parecía sangre y cuando lo tomabas parecía zumo. Que rico y eso que el vino no me gustaba mucho, pero ese sí.

Y las taciñas de Riveiro se bebían solas. En cuanto te las echabas a la boca, enseguida se tomaban, tan fresquitas, eso si cuando llevabas algunas, te empezaba a entrar el sueño ese dulde y la morriña.
Y las vieiras a duro, del Galatea, con una era suficiente para sustituir al bocata de media de mañana, y los cafés en la cantina del barco que los ojos de buey daban a babor, y las copas de ponche, y los completos de patatas, huevos y bistec. Bueno menos mal que ya he comido, pero me tengo que ir al trabajo.
Un saludo a todos.
Castrillon dijo...
Hola a todos, por favor no seáis tan detallistas en las comidas, ¿oíste Arminio? ya que no he comido todavía, y me dió más hambre ahora.
!!!! Meizosoooooooo¡¡¡¡ bienvenido, ya era hora que aparecieras, y no te larges por ahi, que estas acorralado y no tienes escapatoria, así quédate en el castillo, como corresponde a la vil canalla de proa.

Laguna, ya es hora que aparecieras, ya que estuviste fuera demasiado tiempo, ya estabamos planeando ir a buscarte con un comando dirigido por Miguel, y secuestrarte, amarrarte de pies y manos y traerte hata el castillo.
Hoy parece el dia del blog, ya que, aparecemos aqui todos, me alegro mucho.
Bueno amigos,espero que entre también la Madrina Sole, para que anime un poco a todos los que leen estos escritos.Sin mas por ahora recibir todos un muy fuerte abrazo.
Castrillon dijo...
Hola Ureña, tal día como hoy, estábamos embarcados en el Buque Escuela de Maniobra Galatea, navegamndo de Pernambuco a las Islas Azores, salimos de Pernanbuco el dia 29 de abril del año 1955, rumbo a las Azores, ese viaje tardamos treinta y un días, llegamos a las islas Azores el dia 3o de mayo del mismo año.
Luego nos fuimos a Valencia, P.Mallorca, Cádiz y Ferrol, fué un viaje muy bueno, durante la travesia de Pernanbuco a Azores, fué muy divertida, ya que habían diversas actuaciones y distracciones, y demasiado calor, fué un viaje muy bueno.

Ureña no se si te acordarás de algo de ese viaje, el paso del ecuador, y las actuaciones que haciamos en la cubierta, cerca del palo mayor, donde en primera fila estaba el comandante y los oficiales, nosotros arremolinados alrededor, y subidos a las jarcias y en la arboladura para no perder detalle de dichas actuaciones.
El maestro velero y contramaestres se las ingeniaban bien para preparar la ropa de lonas viejas para los actuantes, las pintaban con pintura de colores, según fueran las vestimentas, como era algo fuera de lo común nos divertia mucho y lo pasabamos muy bien.
Luego al terminar todos en corrillos sobre la cubierta del castillo sumidos en nuestras conversaciones, oyendo el resoplido de los delfines que, nos acompañaban por los costados y la proa, hasta bien llegada la madrugada, luego a comtemplar aquella maravilla de la salida del sol. A ese espectáculo nadie faltaba, todo era un gran silencio, cada uno sumido en sus pensamientos.
Ureña, tienes que acordarte de muchos detalles de ese viaje haz memoria.

Bueno amigos todos, espero que estéis pasando un buen día.
Sin más por el momento me retiro, que voy a ir a la playa, ahora con la familia.
Recibir un muy cordial saludo todos.
Miguel Gómez dijo...
Hola estimados compañeros, creo que esto ya se trata de una navegación en toda regla, al parecer estamos recibiendo un viento propicio por la aleta de estribor que nos hace avanzar bastante de prisa, ya que tenemos largado todo el aparejo y las velas todas están infladas.
Se puede decir esa frase de "Espronceda viento de popa a toda vela" nuestro jefe de derrota ha puesto rumbo a la gloria, que seguro que de seguir así la alcanzaremos.

No sé si alguna vez hemos coincidido casi todos en tan corto trayecto de tiempo, de esa forma es como deberíamos seguir, estando cerca la unión es más firme.
Fernando ya he visto algunas fotos en Facebook de vuestra quedada en Cartagena, me son familiares ya que yo anduve por esas zonas hace muy poco, me estoy refiriendo al Museo Naval, Arsenal, Capitanía y la explanada del puerto.
Al ver esas fotos me trasporté al viaje de Glasgow que si se lleva a cabo nos serviría para conocernos todos personalmente y pasarlo todo lo mejor posible, para de este modo culminar una parte de nuestro camino.

Sigamos hablando de las comidas ferrolanas de aquellos tiempos, aún ahora, bueno hace así como cinco años también se seguía comiendo muy bien, y con muy buena calidad, pero ni los locales son los mismos ni el precio se le parece en nada, no es que sean abusivos pero la distancia de los tiempos también está reflejada en los precios.
Ese plato completo que refiere Arminio que era un montón de patatas fritas bistec y dos huevos fritos quiero recordar que le llamábamos un bistec a caballo, ese plato era para cuando acabábamos de cobrar, cualquier paga de las muchas que habían como bien dice Gerardo.

El bar Galatea según Matamala lo sitúan en la calle Real, yo quiero recordar que por detrás del CMI existe un restante con este nombre, por donde estaba antiguamente la plaza de Abastos frente a donde estaba la PYSBE, si alguien la recuerda, en cuanto a los cines sé donde estaban todos y cada uno de ellos pero de los nombres solo recuerdo el Madrid Paris en la plaza de España, el Callao que no recuerdo el nombre de la calle, estaba en la misma calle y acera que el bar Vera Cruz, subiendo una cuesta que desemboca en la plaza de España, también había uno en la calle Real y otro en un edificio por la parte posterior a Correos.
Espero y deseo que la felicidad esté presente en cada momento de nuestras vidas, de todo aquel que le interese estos comentarios en cualquiera de sus formas.
Saludos para todos.
Arminio dijo...
Notas Ferrolanas. ABC martes 7 de octubre 1924
El Crucero "Reina Victoria Eugenia", que debía llegar hoy a Pasajes, retrasó el viaje por el mal tiempo.
Por igual motivo fondeó en la Estaca de Vares, el Buque Escuela "Galatea"
Saludos.
Gerardo Ureña dijo...
Lo has descrito perfectamente Miguel.
El Cine Callao, estaba casi pegado al Vera Cruz. Y muy cerca de la casa de dos señoras mayores, donde "Guili", Zurita y yo, nos solíamos vestir de paisano.
Esta de vestir de paisano, destinados en el Galatea, era una muy temeraria aventura, pero nos compensaba en las relaciones con mujeres, teníamos más éxito que vestidos de marinos.

Ciertamente Miguel, al subir la cuestecita que tú citas, salias a la Plaza de España, otrora se llamaba La Puerta Nueva. Había un muro de piedra, que parecia una muralla, segun subias a la derecha. Y cuando salias a la Plaza España habia un bar que hacia esquina con la Av. de Vigo.
Pues en el 129 de esa calle vivían mi tío Paco, mi tía Odulia y mis cinco primas, más mi primo Lucho, que en ese tiempo estaba destinado en el Mendez Nuñez.

Bueno pues en ese bar,que me parece que sigue en el mismo sitio; hacian unos churros "cojonudos."
Gran Miguel: envio una pequeña estrofa, dedicada a toda la familia galateana.

"¡El mayor bien es pequeño!"
Juventud, es flor de un día,
gloria, es hueca argentaria,
amor, es dulce beleño,
"y toda la vida es sueño".

Sueño de demencia foco,
que desatentado, loco,
á reposar no se atreve.
la vida es un sueño breve,
por eso dura tan poco.
Gerardo Ureña dijo...
José Mª, no te puedes imaginar el revolcón que me ha dado el cuerpo al recordar el vaje de Brasil.
Claro que me acuerdo buen amigo, claro que me acuerdo, ¿como podria no recordar.?
El paso del ecuador fue fabuloso. El maestro velero haciendo de Neptuno, bajando desde la cofa, por el palo mayor, con su tridente en la mano. El comandante entregándole el bastón de mando, Neptuno levantando los arrestos,las fiestas que se organizarón a bordo, fueron una gozada.

Los sábados por la noche, nos solían dar cine, sacaban una máquina, la instalaban en la banda de babor, y todos sentados en cubierta podíamos ver una pelicula, bastante mala, por cierto.
También me acuerdo de las quinielas que se hacían a bordo, eran las quinielas de nuestra liga, y los premios se repartían del dinero que se recaudaba. De esta manera, conseguíamos mantenernos informados, a pesar de la distancia,como se comportaban los equipos de nuestros amores.
De las Azores me acuerdo mucho de un establecimiento, que recomendabais los veteranos, donde se tomaban unos deliciosos "Bolos con Leite" a un precio bastante razonable. También me acuerdo de las compras que se solían hacer, los paquetes de cigarrillos rubio de la marca Clipper, las armonicas y las virgenes de Fatima que relucian en la oscuridad.

José Mª, ¿tú te acuerdas de la casa de la Maria Mindelo de Cabo Verde?, se solía comer "Pollo Asado".
Cuando has nombrado Valencia, no he podido evitar un par de lágrimas, que sin ningun tipo de respeto, han salido de mis ojos y bajado por mis mejillas, ignorando que por mi condición de hombre hay cosas(y esta es una)que no me estan permitidas.
Mi buen padre y el menor de mis hermanos varones(q.e.d.)estaban en el muelle esperando mi salida a tierra.
Me he sentido muy feliz José Mª, muy feliz,gracias otra vez amigo.
Memoria de elefante dices, tú si que tienes memoria, memoria de manada de elefantes.

En Pernambuco cargamos muchos sacos de café, y como siempre solía pasar, no me libre, cuando llegamos a Cádiz, algunos kilos fuerón destinados al Crucero Galicia.
El Galatea era el unico barco del departamento, que desayunaba café con leche.
Todos los torrefactores de café, de Ferrol, visitaban el Galatea para comprar el delicioso brevage. Nuestro comandante D. Ramón Liaño de Vierna, todo lo decia chillando,(llevaba un aparatito para la sordera)y un día sale a cubierta y le dice al segundo a grito pelado, ¡¡"Segundo ya no se vende más café, el café que queda es para la marineria de mi barco".!!
Y la vil canalla de proa, tan contentos.


José Mª ¿tú tuviste de segundo comandante a D. Manuel Manso Quijano.? A bordo se comentaba que en el Galatea se fregaba la cubierta con tacos de madera, y que esta forma de baldear tan humillante, la suspendio el Sr. Manso Quijano. ¿Es esto cierto,? me gustaría saberlo.
Galateanos que ademas de embarcar navegasteis, los que tenemos muchas millas por la popa, sabed que vosotros podeís orinar a barlovento, tenéis la licencia en vuestras manos.
José Mª, ¿Tú recuerdas al teniente de navío D. Grabiel Estrella,? si te acuerdas te contaré una historia, y si no te acuerdas tambien te la contaré.
Bueno chicos os dejo, pues resulta que hoy tengo la media con sopa de ajo, y el contramaestre D. Vicente Costa me ha dicho que empalme la media con el alba. El pecado cometido ha sido, no saberme la maniobra del palo mayor.

Este contramaestre también fue duro, parecía que no estaba sexualmente relajado. Había otro que tambien pintaba bastos,,D.Inocencio Perez,
¡¡¡JUANETEROS Y GAVIEROS ARRIBA!!!¡¡LARGA!!!.
Si da el verde con el verde o encarnado con su igual, entonces nada se pierde, siga arumbo cadaa cual".
"Si a estribor ves colorado debes con cuidado obrar, cae a uno u otro lado para o manda ciar.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo, me estoy recreando en la lectura de tu comentario, la he leido varias veces, intentando unir todo lo que dices y así rellenar algunas lagunas que se escapan debido al tiempo transcurrido, o mejor dicho, intentar clasificarlas en ese tiempo en que tú estuviste embarcado conmigo, ya que sabes que yo estuve tres años.
Pero si, me recuerdo de todo lo que dices, en primer lugar, lo que quedo en mi mente cuando llegamos a Valencia, fué ver un barco frutero que estaba cargando naranjas y otras frutas, creo que nos dieron algunas, de eso tengo una muy vaga idea, yo era la primera vez que veía un barco frutero.

Efectivamente, el que hacia de Rey Neptuno era el maestro velero, lo mismo que en los viajes anteriores, hizo él de Rey Neptuno, claro que era todo muy divertido, que como sabes en las largas navegaciones se hacian los días muy rutinarios, y cualquier cosa que aconteciera que no fuera hacer maniobras con las velas, nos llamaba poderosamente la antención.
Eran novedades a las que prestabamos la mayor atención, ya sabes, como nos arranchábamos todos, desde cubierta, subidos a las jarcias, incluso en la verga mayor para no perder detalle de nada.

Gerardo, no se si estuviste tu embarcado cuando, navegando por los trópicos, hemos divisado una gran nube negra, y nos dirigimos hacia allá para que cuando descargara el agua, poder beneficiarnos de ese apetecible líquido, ya que el agua de los tanques estaba muy restringida.
Así fué, todos en cubierta con nuestra media pastilla de jabón nos duchamos bajo aquel chaparrón lo que quisimos.

También aprovechamos para lavar alguna prenda y tenderla en el castillo y también se pusieron unas lonas para recojer el agua de la lluvia y ser conducida a los tanques de agua dulce, ya sabes que era muy difícial hacer uso del agua duce para ducharnos, tanto con la belarmina sobre la banda de babor y en las duchas, por eso nos vino muy bien aquel fuerte chubasco, fue una bendición para nosotros y para el barco.
Y cuando teníamos que sacar los alimentos al castillo, los garbanzos, las lentejas, las judias blancas, todo se ponía en malas condiciones, y la carne tambien tuvimos que tirar bastante por la borda, por estar en mal estado.
Bueno claro que me recuedo de todo eso, no me llegaria el blog para relatarlo. sigue...
Castrillon dijo...
Sigue... Bueno, también recuerdo lo de los sacos de café que se embarcaron, y también reuerdo muy bien al Comandante Liaño de Vierna y Segundo, el comandante efectivamente tenía que tener puesto un aparato en los oidos para poder oir bien, y salía a cubierta para graduarlo.
Nosotros cuando lo veíamos salir a cubierta y graduar ese aparato, deciamos, "el Comandante ya esta poniendo el radar en funcionamiento". También recuerdo muy bien cuando pegó aquellas voces, dando órdenes de que no se vendiera más café, nosotros estábamos en la cubierta y lo oimos todos.

En la navegación se habia roto una pasteca, o roldana del palo trinquete que afectaba a un juanete, y cuando llegamos a puerto, salió él mismo con ella en la mano para llevarla a Capitanía. Me parece estar viemndo como salia por el portalón.

Lo mismo que cuando salimos de puerto Rico, no se si estabas tú, que habíamos entrado debido a que se había abierto una brecha en el mastelero del trinquete. Echamos allí muchos días hasta que fué reparada. A la salida estuvo el cónsul y varias autoridades, alli en el muelle para despedirnos, y le dijo el cónsul que salieramos del muelle con las velas dadas, pero claro, no había ni una brizna de viento, y le dijo el comandante que se pusieran a soplar todos desde el muelle.
Desatracamos y poco a poco fuimos hacia la salida donde cogimos un poco de brisa, y en la punta del morro, a la salida, estaba unas monjitas con una bandera española despidiéndonos, ¿estabas tú embarcado?. Por mis cuentas no estuviste embarcado en ese viaje, lo pongo en duda, tú dirás, ya que esos hechos fueron notorios.
sigue…
Castrillon dijo...
Sigue...
Gerardo, tengo que ponerlo así, en trozos para poder ordenar, aquellos hechos a bordo de aquel buque Escuela maniobra Galatea, así que ten un poco paciencia.

Referente a si, conocí al segundo Manuel Manso Quijano, !claro que sí¡ ese segundo tenía una perra pastor alemán, y navengando, ese animal siempre estaba en cuabierta a la puerta de su camarote y nosotros cuando estábamos de guardias de mar, también montábamos guardia de ordenanza junto a la puerta del Segundo y del Comandante.
Allí estaba la perra también con nosotros, pero un buen dia, entré yo de guardia de ordenanza, iba en traje tropical, pantalones cortos y camiseta y cuando llegué allí, se abalanzó contra mi ladrándome, tuve que ir y cambiarme de ropa, la normal para andar por cubiertas: pantalones largos aunque remangados y marinera. Entonces se quedó tranquila y así pude hacer la guardia de ordenanza.

Bueno esa perra, en un gran temporal que cogimos, y en un fuerte bandazo que se llenó la cubierta de agua, se la llevó fuera por la borda, y se perdió en la mar. No, no se podia arriar un bote, hubieran desaparecido todos. Esa perra se llamaba Layca.Ya te seguiré contando lo que me preguntas, ahora voy a cenar. Sigue....
Castrillon dijo...
Sigue.... Gerardo, referente sí recuerdo a don Gabriel Estrella, si lo recuerdo, lo mismo que a los demás oficiales, aunque no trataba mucho con ellos, solamente con uno al que yo conocía de Oviedo y también conocía a toda su familia.

Era don Rafael Zeñal, ese oficial, cuando me coincidia estar de guardia de guindola y estaba él en el puente, solía mandarme subir y alli hablábamos de Oviedo, y fue él quien me impulsó para que estudiara bien y sacar buenas notas, ya que yo no solía estudiar nada, y además casi siempre estaba castigado en los palos y en las jarcias, yo tenia "mala suerte".
Referente a los contramaestres que mencionas, no soy capaz a ponerles cara, a don Vicente Costas y don Inocencio Perez, el nombre si me suena mucho el de Vicente Costas, pero como te digo no recuerdo su rostro.
Bueno, ya te mandaré un correo contándote alguna cosa más, ya que aquí, de momento no creo que lo más ideal escribirlas.
Bueno Amigo y compañero Ureña,de momento lo dejo aqui, todavía tengo que contestarle lo de las Islas Azores, aquellos "bolos con leite" para el próximo escrito.
Miguel Gómez dijo...
¡¡¡ Oh Dios que fuerte es tu tempestad y que frágil es nuestro velero!!!

Es para mí un verdadero placer volver a reencontrarme con todos ustedes, en este lugar donde vertimos todas las vivencias que recordamos, en aquel viejo velero al que tanto recordamos.
Allí se creaba un verdadero ambiente de compañerismo y hasta de familiaridad, que aunque sean cosas de antaño las tenemos muy presentes, y seguimos cuidando aquellas viejas amistades como si de ayer se tratara.
Gerardo, tenía la seguridad de que tu estancia estaría marcada por la revolución y estímulo en este nuestro blog, ahora tenemos una batería de preguntas para hacerte, lo siento pero creo que serás exprimido como un limón, puesto que nosotros ya llevamos algún tiempo y estamos carentes de recuerdos vividos a bordo del Galatea. Estamos esperando nuevos comentarios que nos hagan recordar, lo que hasta ahora lo tenemos muy oculto en nuestras mentes.
Gerardo en cuanto a lo que preguntas a Castrillon de los baldeos, que comentaban que antes se hacían con maderas, yo siempre había oído que era con ladrillos, pero que eso de ser verdad se debe de remontar a los tiempos de Colón, no digo que sí ni que no, pero también habían muchas leyendas que no se ha podido documentar.
Lo que sí creo es que antes que el brus se hacía con escobas de brezo.

También te quería preguntar por la sopa de ajo, tú recuerdas si cuando navegamos juntos, que debió ser el viaje de Guinea, daban en la guardia de media la dichosa sopa de ajo, pues yo hasta afirmaría que no se dio durante toda mi estancia a bordo, tampoco esos bocadillos que según Castrillon les daban a media mañana.
Desconocía tu faceta de poeta, cosa que me alegra tener en poco espacio dos donde la competencia este presente por el bien de todos, ánimo a los dos.

Según dice Gerardo los que tenemos muchas millas, largadas por popa del Galatea podemos orinar por barlovento, en este caso ya sé donde tengo mi urinario, lo siento por Castrillon lo haré por barlovento pero en toldilla, que es el lugar que mas me apetece.
Eso de que los hombres no lloran es un cuento chino, todas las personas con sensibilidad, más de una vez se le escapan las lágrimas, aunque intentes retenerlas eso es la condición del ser humano.
Como de costumbre deseando un feliz día y sucesivos para todos no digo a Dios digo hasta pronto.
Mi gratitud a los seguidores. Saludos para todos.
Gerardo Ureña dijo...
Si José Mª, se que tú estuviste tres años embarcado en el Galatea.
Cuando yo embarqué en Marzo del 55, tú ya eras un autetico y viejo "lobo de mar".

En adelante procuraré contar mis vivencias de forma que tengan una relación, de esta forma, espero que puedas seguir el hilo más facilmente.
Te pido un poco de paciencia, piensa que solamente soy un principiante en el tema internet. Aplicando la lógica, me limito a desglosar lo que me va llegando a la mente.
También suelo tener días más ocurrentes, y por contra, otros más negados.
Resulta ser que tú eres el más veterano, por este motivo da la impresión de parecer, al que más le pregunto; esto mismo tambien me suele pasar con "Gran Miguel".

Si José Mª, yo he vivido la nube negra que tú relatas. Fue todo un gran espectáculo, había que verlo. Yo más bien la llamaria "Bendita Nube". Esto lo cuentas, y no te cree nadie, piensan que les tomas el pelo, que sabrán estas gentes lo dura que fue la vida en el Galatea. Alguno de vosotros es capaz de imaginar,( caso de ser posible,) ver un video real de la vida que soportamos y sufrimos los marinos de este velero.
Esto no se lo creería nadie, a veces pienso que no me lo creo, ni yo.
Eramos capaces de apagar los cigarrillos con la planta del pie, menudas medias suelas teniamos, tacón incluido.
Todos teniamos una lata vacia de kilo seiscientos gramos en la taquilla, le solíamos dar un sinfin de usos; de "peludo", no, pero de veterano, ya lo creo que si, no lo podías hacer muchas veces, pero todos sabéis que la veterania es un grado.

Una guardia de alba, un oficial en el puente, de los considerados buena gente, un contramaestre con el que te llevabas bien, una guardia tranquila, bajabas a la taquilla, podian ser las 5 - 6 de la mañana, los demas dormían como angelitos, subías con tu lata, te acercabas a la baca de estribor, abrías el grifo, ponías la lata debajo del chorrito de agua hasta llenarla, con la lata llena te dirigias al castillo, entrabas en los jardines de marinería. No había nadie, te desnudabas y con las manos te remojabas el cuerpo, pasabas el jabón y este se cogía rápidamente a la piel, te enjabonabas todo el cuerpo, después, con el resto de agua te quitabas el jabón y te quedabas como nuevo.
Amigos mios, ¡¡¡todo un arte!!!, te la jugabas , pero en el Galatea te jugabas la vida siempre. ¡¡¡OS QUIERO!!!
Castrillon dijo...
Hola Gerardo, no sabes cuanto me alegra volver a estar de tertulia con un compañero de aquella época, parece que estoy viviendo aquellos momentos, y viendo todos los pormenores de aquella vida a bordo, navegar, navegar,y navegar, ver salir el sol por el horizonte, y ponerse el sol por el mismo horizonte.

Los delfines acompañándonos, siempre el mismo espectáculo, observando las direciones de los vientos para efectuar las correspondientes maniobras, ver las cambiantes agitadas aguas del oceano, de marejada a fuerte marejada, mar gruesa, mar arbolada, tempestad, montañosa enorme y temporal, etc.etc. y volver a la calma, ese era nuestro escaparate del cual no podíamos desviar la mirada.

Bueno, como sabes Garardo, que cuando ya avistábamos las gaviotas por la mar sabíamos que estábamos cerca de tierra, ya nos empezábamos a animar más, a preparar el buque para la entrada a puerto,¡¡¡ ya no digo cuando avistabamos tierra!!! era cuando todos estábamos asomados por la borda viendo como poco a poco, nos acercábamos a tierra, cuando estábamos cerca tocaban maniobra para cargar los aparejos y entrar en puerto a motor, eran los días mas felices que teníamos.
Oye,! si¡ me recuerdo muy bien del tabaco que comprábamos en aquellas islas de cabo Verde y Madeiras, ese tabaco cuando lo fumábamos por las noches cuando nos acostabamos, todos nos levantábamos con grandes pesadillas.
Yo, lo noté al primer día, pero no dije nada, sería casualidad, pensaba, pero días más tarde todos se quejaban de lo mismo, y claro, era ese famoso tabaco Cliper.

Ya creo Gerardo, que teníamos la planta de los pies como si fuera de madera, muchas veces los domingos cuando descansábamos sobre la cubierta, al pie del palo mayor, nos quedábamos dormidos, y una de las bromas consistía en ponernos un papel entre los dedos de los pies, por la planta de los mismo y prederle fuego, se consumia el papel por el fuego pero no nos entarábamos, de lo duros que teniamos las mencionadas plantas.
Bueno Gerardo, podía estar recordándote las bromas que nos gastábamos unos a los otros, no había más diversiones.
¿Y los bolos con leite? eran una delicia, entrar en un restaurante, sentarse delante de una mesa con mantel y servilletas,ponernos unos vasos de cristal, unos tenedores, cosa que ya habíamos olvidado como eran, y listos para comer aquellos platos de pasteles y otras viandas.
Además todo era silencio, parecíamos unos señores, ya lo sabes después salíamos y cada unos por su lugar, en grupos a recorrer la isla y efectuar compras.

Ya se lo de las imagenes de la Virgen que compraban, era luminosa por la noche.
Oye tengo tanto en la cabeza que nos soy capaz a escribir todo a la vez.
Parece que ahora me estoy viendo con todos en las misma islas por tierra.
Bueno, sigo en otro apartado.
Castrillon dijo...
Oye Gerardo, mira en una de estas salidas a tierra, en la islas madeira, como sabes, cada unos ibamos a donde queriamos, (omito el lugar, ya me entendéis)

Después de pasar el día regresábamos a bordo, y cuando estábamos a bordo, habia una chica en tierra que queria hablar con el comandante,
Liaño de Vierna, pero el oficial no la dejó, y habló con el oficial, estaba llorando, le dijo que le habia quitado "virgo". Claro el oficial la echó del buque, pero seguía en el muelle llorando, el comandante se entero, pero no le hizo caso.

Cuando se largaron amarras, y desatracó el barco, se arranchó a son de mar, cado uno de nosotros sacábamos lo que habíamos comprado e intercambiábamos ciertas compras, bueno, el caso es que uno de la dotación saco una virgen de aquellas que relucian por la noche, y nos dijo su origen, se la había quitado a una joven que había estado con ella en su casa y se la llevó para el barco.
Luego hemos comprendido lo que iba reclamando aquella joven, como hablaba muy mal el español, en vez de decir "virgen" decia "virgo" fué un cachondeo durante los primeros dias.
Bueno Gerardo, no te doy mas el palizón, recuerda que tengo que mandarte un correo comentándote algo del buque que, no lo he mencionado en público.
Seguiré recordándote cosas, ya que me acuerdo de muchas y de los compañeros.
Recibe un muy cordial saludo.
Jose Antonio Díaz dijo...
Oteando el portillo, vi que se habían acercado otros companeros de mar de tiempos ya pasados, viviendo en medio de las praderas del Oeste Americano (en Texas ), aunque no muy lejos de Galveston ( Ciudad de Galvez, de Don Bernardo de Galvez ) donde creo que naufragó el Sr. Bernal Núnez Cabeza de Vaca?. El solo, se escapó del naufragio con un hombre de color, que creo que al de color se lo comieron los caníbales, pues allí vivian en ese tiempo los "Karankuas" ( Karankawesen Ingles ).
Bueno pues lanzado por el oleaje como le sucedió al paisano Cabeza de Vaca, que terminó en California, después de vivir con un montón de tribus, que lo convirtieron en jefe o brujo de ellos, y que volvió a la Piel de Toro después de unos 7 años de correrías. Que cuando las contó, dijo que estaba transtornado?.

Creo que esa expedicion fue la de Narvaez. Todos los galeones se fueron al fondo, exceptuando a Nuñez Cabeza de Vaca y el hombre de color que se escaparon, y terminaron en la isla.
Veo con interés que un compatriota,F. M. Ortiz dice tener en su posesioó la lista de esepecialistas del Curso 1967-1968. Dato interesante y curioso. Yo precisamente terminé el curso en el año 1968, precisamente en Junio de 1968.

Salud y Buen Animo a Todos!
Desde el Lejano Oeste, por donde tiempo atrás pasron los paisanos buscando El Dorado y encontraron serpientes, escorpiones, desiertos interminables y tribus de mucho respeto, y donde la infinidad del horizonte no tiene limite, ríos inmensos, praderas sin fin, cañones profundísimos y cielos estrellados, donde se puede uno integrar con el firmamento.
Saludos a Todos. Jose Antonio Diaz.
Gerardo Ureña dijo...
¡¡Hola chicos, buenos días a todos.!!
Si José Mª, La carne que tiramos, estaba más negra que los testículos de un grillo, la carne y el pescado también.
Tuvimos averias importantes en las cámaras frigoríficas. Esos días nos dieron generosas raciones de huevos fritos. Nosotros no teníamos problemas de colesterol, ni sabíamos que era. Teníamos dos soluciones, comerlos, o tirarlos al mar; nos pusimos más morados que un lirio comindo huevos. Yo creo, que hasta lo celebramos.
Me preguntas si yo hice el viaje de Puerto Rico, te cuento, el viaje de Puerto Rico, me lo perdí.
Una semana antes de salir a la mar, me invadió una vírica conjuntivitis. El Capitán médico, no lo vio claro y me hopitalizó. El barco salió a la mar y yo seguia hospitalizado. Siete días despues me dierón el alta.
El Galatea no estaba y me mandaron al Arsenal de Ferrol. Yo estaba desesperado, pensando que el primer curso de Ayudante Especialista lo perdía.

En el Arsenal me trataron bastnte bien, me valoraban mucho, el ser profesional de la Armada. Tenia un valor añadido.
Un día, pido permiso, utilizando el trámite reglamentario, para hablar con el Segundo Comandante del Arsenal. Yo sabía que el primer puerto era Tenerife. Al Segundo le pido que me envie a Canarias, con el fin de retomar el barco, incorporarme a mi curso y seguir viaje.
Este hombre me dice, que no depende de él y que debo dirigirme a Capitanía y exponerle mi problema al Segundo de Capitanía. Le cuento la misma historia, y me dice. "Nuestra Marina, no esta preparada, para enviar un marinero en avión, con el fin de incorporarse a su barco".
"Lo que si puedo hacer, es darte un mes de permiso, cuando se termine, vienes a verme y te daré otro mes, así hasta que llegue el barco". Subí al tren y rumbo a Valencia, sigue...
Gerardo Ureña dijo...
El 15 de Julio de 1956, llegaba el Galatea.
El ayudante especialista 55-A, esperando con su saco embarcar de nuevo.
Me presento al Oficial de guardia, saludo a los compañeros, y me cuentan todas las calamidades que pasasteis en ese viaje.
"Guili", Zurita y unos cuantos compañeros, me dicen que permanecísteis más días de lo previsto arreglando el palo trinquete.
Me cuentan que, algunos Oficiales, compraron coches de segunda mano, que luego los dejaron abandonados. Me hablan de los almacenes NEBI,(no se si está bien escrito)me dicen que alli, todos tenían televisión(aqui no se conocia) y me comentan algunos spots publicitarios. Por ejemplo:Señora ¿quiere evitar el embarazo, use condones el pegaso". O este otro: tu gustas al sebenón y el sebenón te gusta a ti,¿cierto? ¿-?.
Me dijerón que las puertorriqueñas, se volcaron con vosotros y todo fueron muestras de cariño.

Después de departir un largo tiempo de conversación, me dirijo al Detall, allí me preguntan si me apetece salir de permiso en la primera tanda, respondo que sí, y el día 16 otra vez a Valencia.
El segundo viaje del 56 ya sabes como se hizo. Nos quedamos a reparar toda la arboladura, siendo el mejor curso práctico que se dió en el Galatea.
Y yo supongo José Mª, que a finales del 56, tú desembarcarías.
El último viaje que yo hice, fue el de Guinea.
En Agosto de 57 me destinaron al minador "Eolo", con base en Cartagena. A los 20 días permuté con otro cabo, embarcando en la Fragata Sarmiento de Gamboa, donde me recitaron Diana Floreada el 28 de Diciembre de l958. Ese día salí con pasaporte y residencia en Valencia, en Valencia sigo. continuara...
Castrillon dijo...
Hola Ureña, no sabes la alegría con que leo estos artículos.
Llevas razón, el primer spot publicitario que oímos nosotros cuando estábamos navegando a unas cuantas millas de la costa de San Juan de Puerto Rico, pues a bordo, nos habian puesto los alavoces de la Radio. Fue lo siguiente: caballero use condones la Paloma, los usa el presidente..."""". No sabes tú la cara que hemos puesto todos, ya que jamás habíamos oído tales anuncios y menos poniendo en el mismo al presidente de esa nación.
Nos mirábamos unos a los otros, con caras extrañas, luego fuimos abriendo los ojos, y nos echábamos a reir, eso fué la primera vez que fuimos a Puerto Rico. Ahí en ese puerto lo hemos pasado muy bien, sólamente teníamos un problema, que solíamos meternos mucho con los americanos, siempre estábamos enzarzados en peleas, lo mismo que con los ingleses.

Claro que, ya tenían televisión, en blanco y negro.
Cuando entrábamos en San Juan de Puerto Rico, lo primero que hemos visto, por la banda de estribor fué un gran hotel que se llamaba "CARIBE HILTON", bueno ya he contado alguna vez lo bien que lo pasamos en aquel puerto las dos veces que estuvimos, y cuando pasamos por el mar de los sargazos, era digno de ver, parecía una gran pradera de hierba verde.
Si Ureña, yo en ese viaje salí cabo segundo de maniobra, el día 20 de junio del 56, no te haces una idea de el gran orgullo que teníamos a bordo todos, hemos estado en el barco un mes sin ser destinados. Salinos todos a tierra a hacernos fotografias, íbamos a los bares de siempre con los galones, y todos nos felicitaban.

Si Ureña, después de estar tres años navegando a brazo partido y con todas carencias, nos vimos recompensados con esos ansiados, primeros galones, he de decirte que fueron los más felices de todos los demás galones con los que fuimos ascendiendo a lo largo de la carrera militar.
¿Que si mereció la pena pasar todas aquellas penurias, te digo que rotundamente !!!!!!!siiiiiiiiiii !!!!!! ya que fué mayor la alegría del final que todo lo pasado, lo pasado ya esta amortizado.
de ese buque se salieron muyyyyyy buenos maniobrasssss, si señor. Luego en el mes de Agsto nos destinaron, yo fui al Destructor Velasco en Palma de Mayorca, luego a la escuadrilla de dragaminas en ese mismo archipiélago donde estuve varios años.
Bueno, tendría hasta mañana contándote ese tiempo pasado a bordo y no terminaría, ya que me van saliendo los recuerdos a raudales y quiero poner tanto que, no se por donde empezar.
Bueno Ureña, de momento te dejo, no sin antes agradecer a nuestro amigo Arminio, el lugar que ha preparado para estos encuentros, después de años sin vernos ni hablarnos.
Recibe un muy cordial saludooooooo.
Gerardo Ureña dijo...
La versión de la perra Layca del Segundo Comandante, cuando yo embarqué, pertenecia a un pasado muy reciente. Es por esta razón, que fue contada por todos los veteranos. Algunos aseguraban, que fue una patada de algún marinero que le tenía manía.
Otros relataban otras versiones, de cualquier forma, lo que yo pude ver claro de todo esto,es que,esa perra no gozaba de las simpatías, entre la dotación. Alguien me dijo que le gustaba el chocolate.
Lo que recuerdo, fresco y cercano en el pensamiento, es a la "Pepa", "Pepa" era la gata que tenia el Comandante Liaño. La trataba con un mimo envidiable, y se hartaba de hacerle fotos. ¿Quien de vosotros recuerda las latas amarillas, de sardinas en aceite con lengueta para abrirlas,de la marca "Miau"?.

Había tres tipos, 180 Grm. 320 Grm. y 450 Grm. El Comandante, le abria una lata de 320 Grm. y se las ponía en un plato. La gata se las comia en un plis-plas.
Esto que os cuento, no me lo dijo nadie, esto lo he presenciado yo en primera persona del singular, montando guardia como ordenanza en la puerta de su camarote.

Me daban ganas de darle una patada a la gata, y comerme las sardinas. Un buen día, la gata desapareció y nunca más se supo. Había quienes comentaban que alguien fue de cacería y se la comieron, lo cierto es que no se la vio más a bordo.
Era un día de mucha calma, la mar estaba como un plato, Pernambuco a tiro de piedra. Mi amigo "Guili" y yo estabamos pintando el costado de el barco por la banda de estribor, la unica compañia que teníamos, un par de brochas y otro par de botes de pintura blanca.
De repente, uno de los cabos que amarraban la guindola en cubierta, se suelta, Guili se encontraba más cerca del cabo que permanecía amarrado, yo no. Milagrosamente,(aun hoy no logro entender como) me pudo asir al cabo que estaba firme, el tiempo que tardarón en darse cuenta en cubierta, a nosotros se nos hizo eterno.
Lo primero que preguntó el contramaestre, al asomar la cabeza, fue preguntar por las brochas y la pintura, que por supuesto fueron a parar al mar y lo primero que hicimos nosotros, fue acordarnos de su familia.
Una vez realizado el rescate de nuestros respectivos cuerpos, viles y canallescos, fuimos nuevamente reincorporados a nuestra labor de seguir pintando. Tú José Mª, ¿recuerdas algo de esto?.
Tambien arriamos botes para hacer ejercicio de remos, y cogimos una tortuga, de las llamadas "bobas". Que por cierto, metimos dentro de una tina de madera. El Capitán médico que era un "cachondo", nos llamó la ateción y nos reprendió, pues todos la queriamos tocar, y nos dijo: vosotros os creeis que esto es como el "pilendrín" que de tanto tocarlo crece.

Mariposa, que aturdida
con tus efímeras galas
abres tus sutiles alas
al frenesí de la vida;

no vueles enloquecida
tras la dicha baladí,
dejando flores aquí,

por las flores de otro huerto.
Porque en los mares sin puerto
es la vida un frenesí.

Hasta luego chicos; podéis sentiros orgullosos de haber pertenecido al mejor velero de la Armada Española. "¡¡¡Somos los más cojonudos"!!!.
Arminio dijo...
Hola a todos. Que alegría ver a tanta dotación del Galatea, con viento fresco, contando a son de mar las anécdotas de nuestro velero.
Gracias Jose Antonio Díaz, que nos escribe desde Tejas, te lo agradezco enormemente y te animo a que no lo dejes. Igualmente a Gerardo Ureña, que nos cuenta las otras versiones de los acontecimientos pasados, y es de agradecer que se den versiones diferentes para saber la realidad.
Yo ando en la enfermería, a base pastillas El Ancla, a ver si me cortan la fiebre de esta gripe que he pillado.
Ya hemos salido en el Diario de Cádiz, os mandaré la página, si no lo ha hecho ya Jaume. Un saludos a todos.
Arminio dijo...
7 de mayo de 2012 DIARIO DE CADIZ
Al rescate del buque escuela 'Galatea'
Un grupo de antiguos "galateanos" lucha por recuperar imágenes e historias relacionadas con el antecesor del 'Elcano'
Fue bautizado en diciembre de 1893 con el nombre de Glenlee, el mismo con el que reposa en aguas de la tierra que le vio nacer: Glasgow.
Pero entre su nacimiento y su reposo final, cientos y cientos de historias de cientos y cientos de marineros hacen que este buque escuela, considerado como el antecesor del Juan Sebastián de Elcano siga vivo y navegando. No ya por las aguas sobre las que tantos buenos recuerdos depositó en la mente de muchos "galateanos", sino sobre Internet, gracias al buen hacer y a las buenas intenciones de un grupo de estos "galateanos" que lucha ahora no sólo por recuperar el buque para España sino, al menos, recuperar su espíritu, sus imágenes y sus historias.

Un ex jesuita y ex militar catalán, Jaume Matamala Blanch, es uno de los ideólogos de este buceo por la historia en busca de testimonios e imágenes que reconstruyan la vida de este singular buque de tres palos construido en los astilleros Bay Yard en Port Glasgow a finales de 1896. Pero no fue hasta 1922 cuando se incorporó a la Armada Española, en la que permaneció en activo hasta 1969, año en el que ya inició su hundimiento en la historia.

Antes de recibir en aguas españolas el nombre de Galatea, con el que fue incluso protagonista de la histórica película que rodó el propio Francisco Franco, Raza, fue rebautizado, primero como Islamount y luego como Clarastella.

En sus inicios fue utilizado para el transporte de grano. En 1905 pasó a ser propiedad de la empresa de Liverpool Richard Thomas & Co., a quien fue requisado por la Royal Navy durante la Primera Guerra Mundial. Y bajo bandera británica surcó los mares hasta 1919. Desde esas tierras pasó a territorio italiano, al ser adquirido por una naviera genovesa que lo usó como buque mercante. En esa época, al futuro buque escuela español se le hizo una serie de remodelaciones que lo dotaron de una gran modernidad.
En 1922, España se vio con posibilidades para adquirir dos buques escuelas y le compró a Génova el Jodanhill y el Clarastella, que ya, en aguas españolas, sería rebautizado una vez más como Galatea, nombre con el que adquirió la gloria en el seno de la Armada Española que ahora guía el espíritu de este grupo de recuperadores que encabeza Matamala.
Y fue precisamente en Cádiz, en los astilleros Echevarrieta y Larrinaga donde la nave se transformó definitivamente en buque escuela. A España le costó poco más de 850.000 pesetas, cantidad a la que se sumó un millón más con motivo de la modernización y conversión en escuela a flote.
Sigue...
Arminio dijo...
Su primer viaje de instrucción, ya como Galatea, lo protagonizó en 1925, ya como barco destinado a la formación de futuros oficiales de la Armada. Y tan sólo tres años después, fue relevado por el Juan Sebastián de Elcano, aunque, tras una nueva modernización de sus motores, fue asignado a la escuela de aprendices marineros especialistas como buque escuela de maniobras.
El tiempo, sumado a múltiples vicisitudes meteorológicas y bélicas provocaron que el 15 de diciembre de 1959 quedara amarrado en el arsenal de Ferrol como pontón escuela de maniobra hasta su baja definitiva en la Armada en 1969, tras 47 años de servicio en la Armada Española. Y fueron voces populares las que lograron frenar las intenciones de la Armada de desguazarlo.

A partir de ahí, el abandono por parte de las administraciones y una serie de expolios continuos provocaron el declive de la embarcación, que llegó incluso a servir de cobijo para los indigentes.
En 1982 se llevaron a cabo algunas reformas en Bazán logrando atraer para sí de nuevo la atención de algunas ciudades como Sevilla, Barcelona, Santander, Palma de Mallorca o Ferrol. De hecho, durante la Expo del 92 se habló de adaptarlo como centro de comunicaciones y luego como museo naval junto a la antigua escuela de mareantes de Sevilla. Y fue sobre las aguas del Guadalquivir donde el Galatea se hundía cada día más, no sólo físicamente sino espiritualmente hasta que se decidió su venta en pública subasta y fue adquirido por 8 millones de pesetas precisamente para su ciudad de origen, Glasgow, donde de nuevo recuperó su nombre de Glenlee. Fue así remolcado en junio de 1993 hasta la ciudad de Greenock, donde hoy permanece varado.

Pues ahora, "para no dejar que el paso del tiempo se lleve para siempre el recuerdo del Galatea", Jaume Matamala y Arminio Sánchez Mora, junto a "las inmensas y entrañables colaboraciones de los antiguos alumnos galateanos" han sido los impulsores de este proyecto de rescatar fotografías, nombres e historias que, si no fuera por esta iniciativa, "se hubiesen perdido para siempre", tal y como reconoce para Diario de Cádiz, el marino Matamala. Así, todos ellos dicen haberse sumergido en la recuperación de "las más bellas imágenes de nuestro insigne buque escuela, recuperando incluso las tomas del velero que se filmaron en la película Raza". Todas esas instantáneas están saliendo a la luz y navegando ya en la red de redes, por ejemplo en el blog www.buquegalatea.blogspot.com.

Por su parte, Arminio Sánchez Mora está realizando, según comenta Jaume Matamala, un "gran trabajo histórico literario, siendo su empeño revivir al olvidado velero, mediante relatos de primera mano contados por sus navegantes, quedando todo ello reflejado en :
www.buqueescuelademaniobrasgalatea.blogspot.com.

En la actualidad, Matamala anuncia que está en "avanzada génesis" un proyecto para visitar en 2013 el Galatea-Glenlee con antiguos "galateanos", en un año en el que Glasgow ha optado por nombrar al Galatea hijo pródigo, "rescatándole de un apartado muelle de Sevilla".
Este grupo de "galateanos" anda buscando toda la información que ayude a recuperar, de alguna manera, al Galatea. En uno de sus blogs ofrecen una dirección (tecnologia@jet.es) donde enviar ideas, testimonios, historias o imágenes sobre el buque escuela.
Meizoso dijo...
Y han tenido que pasar tantos años para, que por fin se hable algo más, de lo anteriormente consabido en las noticias difundidas por la gran mayoría de los medios, en que por lo bajines, cantaban que había sido escuela de subalternos y guardiamarinas, sin mencionar, ni por asomo que lo fue de Maniobra.

Este resurgimiento se debe a la insistencia de los anteriores foros truncados y misteriosamente desaparecidos a pique en las abismales profundidades de la información sesgada y que, posiblemente "no interesaba dar a conocer". Fueron los nostálgicos del Galatea, los empecinados en rescatar con sus fotos y sus comentarios que hicieron revivir, resucitar lo que posiblemente, se pretendió acallar en algunos medios de comunicación afectos con el contubernio que lo hizo desaparecer? No lo sabremos nunca jamás...

El caso es que ha salido, por obra y gracia del empecinado Arminio Sánchez Mora y sus acólitos...Al principio abrían y desaparecían por arte de la magia del mago de oz, todos sus enterrados comentarios de Meizoso, de Contreras, de Arminio, Juan, Castrillón, Gómez y demás familia, lo cual era motivo de nuestra perplegidad y asombro.
Aquellos comentarios censurados con la tijera de la censura de un poder fáctico ya no volverán como las oscuras golondrinas tampoco volvieron, porque se las comió el gato? Este reflotamiento es un reconocimiento a la labor tenaz de los galateos, galateanos...Y brindo porque también mi publicación inédita y autofinanciada y auto editada, también fue el motor y la chispa de la ignición. Me siento gratamente emocionado por los avances en el lavado y aclarado y centrifugado que ha desvelado la historia más entrañable y brindo con todos vosotros por ello. Muchas gracias. Alberto Vera Meizoso
Meizoso dijo...
La participación se hacía presente en otros foros administrados por un indefinido buque petrolero y fantasma que los reconvertía en gasoleo y sus derivados...

Entonces alertados aquellos Gómez, Castrillón, Arminio, Díaz y yo, como pioneros...Decidimos crear otros también sumergidos foros capitaneados por el incombustible apasionamiento de Arminio Sánchez Mora, que no cejó en su empecinamiento logrando reflotar y revivir esta historia tan desconocida, como misteriosamente acallada.
Echo de menos aquellas primeras intervenciones donde se derramaba el espíritu rebelde y revolucionario de todo aquel, que tenía algo bueno que aportar... Alberto Vera Meizoso no es anónimo, aunque así figure como tal.
Meizoso dijo...
Recientemente a través de un programa que ensalzaba la fidelidad y amistad de los animales y de las aves con los hombres, se había extravíado un loro...

Y éste parolando dio su número de teléfono y direción de carretilla como una cotorra...
Todo esto me evocó al recuerdo a bordo de los veleros españoles del s XX del Galatea y del Juan Sebastián..Y en esa ensoñación, porque confieso que navegué a bordo del segundo citado, cuando tras la estancia en aquellos exóticos puertos carbeños, muchos de nosotros adquíriamos papagallos, loros y cotorras por encargo de nuestros vecinos.
Y yo tenía buena constancia, de que el zapatero de Viveiro había encargado una ave a un conocido que iba destinado de legionario al antiguo Sahara Español...Por favor, le dijo, traeme un loro, aunque sea del Sáhara Occidental, pero tráemelo...
Entonces, fue en Santo Domingo donde embarcaron de tripulantes muchos parlanchines y gruñones y viejos loros correosos a bordo... El caso es que, la mayoría de estos polizones y a la menor oportunidad que se terciase, emprendían el vuelo en medio del Atlántico hacia ninguna parte...

El último era del carpintero y era muy gruñón imitando, por encargo del contramestre mayor de Pontedeume... A tierra firme, juro que no llegó ninguno de aquellos "encargos, sin dinero no pasan de Cabo Silleiro. Alberto Vera Meizoso y su musa tempranera para todos los marinos marineros del Galatea y del Juan Sebastián de Elcano.
Meizoso dijo...
Y recién embarcado a bordo del Galatea para realizar con mucho aprovechamiento el curso II, mandaron a formar en el alcázar frente a la campana y del cuadro de arrestados a la brigada del "Rock and Roll".

Estabámos en posición relajada de descanso, cuando el hueso del superintendente tercero de a bordo, fumando un habano pasó revista al nuevo alumnado con cara de poco amigos y un poco enchotado...
Entonces mandó dar un paso al frente al Señor del Anillo del Escarabajo, pero nadie pió, entre otras porque nadie de los presentes sabíamos quién era tal. Normalmente el recibimiento a bordo era homenajeado con el bautizo de tener de carretear aquella inmensa montaña de carbón mineral destinada al silo de las cocinas y calderas de la calefacción de la camareta de oficiales...

Pero, de esta vuelta el objetivo era cazar a ese mentado señor del anillo. Tras un rato de un silencio sepulcral, me señaló como el culpable, mandando a pintar todos los penoles de blanco nuclear y una vez acabada la faena, mandó picar, bruñir, miniar y pintar todos los cáncamos para resacir expiando por todas las penas habidas y por haber a bordo de aquella galera de lata llamada "Galatea".

Recordad, que dicho oficial se había quedado con la vaina del anillo mercado en el mercado del tercer domingo de mes y que se celebraba en la Plaza del Carbón de Ferrol.
Pero donde lo divisó, fue un año después, cuando estando yo encima de la verga del trinquete del Juan Sebastián y él paseando por los muelles de La Carraca... Alberto el que espera a su prima-vera.
Anónimo dijo...
Hola soy una señora que no ha conocido nada del Galatea pues soy más jóven, pero soy de Cádiz y tengo mi hermano que es marino y conozco bien el Juan Sebastian De Elcano y que casualidad que este verano voy a Escocia.

Espero poder ver el Galatea y siendo un buque español, más todavía un saludo y que todo salga bien.
Arminio dijo...
Gracias por escribir en este apartado y dedicar un poco de su tiempo a visitar este velero que ya no está entre nosotros.
Casi todos nosotros tenemos vinculaciones, por nuestra especialidad, con Elcano y con Cádiz. Personalmente estuve destinado dos años en Cádiz y recuerdo muy bien la ciudad y mi vida en ella.
Esperemos que en un futuro no pase con el J.S. de Elcano lo mismo que con el Galatea.

Un saludo a usted y otro a todos los gaditanos, esperando que se acuerden del Galatea, que quizás fué escuela de muchos de ellos.
Carlos dijo...
Buenos días les deseo a ustedes y les estoy muy agradecido, por la labor que están haciendo: vídeos, toques de silbato, navegaciones del Galatea, en fin que es de lo mejor que estoy viendo sobre el Galatea.
Espero seguirles más amenudo ya que me he enterado de todo esto por la publicación del Diario de Cádiz.
Soy un Capitán de Corbeta, destinado en esta ciudad de Cádiz.
Animo a los verdaderos marinos, pues no hay lugar a dudas se formaron en el Galatea. Espero que continúen con esta entrañable labor, que está dando a conocer a ese gran desconocido velero.
Son ustedes los que han vuelto a poner al Galatea donde siempre tuvo que estar.
Desde Elcano dijo...
La tecnología, acerca a los que en su día fueron casi almas gemelas.
Desde el Juan Sebastíán de Elcano, nos hacemos eco de la grata noticia publicada en el Diario de Cádiz.
Seguiremos muy de cerca las navegaciones del Galatea, desde esta cubierta llena de también de Historia y que ahora está muy próxima a Cuba, para dirigirnos a Nueva York.
Un saludo de algunos enamorados de la navegación a vela que tienen la suerta de seguir disfrutándola pero con más tecnología y menos sufrimientos.

Un aplauso a esos veteranos que navegaron en el Galatea y a los que seguimos cada día con entusiasmo, siendo el ejemplo a seguir para muchos de nosotros. Ya son leyenda en este peculiar mundo de la mar.
Arminio dijo...
Feliz travesía y un fuerte saludo deseamos a la tripulación del J.S. de Elcano, buque estandarte de nuestra Armada Española y lugar soñado como destino de casi todos los especialistas de maniobra que estuvieron en el Galatea.

Igualmente al señor Carlos, agradeciendo que haya descubierto el blog y nos siga, al menos , de vez en cuando.
Un saludo a todos.
Arminio dijo...
Gracias Alberto, menos mal que podemos ver tu mano locuaz e inteligente dibujando esas narraciones en este blog, pues ya sabes, y no hace falta que se te diga, que eres uno de los pioneros en el comienzo de esta singladura del Galatea, velero desde donde partimos todos y lugar de encuentro nuevamente.
Un abrazo muy fuerte.
Miguel Gómez dijo...
Ante todo me gustaría agradecer el incondicional apoyo que estamos recibiendo últimamente, en nuestro proyecto de rescatar en lo posible, de las fatídicas garras del olvido a este emblemático velero que muchos años surcó los mares con pabellón español, y que fue cuna de los maniobras de nuestra Armada.

Como es lógico me estoy refiriendo a nuestro añorado Galatea, el que en nuestras mentes nunca fue olvidado y nunca lo será, creo que los que estuvimos entre sus cuadernas y bregando por su arboladura, tenemos una deuda con él, siendo nuestra intención cumplirla antes de que sea demasiado tarde.

Estoy casi seguro que lo conseguiremos, aunque a muchos que también les hubiese gustado estar en este evento se quedaron en el camino, pues por ellos y por nosotros espero que hagamos un brindis con un vino español, a poder ser en su cubierta en donde se esconden un sinfín de recuerdos, de nuestras andanzas por esa citada cubierta y sobre todo en el castillo, lugar de reuniones con aquellos compañeros que de alguna forma formaban parte de nuestras familias.

En segundo lugar también quería expresar mi gratitud a todas las personas que desde hace ya largo tiempo, se toman la molestia de seguir estos comentarios soportando mi nefasta narrativa así como mi ortografía, pues las circunstancias de la vida no me permitieron avanzar más en esta materia. Espero y deseo que con estos nuevos vientos, este blog sea potenciado y enriquecido por otras envidiables narrativas literarias.
No puedo dejar de mencionar a las personas que tomaron esta iniciativa, creando las líneas maestras de este proyecto, ya saben que cuentan con mi más sincera admiración, refiriéndome a los que de forma continuada han ido depositando sus valiosos comentarios muchas veces con muy pocas esperanzas, pero su gran voluntad y tesón han tenido su merecido reconocimiento de parte de los seguidores, los que cada día se aglutinan más y más.

En cuanto a lo que a mí se refiere son necesarias muy pocas letras para expresar mis aportaciones, han sido algunos comentarios muy insignificantes carentes de interés y valor literario, es decir mi pequeño granito de arena no ha hecho la montaña, lamento el no poder haberlo hecho mejor, mis excusas por mi ego que creo que en cada comentario esta de manifiesto.
Una vez más gracias a todos, mis mejores deseos también para todos e intentaré mejorar en lo posible al plasmar mis recuerdos y añoranzas.
Saludos para todos sin excepción alguna.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo. Vamos a ver, referente a la perra que tenia el 2º comandante, que yo sepa, nadie le tenía en desprecio ya que ella solamente se limitaba a estar con su dueño o a la puerta de su camarote en el alcazar, o sea que no nos molestaba para nada.
Como te dije, yo sólamente tuve un percance con ella, cuando entré de guardia. Era por la tarde, navegábamos por los trópicos y por lo tanto teníamos que ir ligeros de ropa como muy bien sabes, cuando yo fui a la guardia de ordenanza y al llegar junto a ella, me enseño los dientes y me ladró a más no poder. Tuve que marcharme y ponerme pantalon largo, ahi bien, todo fue normal.

Así que no creo que nadie tuviera odio a ese animal, por lo menos yo jamás oí tal cosa,te lo digo por que yo estaba presente en todo momento.
Cuando se perdió la perra, fue en un muy fuerte temporal, teníamos puestos los cabos de proa a popa para cogernos fuertemente a ellos cuando queríamos, y podíamos ir de proa a popa o viceversa, siempre que la mar nos lo permitiera.
Como te digo, la perra estaba a popa junto al camarote del segundo, y las escoras del buque eran muy pronunciadas, el agua que entraba era demasiada y salía por la otra banda con una fuerza arrolladora, no se podía estar sobre la cubierta, a veces teniamos que colgarnos de las barloas y suspendernos de ellas con las piernas en el aire para que no nos dieran las brazas de las maniobra que rodaban por toda la cubierta.
Bien, ¿tú crees que alguien que esté descalzo, con las piernas todas mojada y frías va a dar una patada a un animal como ese, pastor alemán y tirarlo por la borda?. Imposible, la borda la parte mas baja tendrá como mínimo medio metro de altura hasta la tapa de regala.
Por eso te digo que es imposible, aparte de que era imposible, por que teniamos que estar con las piernas abiertas e ir flexionándolas según fuera la escora para mantenernos con nuestros cuerpos en vertical.
Caso de intentar romper con esa forma de estar y con los fuertes bandazos iríamos rodando por la cubierta y nos pasaría como a ese animal.
Mi posicion cuando ocurrió ese hecho, era en la banda de babor hacia proa, donde estábamos varios con los contramestres, esperando los aconticimientos. Cuando se oye desde popa, que la perra habia sido arrastrada por una gran ola que entró por esa misma banda y que por lo tanto la había llevado el agua.

Enseguida nos pusimos en alerta, hablaban de si se arriaba algun bote, pero eso era imposible, al momento quedó desechada esa idea, ( te estoy hablando literalmente como lo hemos visto y oido ).
Esa fue la verdadera historia de ese animal y nuestra, lo que pasa es que después se le pueden añadir lo que pudo haber sido, o sea leyendas de cubierta, pero te digo, fuí uno de los testigos que presenciaron ese acontecimiento.
Lo de la gata del Comandante, eso fue verdad, bueno, yo te contaria más sobre ella, la pobre creo que se marchó de aburrimiento de nosotros.
Bueno, todavía tengo que contestarte a otras preguntas que me habias hecho, pero para más tarde.
Oye, mira, ya he leído el comentario que hizo el periódico del Cádiz, y gracias a nuestro buen amigo y compañero Arminio y a Meizoso, que con su tesón han conseguido ir reuniendo todos los datos posibles para intentar dar a conocer algo de las largas navegaciones de aquel buque.
Sin más por ahora recibir todos un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo, a todos los que escriben como a los que leen.
Meizoso dijo...
Sres Gómez, Castrillón y compañeros: Tanto al primero, como al segundo les calificaría como de unos excelentes cronistas con mucha vena literaria y ustedes permitan decir, que han realizado un trabajo excelente e intachable y que me recuerda mucho aquella estrofa de "Por tí a los mares ofrecí mis obras y pensamientos".
Ustedes con estas aportaciones para el rescate de la memoria histórica de ese barco han sido fidedignos en honor a la verdad que ahora reluce brotando en la prensa con la inestimable ayuda de Jaume Matala y del poeta, poeta de Arminio y de todos sus colaboradores.

La Historia que sobre las mascotas relata el sr Castrillón es digna de una mención honórifica en la defensa de los animales, tiene toda la razón en su breve exposición, también por la descriptiva que a todos los amantes de los canes y de los mininos a todos nos inunda, ya no a los sollados, si no a nuestros corazones.
Motserrat Caballé decía que potencialmente todos podemos ser excelentes tenores y sopranos, el secreto radica en practicar el arte, en este concreto caso de la escritura...
Yo observo reflexionando a martillazos, que a través del ejercicio ustedes en esa contrastación, se imitan a don Migueles de Cervantes Saavedras, menudo dominio, menuda limpieza, menuda ortografía y menudo sintáxis y vocabulario adquirido durante la navegación virtual en este, y en los pasados foros...

El vínculo de la amistad forjada durante la creación de este libro de bitácora, ha llegado muy lejos y a pesar de no haber establecido otra relación que la epistolar, somos grandes amigos y ese sentimiento de camaradería ha prevalecido entre los participantes. Me quedo con esas palabras de humildad, con las que se despide el sr Gómez.
Y enorgullezco mucho por saber quienes sois en toda esa amplia conjunción, de los lectores y de los que, a pesar de no participar han sido en el silencio de su anonimato, nuestros más fieles seguidores...
Todos sin excepción, los que están y los que se fueron. Todos vosotros conformáis el espirítu trasmitido por nuestros profesores y por nuestros monitores, pues de sus enseñanzas recibimos ese capital y ese galardón que perdurará con la inestimable ayuda de nuestro buen amigo hacedor de Arminio Sáchez Mora, que seguramente ha dejado derramar sangre y muchos sudores para la consecución, no sin grandes renuncias y sacrificios, durante las noches, tardes y mañanas de plena dedicación.

Sea pues mi homenaje a todos, pero claro, vosotros por una de esas casualidades habéis confluido en este reencuentro de nostálgicos y acérrimos marineros que todo lo entregaron, a cambio de nada, de nada.
Y si los de arriba no se enteran, o no quieren enterarse, que sea en mi propio nombre con todas las cornas de guirnaldas colgadas de vuesos pescuezos, CONTRA! Alberto Vera Meizoso.
Meizoso dijo...
Confieso, confieso que durante un espacio de tiempo me ha mantenido al pairo en el desarrollo de las últimas páginas, bien por motivos ajenos a mis apetencias, bien por el cansancio que produce la dedicación de toda elaboración y consecución de un cuaderno, una tarea concienzuda e interminablemente agotadora, con ello las erratas forman parte de ese conjunto, porque no hay nadie perfecto, ni mal que cien años dure...

Problema como al que me he enfrentado de no saber entrar, tened por seguro que afectaron a otras personas que tenían, esa o parecida dificultad para participar y aunque voluntad no faltase, a veces se convierten en obstáculos insalvables para los profanos con el dominio de las tecnologías modernas.

Yo también quiero adquirir un ejemplar en papel para disfrutar de su lectura. Yo también quisiera coleccionar esa triología que en la actualidad conformamos los escribidores, porque sinceramente, tanto la participación como el trabajo de la ejecución de Naves Celtas y de Leyenda del Galatea han cansado mi vista un poco.
Así, que le pido a Arminio, por consejo de mi impresor y en nombre de las personas con problemas visuales, cuando se imprima, se haga con letra legiblemente grande y a fin de facilitar su lectura.
La empresa de publicar es un negocio ruinoso y cuyo coste es demasiado oneroso para un percibidor de un sueldo pequeño, por lo que la idea de anticipar cuartos en esa confianza, me parece lícita y muy acertada para nuestro amigo Arminio, porque posiblemente se exponga a dormir en el felpudo de la puerta de su propia casa y eso, eso, como que NO puede ser, nin de coña...

Meizoso incombustible!
Meizoso dijo...
Oh, de Cades, Cádiz nos llegan con mucho cariño ecos lejanos que alumbran el despertar de esta venidera mañana, cuando escribiendo cartas al Alba de aquella ensoñación, desde Cuba con rumbo a New York, New York...
Un intrépido capitán de corbeta a bordo de nuestro querido Juan Sebastián de Elcano nos sale con su amistad al encuentro, lo cual me parece sublimente admirable y emocionante tras su mención y su reconocimiento en esta loable participación.

Que las brisas del atardecer les sean propicias en su navegación por el mar sin nombre de los Sargazos, algo que evoca a tiempos pasados a bordo del Juan Sebastián de Elcano, hermano del Galatea.
Dos buques que navegaron impartiendo enseñanzas de gran valor con mucho aprovechamiento para sus alumnos guardiamarinas y especialistas de la Armada y que llevamos muy adentro de nuestros corazones en ese recuerdo más entrañable y amable.
Muchas gracias a la señora y al capitán en nombre de todos los marinos marineros que estamos a sus órdenes para lo que haga falta. Muy buena navegación y tengan mucho cuidado con los sargazos y con los pulpos gigantes que se lían contra hélices y timones... Sonrisas. Alberto Vera Meizoso
Meizoso dijo...
Sr Gómez, recuerdo que usted me había encargado otro libro para un compañero del Galatea con domicilio en la ciudad condal de Barcelona, pero mire usted que he agotado los ejemplares y solamente queda un depósito de libros en CENTRAL LIBRERA de Ferrol, a la cual se puede acceder mediante internet y a fin de solicitar mis cuadernos de Naves Celtas en galego y en castellano; Leyenda del Galatea y una Colisión en el Mar sin Nombre (en castellano) y a vuelta de correo sin más novedad.
Otra aclaración que conviene aclarar, es que otras librerías lo anuncian sin mi autorización e utilizando mis publicaciones como gancho para la venta de otras publicaciones.

Yo sólamente he dejado depósitos en la Librería "Fojo de Ortigueira" y en la ya citada CENTRAL LIBRERA de Ferrol. Alberto Vera Meizoso
Castrillon dijo...
Hola Meizoso, ya veo que has regresado de tus largas vacaciones, esperamos que sigas con nosotros y no te despiestes ahí, subido a los palos para que no te molestemos, esa era la táctica, que empleabamos a bordo de aquella galera, subir a los juanetes con unas filásticas, la navaja y un pasador.
Ahí tomábamos el sol durante toda la mañana, claro que no nos molestaban los contramestres, pero tambien he de decirte que los flechastes y toda la jarcia estaba como si fuera nueva y muy segura.
Así que, como puedes comprobar, esos escaqueos ya nos lo sabemos.
Ya te echábamos mucho de menos, ya ves también que tu antiguo buque escuela de los señoritos tambien estan leyendo estos comentarios.
Si en aquellos tiempos, nos llegan a decir esto de las nuevas tecnologías diríamos que estaban locos, cuando una carta que nos mandaban de nuestra tierra tardábamos meses en recibirla, pero claro tampoco habia la prisa que existe hoy día, y con todo este tiempo tan rápido que aprovechamos y nos enteramos al momento de todas las noticias y lo mismo, darlas conocer. A pesar de todo, no tenemos tiempo para nada. Nos invade la prisa, las ansias, el extrés, ¿para qué? ¿dónde queremos ir tan rápido?
Bueno amigo Meizoso, ya sabes que Miguel me debe cuatro mil barriletes y se niega a pagarlos, así que escogeré un grupo de asalto para entrar y quitarle esos barriletes.
Oye, Arminio esta malo con la gripe, esperamos que no sea la gripe aviar.
Mira, en los tres años que estuve en el Galatea, con todos los fríos y mojaduras, jamás hemos cogido la gripe, ni un catarro, estábamos inmunes a esos virus.

Bueno sin más por ahora, que tengo que contestarle a Ureña, que me preguntaba algo sobre la estancia en las islas y otras cosas.
Recibe un muy cordial saludo, a todos los del blog, lo mismo que a los que se dedican a leer lo expuesto, que no crean que somos mejores que ellos, no, nosotros somos de una época pasada.
Un muy fuerte abrazo a todos, Arminioooooooo!!!! no te hagas el remolónnnnn, y sube a cubierta.
Meizoso dijo...
Ay! don comandante don Castrillón, usted siempre tan vacilón abaneándose encima de la tumbona de su hamaca, pero como escuchen los "señoritos de Elcano", le puedo asegurar que muy, pero capaces son de hacer pasar halando de pies y manos por debajo de su indiferente quilla de pino,
Porque son más rudos y bravos correosos marinos que también saben escaquear, de cejas y de cofas para arriba y a barriletes no les ganan ni los rusos, ni tampoco los cubanos!
En cuanto a las cervezas, me parece que por el Sr Gómez, se perdieron todas las apuestas a su favor, tal y como alega contando con la Ley Seca en su mano.

Cierto, en la mar de la plena felicidad nunca contagiaban de vacilus y de virus mortales.
Le deseo buena navegación y presento mis disculpas, pues andaba con un folio en blanco liado y con cara de ocupado visitando todas las tarbernas escondidas del hogar del marinero...
Castrillon dijo...
Hola Gerardo Ureña, ¿dónde te encuentras? estoy esperando tu contestación, pero mientras tanto te haré una pregunta.¿Estabas tú embarcado cuando nos bañábamos en la mar ?
Te cuento, estábamos por los trópicos, no teníamos ninguna prisa, ya que íbamos muy adelantados en la navegación, porque habíamos navegado con vientos frescos por un largo, y ganamos mucho tiempo, así que cuando llegamos a los trópicos, estaba la mar que sólamente se oía el resoplar de los delfines por la noche.
El viento calma total, teníamos aferrados los juanetes altos, el resto de las velas estaban caídas por falta de viento, el buque estaba literalmente parado, no nos ocupábamos para nada de los palos. A disfrutar en la cubierta, y a media mañana el Comandante mandó arriar dos botes, para que los cabos primeros hicieran ejercicios, siempre por la banda de estribor. Una vez que fueron arriados, se mando que todos los que quisieran bañarse podían hacerlo.

Ni cortos ni perezosos, casi todos desde la borda de la banda de estribor nos tirábamos al agua, no nos dejaban alejarnos teniendo que permanecer junto a los botes que se encuentraban en el agua, pero nosotros una vez que estábamos en el agua, nos sentíamos libres, nadábamos para donde fuera.

Claro, esto alarmó a los mandos, y dieron la orden a los botes para que nos acercáramos por el costado, ya sabes había peligro de tiburones, pero nosotros no hacíamos caso, eso era una gran novedad para nosotros, los cabos desde los botes no eran capaces de reunirnos, y los contramaestres con sus silbatos, los ponían al rojo vivo de tanto intentar llamarnos, pero claro, eso de estar en el agua no era cuestion de perderlo, no les prestábamos atención.
El Comandante se enfadó mucho y mandó que los botes nos echaran para el costado con el fin de coger la escala de gato que había en el tangón y subir a la cubierta, por fín, poco a poco fuimos subiendo a la cubierta.

No, no nos han reñido, sólamente nos dijeron que estaban muy preocupados por si aparecía algun tiburón.
Mira Gerardo, eso fué lo mejor de toda la navegación para nosotros, pero no para los contramaestres y mandos ya que, estaban muy preocupados.
Claro, hubo más detalles, pero me parece muy largo para contarte.
Mira Ureña, yo me dá que estuviste tú tambien embarcado en ese viaje.
Bueno, amigo y compañero Gerardo, sin más por ahora espero que con tu muy buena memoria, recuerdes algo.
Sin más por ahora, espero tu contestación. Recibir un muy cordial saludo todos los que se asoman a estas páginas.
Anónimo dijo...
A nosotros sólamente tres veces nos concedieron baño y normalmente era cuando fondeábamos a fin de arranchar y de pintar costados. Creo que fue en la Española, (República Dominicana), cuando nadábamos a carón del barco y desde la perspectiva que ofrece la altura del puente de mando, el timonel de guardia divisó a una madana de escualos aproximarse hacia nosotros...

Entonces tomó el micrófono y dijo: Atención, atención, salgan de inmediato del agua: "la zona está infestada de tiburones!". Aproximadamente me hallaba a unos 200 m del buque, a bordo todos los compañeros chiflando de emergencia y haciendo señales con los brazos para alertarnos del inminente peligro que nos acechaba bajo las procelosas aguas...
Debí de ser el último en percatar, pues nadaba como un pez al crol con la cabeza sumergida, solamente erguía para tomar aire. Siempre y aún soy un excelente nadador, incluso de largas distancias, llegué a badear la Bahía de Coruña y la Ría de Ferrol en tiempos...
Al costado pendía la escala de gato, por donde normalmente accede el práctico a bordo. Yo vi a los compañeros subir a toda pastilla y a los compañeros, trepar, unos por encima de los demás...Entonces, cambié de rumbo y de último dirigí hacia dicha escala, en el trayecto, confieso que rocé con un extraño cuerpo lijoso y de un spring final, logré alcanzar la de gato, justo después, asomó sus fauces la testa de un tiburón... Meizoso
Anónimo dijo...
Tras el llamado alzamiento de la parte rebelde, o de esa otra España contra la otra, el barco fue utilizado como centro de reclutamiento y adoctrinamiento de jóvenes, en su mayoría campesinos y marineros con escasa formación. El fin de dicho adoctrinamiento era el de contar con más efectivos para sostener la lucha armada contra la llamada "armada roja de los cabos" y cubrir las dotaciones de los barcos del bando nacional...Toda esta información está muy bien contrastada y se puede verificar con pelos y con señales...
Anónimo dijo...
Habíamos zarpado de Bostón con rumbo a Europa y llevábamos aproximadamente del orden de diez singladuras navegadas en medio del Atlántico, cuando divisamos los destellos del patrón irlandés del Simaril haciendo señales visuales mediante un espejo S O S (esta historia ya está escrita en Leyenda del Galatea y una Colisión en el Mar sin Nombre, aunque no se describe la sesión del baño en medio del Océano Atlantico).

Bueno, el velero auxiliado se encontraba a la deriva con el mástil desarbolado, el caso es que, mientras aguardábamos la venida de un Coast Guard (guardacostas americano), permanecimos tres dias y sus noches a la espera, con el pequeño velero irlandés, amarrado por largo y a barlovento para evitar que se esnafrase contra nuestro costado...
El tiempo era soleado, la mar como un plato y en comandante nos concedió un baño, el valiente tn de Mahamut, (un tipo excelente más majo que las pesetas y excelente nadador, fue el primero en zambullirse y seguimos aguas los demás...Recuerdo que me lancé desde la dura tapa de regala y tenía la mala costumbre de dejadme llevar por la misma inercia del salto del tigre, hasta ascender, muy lentamente hasta la superficie, emergiendo con mis manos haciendo de timón...
La impresión de contemplar aquella negrura fue acongojante, a dos mil millas de toda tierra habitada y a una media de profundidad, entre dos mil y tres mil metros...La sesanción de insignificante garbancito era parecida, por citar un ilustrante ejemplo, al de un hombre saltar en el espacio sideral...

Aleteé circunnavegando el barco dos veces y subí de penúltimo, tras de mí, lo hizo el mentado tn Mahamut (espero que no le parezca mal que tenga a bien citar). Toda aquella tripulación tiene que recordar esta odisea. Meizoso.
Anónimo dijo...
Creo que me he trabucado un poco y mezclado ambos los tres comentarios: el de la señora de Cádiz, con el del comandante gaditano y también el saludo que desde Elcano nos envían, Un potaje, aunque la respuesta me parece válida.

Deseo dejar buena constancia, que Elcano navegaba en tiempos de antaño, en que también lo hacía el Galatea y creo, que en la actualidad es el velero más antiguo, de todos cuantos navegan.
Estamos hablar de un bergantín goleta de 1927 y el Galatea de 1922, pero que inició su primer crucero en 1925. Ambos veleros escuelas desde mi particular puinto de vista, son contemporáneos...
Las condicciones de habitabilidad, el sistema y organización casi idénticos, por no citar que los dos se trataban de buques escuelas, por ende el Juan Sebastián de Elcano, inició sus primeras singladuras para la enseñanza de guardiamarinas...

Por lo que, el sistema de enseñanza, me atrevo a pensar intuyendo que era muy parecido... Yo cre, también que a bordo de Elcano y en tiempos, los hombres también trepaban descalzos y a los panchos, exactamente igual que. Luego utilizábamos alpargatas o tenis de goma caucho, quizás por ese adelanto, el sr Castrillón piensa que éramos unos señoritos...? Meizoso
Anónimo dijo...
A bordo del Galatea recuerdo que había un estricta disciplina y cuando accedía al aula el profesor, a la voz de "ya", lo recibíamos en posición de firmes estirados...

Pero don Jesús era un relajado profesor civil y en seguida hacía señal de que sentasemos...Recuerdo aquella aula de la cuarta brigada a bordo del Galatea, cuando estabámos recibiendo las interesantes lecciones, de todo, menos de matemáticas y de repente y sin avisar, entró don Picota repartiéndo los bocadillos de salchichas y tomando nota de los que faltaban...
Don Picota era cordobés, la gracia con que interrumpió la clase fue total! En aquellos tiempos leíamos a DADA, un libro cuyas pastas estaban acribilladas de agujeros, era el Reino de lo absurdo surrealismo total. Este eran don Picota, para partirse de risa...!
Meizoso
Anónimo dijo...
Toda esta historia de leyenda negra, en tiempos de su estancia en Sevilla capital, posiblemente no era del agrado de las autoridades, posiblemente me atrevo a intuir, pesaba como una losa dentro de las filas democráticas? Porque posiblemente valoraron estos acaecidos hechos, por ende, que el barco había sido protagonista principal del filn franquista "RAZA"?
Anónimo dijo...
La Historia del puesco.
Al alba de aquella fría mañana de abril y como siempre el subalterno de guardia entraba en el el sollado, prendía las luces y mandaba a levantar del sobre, cuando de repente se oyó un trueno mañanero retumbar, tan sonado fue, que a todos hizo saltar con su expansiva onda...
El estruendo todos bien sabíamos que procedía de la quinta brigada y que su autor era un tal don Corrientoso... El encargado medianero mandó formar a los presentes, pero nadie pio...Claro, a excepción de los vecinos de la quinta, que se hicieron los de Lucas...
Bueno, bueno toda aquella cuarta brigada fue sometida a los peores escarnios y a fin de que saliese el del puesco, pero nadie se atrevía, porque entre nosotros no se hallaba el tal don Corrientoso...
Después de no me acuerdo, lo que duró aquella temporada, al fin tocaba la hora de marchar de permiso por las vacaciones de Semana Santa...

Reunidos con el profesor tutor de la nuestra, acordamos entregarnos, cualquiera de nos, como chivo expiatorio. Entonces un compañero sureño hizo ademán de entregarse. Pero como yo ya tenía la fraguada idea de marchar de la Marina y me importaba un güevo de avión que me expidientaran, salí dado la cara por don Corrientoso, que estaba a la chita callando como un cobarde, también al ser de la quinta, se jugaba la chaquetilla.
El caso es que, todos mis compañeros marcharon, menos yo que quedé arrestado hasta nueva orden. Fui llamado al estrado por el jefe de estudios que me echó una buena reprimenda, a lo que alegué, sin serlo y con mucha pachorra, que se trataba de una mera brisa marina, necesidad biológica incotenida y sin importancia.
A continuación fui a solicitar el perdón del subalterno ofendido, pero no me creyó, de antemano bien sabía, que yo no era el autor.
Me retuvieron un par de días y algunos compañeros se pusieron en contacto con el sr tutor para declarar a favor de mi total inocencia. Y al final me concedieron la libertad. Pero desde entonces, intuyo que alguna manchita marcó mi expediente, lo cual carece de toda importancia.
Meizoso.
Anónimo dijo...
Con ello maté tres pájaros de un solo tiro: primero, porque al sureño compañero y principal motivo por el que di la cara, atrasaba su viaje y ya tenía su billete de tren reservado; segundo motivo es que di por finalizada aquella sesión del pelotón de castigo y logré que fuesen de vacaciones, total que yo tenía más fácil por ser franco de localidad sin cobrar la escolaridad...

Y tercero, salvé la carrera de aquel quinto columnista, pese a que nunca jamás tuvo la gentileza y la honorabilidad de darme las gracias, porque cuando tronó, yo estaba derecho y en el pasillo de camino hacia los lavabos. Para que conste. Meizoso.
Anónimo dijo...
ABANDONO DE BUQUE
Corrían los tiempos de a finales de los setenta, cuando estando de oficial de guardia el mayor contramaestre don Rogelio y de suboficial el brigada mecánico don Antonio Meizoso López, los fondos del buque escuela de maniobra Galatea de sopetón y de madrugada comezaron a manar abundantemente agua... Se instaló una motobomba de contraincendios a fin de achicar, pero fallaba y no daba hecho, porque además de su mal funcionamiento, entraba mucha más, de la que salía...
Alarmados y mientras no se organizaba el achicado de emergencia, don Rogelio mandó evacuar a la dotación con un "ABANDONO DE BUQUE".

La dotación y el personal de la guardia de a bordo, con sus enseres en el pantalán estaban preparados para ver sumergir a nuestro querido velero que podía ir a pique en el mismo muelle de la base naval de La Graña...Entonces, fue cuando a cubos mandaron achicar.
Recuerdo que formábamos dos grandes cadenas pasándonos cubos llenos y vacios, todo esto mientras don Antonio Meizoso no acababa de resolver la avería de la dichosa motobomba, lo cual como era destacadamente un "manitas", enseguida logró reparar y controlar la vía de agua.
Al amanecer un camión hormigonera desde el patalán vacíaba hormigón para sellar, sin palete, la dichosa fuga de agua.
Asimismo la tripulación volvió a ocupar sus taquillas y sus respectivos puestos y la vida a bordo se normalizó. Pero el reloj magistral marcaba tocando a su fin. Meizoso
Anónimo dijo...
¿Porqué se mantuvo a flote el Galatea, cuando en 1959 se encontraba incapacitado para seguir navegando?.
Acerca de este polémico tema se han barajado muchas hipótesis, pero yo "creo", que la razón tiene mucho que ver en su empeño por mantener y alargar su vida como buque pontón, por esta que voy a tratar de exponer, pese a que no tengo muchos datos, pero ciertamente había oido de otros casos, en que la Armada quiso dar más logevidad, porque en este particular caso, al barco se le consideraba como una reliquia.
Una reliquia que en tiempos de dictadura lograron, mediante complicadísimas reparaciones y sin contar con demasiados medios, y menos experiencia en esa materia de restauración, conseguir alargar su vida.
Claro, el barco simbolizaba la resistencia a favor de la sublevación contra la II República Española. Un barco sin armamento ni defensa alguna, había logrado sortear una situación de apuro con su comandante sublevado en ese trágico golpe de estado, con el izado de la nueva bandera utilizada por los rebeldes.

Entonces, yo creo que este fue el unico motivo por el que se le da una larga vida que simbolizase aquella gesta golpista.
Anónimo dijo...
Toda esta historia de la Historia, quizás nunca jamás se desenterrará? Quizás quedó entre bastidores? Es muy difícil de saber, porque en aquellos tiempos pasados, intuimos que tal vez, hubiese habido medios y posibles para proceder a su restauración. Una cortina de envolvente humo impide saber las razones, entre las cuales no hay nada descartable. Y todo esto no forma más parte que de esotra leyenda, de leyendas.
Arminio dijo...
Alberto parece que con la gran profusión de comentarios, has dejado pensativos a toda la dotación de este buque Galatea y no se asoman por cubierta. Como tengan que responder a tantas cuestiones no van a dar a basto con los escritos.
Parece que la noche te ilumina y la luna te da fuerzas para escribir. Yo nada más levantarme echo mano al blog y me pongo manos a la obra separando por párrafos los escritos, pero merece la pena, al menos el Galatea ya navega con una dotación que antes, ni soñó que pudiera tener. Un saludo a todos.
José Luis Martínez Angel dijo...
Para Gerardo Ureña: He visto que estás en la relación de los que quieren ir a Glasgow. Hace muchos años que no nos vemos y me he alegrado mucho de encontrarte en este blog y de leer tus comentarios.
Recordarás que yo también estuve en al Galatea, aunque mucho menos que tu.
Un abrazo y ya quedaremos un día
Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, ex¬navegantes y a los que no tuvieron esa dicha de navegar en nuestro majestuoso velero, que se quedaron con ese sin sabor de poder hacer lo que tanto hubiesen deseado, para los unos y para los otros deseo que la felicidad sea abundante para estos tiempos que corren.
Gracias a este blog llevo unos días bastante ocupado, pues han sido muchos antiguos compañeros que se han acercado hasta mi, para felicitarme por la labor que estamos haciendo en defensa de la memoria de nuestro querido Galatea, cosa que yo he intentado desviar estos elogios a las personas que verdaderamente le pertenecen, que si me lo permiten quiero omitir nombres para evitar que se ruboricen, pero creo que todos saben a quién me estoy refiriendo, agradezco vuestra compresión.

Yo de paso me estoy tomando la libertad de invitarles a colaborar con nosotros, y hasta animarles para que se decidan hacer el viaje a Glasgow el próximo año Dios mediante, también me hacen saber que los que fueron navegantes en sus tiempos del Galatea son muchos los que no dominan estas nuevas tecnologías, por lo que algunos están pendientes de sus hijos o nietos para poder comunicarse con nosotros, y los hijos y nietos ya son mayorcitos y ya tienen otras ocupaciones, esto yo ya lo intuía y se lo había comentado en varias ocasiones a Castrillon.

Alguno de ellos aportan lo que creen que sería interesante para este blog, y otros los contactos son telefónicos y aunque tienen mucho para aportar, de momento están a expensas de que algún familiar les pueda escanear alguna foto, pero aportan sus anécdotas que poco a poco iré desgranando en la medida que me sea posible.
De momento y sin cansaros más ya que hoy es Domingo y por lo tanto día festivo, os dejare tranquilos y en Paz de Dios.
Con mis mejores deseos para todas las personas que de alguna forma comparten este espacio, que sean muy felices.
Jose Luis Martínez Angel dijo...
Como soy novato había "colgado" este comentario en el enlace "viaje a Glasgow", pero creo que no era el sitio adecuado. Lo repito en esta sección de comentarios

Estoy intentando recordar las canciones que nos hacían aprender a "los peludos" para conocer la maniobra, tipo "si quieres saber peludo como se iza la mayor..." ¿Están en alguna parte?. Gracias
Arminio dijo...
Hola, Jose Luis, en la página poesía del Buque Escuela Galatea, tienes algunas canciones que se cantaban a bordo, en cambio y como bien dices, esa que mencionas no está, de todas formas te la pongo aquí e intentaré ponerla en ese apartado. Ya te he puesto las fotos tuyas, son muy buenas. Aprovecho para darte la bienvenisa a esta cubierta, que tú bien conoces y te dejo algo de la canción.
Si quieres saber peludo // cómo se aferra la mayor // se entra de los palanquines y de la apagapenol // entrando de los brioles hasta llegar a besar // formarás al pie de la jarcia para subir a aferrar".
Anónimo dijo...
Protesto! Porque a bordo están prohibidas todas las que no tengan la punta capada y un taimado pirata pata palo ha lanzado a don Corrientoso un aguzado estilete de punta afilada!
Protesto! Por aquí en este tajo de la toldilla con lampazo y netol, limpiando las cejas y púpilas de cegados ojos de buey, mientras los capos desilachando a las pobres almas de los cabos de esos puños que dan tanta pena... Probrecitos, no somos nadie...! meizoso incombustible vacilón...
Miguel Gómez dijo...
Como siempre y casi cada vez que me decido a entrar en este blog, me alegra que se encuentren lo más confortable posible, en todos los conceptos, en este lugar de encuentro que compartimos con bastante frecuencia.
Compañero José Luis, has tenido el privilegio de ser recibido y haberte dado la bienvenida a esta virtual navegación, el Comandante Jefe de este proyecto, en pocas palabras la máxima autoridad de todos nosotros, nuestro extraordinario compañero Arminio.
Yo en lo que a mí se refiere también quisiera decirte que me alegra que te reúnas con nosotros, y que te sientas lo más cómodo posible entre los que componemos esta pequeña dotación, que si en algo te pudiera ser útil no dudes ni un solo momento en apoyarte en mi persona, que con mi condición de veterano, y mi incondicional apoyo tendrías toda la ayuda que estuviera en mis manos.

Arminio ya te relato aquella canción que se le cantaba a los peludos, también debes de recordar aquella otra que decía: Haber cuando llegue el día en que aferres como yo, los juanetes, los velachos, la trinquete y la mayor, y continuaba con el tren, el tren el tren es lo mejor, el tren el tren es lo que quiero yo, esta la cantaban los que ya eran ascendidos a cabos 2ª, y estaban esperando destino para los buques de guerra.

Como ya comente en mi anterior escrito en este blog, estuve hablando con algunos compañeros de antaño, entre ellos había uno que omito su nombre, que media cerca de los dos metros de estatura, y la ración de comida ordinaria le era insuficiente, por lo que el Capitán medico que si no recuerdo mal se apellidaba Saavedra junto al Teniente medico D. Juan Bohórquez, tuvieron que asígnale doble ración del ya mencionado sustento para que pudiera sobre vivir, se trataba de un verdadero ( tripero ) y otras anécdotas que ya iré comentando en próximas ocasiones.
Ahora lo dejaremos hasta aquí, no sin antes desearles todo lo mejor y saludando a todos, tanto a los que hacen sus comentarios como a los que se molestan en leerlos.
Castrillon dijo...
Hola a todos, en especial a Arminio Sanchez Mora, por tu incombustible tesón de ir recopilando fotografias y datos de aquellas lejanas navegaciones a bordo del Buque Escuela de Maniobra Galatea ,que fué a su vez la primera vez que nuestras plantas de los pies pisaban la cubierta de un buque.
Pero, este buque, tenía por blasón, su enorme dureza en las navegaciones, sin otra ayuda que nuestros propios esfuerzos, tanto físicos como mentales, siendo como único instrumento que se empleaba para la navegación, el Sextante y las cartas de navegación.
Sino fuera por, Arminio, y por la inestimable y cualificada ayuda de su esposa, y tambien de sus hijas, que pacientemente han estado a su lado en todo momento corrigiendo las noticias, y poniendo en orden todos nuestros escritos, no sería posible que los libros que tiene para su impresion estuviesen finalizados.

Por todo ello, todos nosotros, felicitamos muy profundamente a su esposa e hijas, ya que sin su ayuda, no seria posible que saliera a la luz, la vida que llevabamos a bordo de aquel buque, y que se perdería en el correr de los tiempos, por ello nuestro reconocimiento y respeto para ellas, Gracias.

Oye Arminio, has puesto en el blog, en la zona de las fotografias, una fotografia en la que estan dos oficiles y un cura.
Un oficial de esos es, Don Raúl Hermida, éste estuvo en el Galatea en los años cincuenta, estuve yo embarcado con él, era profesor nuestro en la asignatura de navegación, nos daba clases sobre la Rosa, nos enseño a cuartear la rosa en todos sus sentidos ( para los rumbos se usaba por cuartas ), también a desarmar la rosa y conocer todas sus piezas y su composición, así como volverla a armar y ponerle el liquido y cerrarla.

También nos eseñaba a poner los imanes a la bitácora, los longitudinales y los trasversales, la barras flinders, también las bolas de compensación de la bitácora, la de babor y estribor, lo mismo que las asignaturas de rumbos, demoras y marcaciones.
En fin todo lo concerniente a la navegación. Te digo Arminio, era una maravilla la manera de eseñar que tenía, era muy serio y nosotros le teníamos mucho respeto.
Cuando estuve en los buque de guerra destinado en los puentes y tenía que hacer algo en las bitacoras o Rosas, me acorda mucho de sus enseñanzas, para mi fué el mejor profesor.
Bueno Arminio no te doy más el palizón, porque no pararía de contarte cosas de aquella lejana estancia a bordo del aquel Buque Escuela de Maniobra Galatea, en los años 53 al 56.
Recibir un muy cordial saludo todos, los que participan en el blog y los que se dedican a leer.
Miguel Gómez dijo...
Castrillon acabo de leer tu comentario, quería hacerte saber, a ti y a todos que estoy totalmente de acuerdo en todas y en cada una de la palabras que has empleado para con nuestro gran compañero Arminio, y las personas que componen su familia.
No cabe duda de que me sumo a todo lo que has manifestado, y poco o nada me has dejado para poder añadir, simplemente corroborar todo lo que has expuesto.

Sobradamente ha demostrado su eficacia a lo largo del tiempo que llevamos cooperando juntos, ignoraba la colaboración de su esposa e hijas, celebro que esta unión familiar haya hecho posible conseguir el fin qué se pretendía.
Mi gratitud para todos ellos.
Arminio dijo...
Gracias, es una palabra tan pequeña pero con un gran significado, y que en estos tiempos, no se pronuncia tan a menudo como se debería.
Siempre agradezco en mis pensamientos y ahora lo hago aquí, públicamente.

Siempre pensaré lo importante que es para mi sentirme agradecido, eso significa que he encontrado personas que siempre llevo dentro de mí, personas en las que pienso y a las que en la distancia les doy mi fuerza para que todo salga bien, para que todo vuelva a la normalidad, para que les vaya bien en todas sus pretensiones y para que sus seres queridos, cuando llega el caso, se recuperen lo antes posible.

Cuando estuve en el Galatea, siempre soñé el poder navegar, siempre imaginé como serían las personas que viajaron a bordo de ese velero que yo había pisado, y quien me iba a decir que en el pasar de los años, he logrado saber quien eran y como eran.
El sueño se me ha hecho realidad, y ha sido y es, un sueño de esos de los que nunca quieres depertarte, pero con la satisfación y la alegría que cuando despierto, veo que el sueño continúa y se hace realidad.
Gracias a vosotros, por acompañarme en este viaje, por vuestro apoyo y comprensión que permanentemente me hacéis sentir, también por vuestros preciados consejos, gratos momentos y generoso apoyo.
Gerardo Ureña dijo...
Mis queridos lobos de mar:
Hoy parece que me encuentro un poco mejor, hoy además, tengo necesidad de contactar con vosotros. Tanto es así, que he pensado decirle al médico de cabecera, que anule todas las pastillas, a las que me tiene diariamente sometido. Que me las cambie por otras, otras
que no hay en las farmacias. ¿Su nombre.? Amigos y amantes del Galatea".
Para nosotros nunca será el Glenlee, siempre, hasta el final de nuestros días, este sinpar velero se llamara Galatea.

Galatea para orgullo de toda la gente sencilla, noble, honrada y respetuosa con sus mayores; gentes que no pudierón ir a la Universidad, gentes que se tuvierón que forjar en la Universidad de la vida.
Muchos de ellos, (entre los que me cuento)sacarón a España, de la gran ruina, que nos dejo la maldita guerra civil; sumaron, y no, restaron. Para vergüenza (que no tienen) de otros, que si están, pero que no se les espera, otros que no quisieron, ni supieron, hacer algo por este gran barco de donde, se hicieron y salierón, grandes y nobles marinos, para gloria y paz de este gran País llamado España.

Incluso los que allí estuvieron, sin tener luego, continuidad en la vida castrense, se siguen sintiendo fieles al juramento de su bandera. Juramento que siguen honrando hasta sus últimas consecuencias.
Arminio, gracias amigo, gracias por tus correos dandome animos, gracias por el periódico de Cádiz, y, gracias por estar en la giroscopica manteniendo el rumbo.
A "Gran Miguel", lo mismo, este se preocupa tanto, que me llama por teléfono. A todos gracias. José Mª. Lo prometido es deuda. No quiero que me pase como a "Gran Miguel" con los barriletes.
No recuerdo bien cuando fué. Creo recordar que fué camino de Bremen, lo bien cierto es que tanto tú como yo, somos un activo de ese vaje.
Hacia frio, era de noche, exactamente las 20 h P.M.. EL Teniente de Navío D. Grabiel Estrella, estaba reprendiendo a "Gabi"; asi le llamabamos a este muchacho, natural de León, fuerte como un roble, de mi promoción.

Le mandó subir a los cuernos del palo mayor. Yo salia de guardia, tenía el alba, entre los compañeros más afines, comentabamos el hecho, pero nadie tenía claro el ¿por qué?. Nos fuimos a dormir.
A las cuatro de la mañana, la brigada entrante forma en cubierta, siempre en babor, para el relevo. La mar movidita, los que no entraron de puesto en el primer turno pudieron tomar un plato de sopa de ajo sobrante de la guardia anterior,¡qué suerte tuvieron!. A mí me tocó ordenanza del puente. La persona a la que yo relevé, me dió un capote con capucha. Después de darme las novedades, novedades que no había nunca, me puse el capote, dejé caer toda mi espalda pegada al mambrú y así de esta manera permanecí tan ricamente, calentito y atento solamente a cualquier indicación del oficial de guardia.

Pasados unos veinte minutos, se presenta Gabi y me pide permiso para hablar con el oficial de guardia. Yo, todo sorprendido,(ya no recordaba lo que pasara unas horas antes) le pregunto: ¿Qué quieres decirle?. Y Gabi me responde "necesito orinar, estoy en los cuernos, me dijo que no bajara sin su permiso.¿ pero cómo orino? tengo ganas". Continuará...
Arminio dijo...
Gracias, Gerardo, me alegro que estés mejor y que el Galatea sea tu mejor medicina, aún mejor que esas pastillas "El Ancla", o esas inyecciones balsámicas, que yo creo que no conocí.
Ya hay otra publicación en otro periódico, que ha salido hoy, y así vamos a seguir hasta que se conozca el Galatea, al menos en España, Reino Unido e Italia, donde ya he mandado a varios periódicos la noticia.
El artículo lo he puesto en forma de dos fotos, en la página penúltima situada a la derecha del blog y titulada: Recordando al Buque Escuela Galatea.

Leo tus historias de forma apasionada y lástima que no aparecieras antes, pues los dos libros sobre el Galatea se habrían enriquecido enormemente.
saludos a todos.
Gerardo Ureña dijo...
Era mi segundo viaje, ya estaba curtido, ¿curtido has dicho? ¡¡eso no te lo crees tú ni de coña marinera!!. Yo siempre había dicho que mi capacidad de comprensión no me la había calculado nadie, que era muy comprensivo, pero esto me superaba,no estaba preparado para poder entenderlo.
Solamente los que navegamos en El Galatea, podemos entender lo que son los cuernos en una fria noche de invierno.
Subí al puente de tres en tres los escalones, para encontrarme cara a cara con D. Gabriel Estrella, le digo "a sus órdenes mi oficial, el marinero de primera Gabi, pide permiso para hablar con usted". ¿Qué quiere? me pregunta, "pedirle permiso para orinar". Me mira seriamente, pensaría que le estaba tomando el pelo, antes de que volviera a preguntarme le digo "usted lo mando arrestado a los cuernos para no bajar sin su permiso".

Al teniente de navío a pesar de la oscuridad se le cambió el color de la cara. ¡¡Sube!! le dijo asomándose por la escala.
Se le había olvidado, no se acordaba, no sabía como arreglarlo, habló con uno de los contramaestres de guardia, y le dió órden de descanso durante el dia y la noche siguiente.
Supongo, José María que de esto tendrás memoria.Ignoro si Gabi sigue pasando lista en el mundo de los vivos, si es así, tendrá la misma edad que tengo yo, y también podrá leer este blog.
Así es José María, los cigarrillos "Cliper" producían dolores de cabeza y algunos trastornos más.
Las bromas que tú citas del papel de fumar entre los dedos de los pies, duraron una buena temporada, fueron un auténtico cachondeo, eramos muy ingeniosos. Los días de mar se hacían eternos en el tiempo.
Pertenecimos a una marina pobre, una marina de ratas, piojos, ladillas, curianas (cucarachas rubias) y un sin fin de miserias. Estábamos a años luz de los americanos, estos tenían una marina pagada por el Tio Sam.

El dinero que nos daban al llegar a puerto, siempre nos parecía poco, pero teníamos algo en común, algo que nadie sabía porqué, algo que parecía el código interior de una gran mayoría de nosotros. Como tú muy bien dices José María, lo primero que se hacía al llegar a puerto, era comer en un buen restaurante, restaurante elegido a ojo de buen cubero, que no solía fallarnos.
Mesa, mantel, servilletas, cubiertos, su vinito, y una más que buena comida.
En alguna ocasión, fuimos sorprendidos por un pequeño grupo de oficiales de nuestro barco.
Después de una merecida buena comida, nos fumábamos algunos de nuestros caprichosos cigarrillos, que previamente habíamos comprado.

Pedíamos la cuenta de forma y manera muy digna, pagábamos y ...
Ya estaba preparado este marinero español, para navegar entre los brazos de Eros y las flechas de Cupido. Personalmente, me enamoraron las portuguesas de la isla, eran muy guapas, incluso esas que tú y yo sabemos, de ese lugar que no quieres nombrar.
Recuerdo vagamente lo que cuentas del virgo, creo que nos lo contó Zurita tal como tú lo relatas.
A José Luis Martinez Angel le pregunto, ¿quién eres? dame más pistas. ¿Eres de Valencia.
No sea cruel, me tienes en tensión contínua. Espero con auténtica ansiedad tus respuestas. ¡¡¡ Bueno chicos, hasta la próxima!!!
Castrillon dijo...
¡¡¡¡¡¡ Hola Ureñaaaaaa,!!!!!! no sabes cuánto nos alegramos de que vuelvas de nuevo a estas tertulias recordando aquellas vidas, que sino fuera por este blog de nuestro amigo Arminio, quedarían difuminadas en el largo camino de los tiempos,ya que fueron nuestros primeras y duras experiencias de la vida.

Cuando voy leyendo tu comentario, me da la sensación de que, nos encontramos en algún puerto y nos ponemos a hablar, hablar, y hablar sin parar, como si tuviéramos miedo a que se nos olvide algo, y que al separanos ya no podamos decirnos lo que se nos olvidó. Hablamos con toda prisa, con ahínco y con el entusiasmo de aquella lejana juventud.
Tenemos prisa por saber de nuestras vidas, y de los compañeros a los que dejamos atrás, como han sido en ese tiempo de separación de cuando salimos de aquella Galera.
!!! Si Ureña es asi, volvemos, aunque sea en nuestras mentes a aquellos lejanos tiempos, parece que estamos sumidos de nuevo en aquel tiempo del Galatea vestidos de marineros.Sigue...
Castrillon dijo...
Sigue...
Oye Ureña, ese caso que me cuentas del castigo por la noche, no me extraña nada.Eso era normal, yo por mi parte lo tenía muy asumido, pasé bastantes dís castigado en los juanetes, pero no creas que hacia grandes cosas fuera de lo normal, bastaba cualquier insignificancia para mandarnos a los palos.

Lo del olvido del castigo era muy común, también me pasó a mi, ya lo he contado otra vez.
Lo que no recuerdo es el motivo del castigo, pero un contramaestre, después de la Oración y de la descubierta por los palos, me mandó castigado a la jarcia de babor del palo trinquete, pero fueron pasando las horas y yo todavía estaba de pie en los flechastes de la jarcia, mirando hacia la mar y de espaldas a la cubierta.
Como estaba oscuro y ya era noche, nadie se fijaba en mi, hasta que a las dos de la maañana, pasó por allí un oficial y me vió. Me preguntó que estaba haciando alli, a lo que contesté que, estaba castigado por un contramestre. Mira Ureña, yo ya me sentía cansado de estar aguantando cogido a las burdas con las manos hacia atrás y aguantando los bandazos, aguantando las salpicaduras del agua sobre mi cuerpo y cara, además del frío.

El oficial al verme de esa forma, me mandó bajar rápidamente y que me fuera a dormir, no sabes tú, como se lo agradecí en mi interior. Esos olvidos eran muy comunes.
Bueno, pasaría mucho tiempo hablando contigo de nuestras historias y recordando a aquellos compañeros y amigos, pero eso será para más adelante.

Bueno, amigos y compañeros todos, nuestros años mozos quedaron en las estelas que dejan los buques en la mar, que luego desaparecen y ya no se sabe de ella, recibir un muy cordial saludo todossssss.
José Luis Martínez Angel dijo...
Para Gerardo Ureña: Si que vivo en Valencia y te doy pistas....Parroquia El Socorro, Vicente Zaragozá, tu hermano.. Un abrazo
Gerardo Ureña dijo...
"Ya te tengo Dartagñan". En el nombre de Dios te digo, que cietamente pensé que podias ser tù. Chico guaperas, de los guaperas de la epoca.
Casose con una guapa chica, Elvira. Vivía en la calle Jesús.
Veraneabas en Ribarrocha, con tus suegros. De Colores. Hermano en Crxto. Cursillista.
Pues que alegría "macho"; tengo muchas cosas que contarte. Ya te contaré.(espero) Aquel grupo tan grande, hoy es muy pequeño, pero sigue vivo. Como podrás suponer, tenemos muchas ausencias.
¡¡¡Caramba, caramba, José Luis!!! Ciertamente Dios escribe recto, con trazos torcidos. Espero verte pronto, a pesar de mis achaques. Un abarazo de oso.
Arminio dijo... Graciaspor tu fotografía, con ella te presento a todos los componenetes y asiduos del Galatea y que visitan este espacio.
Las dos últimas fotos pertenecen a uno de los compañeros más veteranos del Galatea, uno de ellos, como ya sabemos es Gabriel Antonio Concepción Conde, del que ya tenemos foto y el que se presenta y que estuvo allá por el año 1939, es Manuel Andrés Holgado.
Quien me iba a decir que un auténtico galateano vivía en esta ciudad en la que yo también vivo. Personalmente le invito a visitar asiduamente esta cubierta
como invitado de honor y a formar parte de las vivencias a bordo.
¡Gavieteros y juaneteros, al pie de la jarcia!.
Un saludo Manuel.
 
Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, galateanos y visitantes, ante todo que tengais un maravilloso día, que la salud sea rebosante, y la felicidad vuestra leal compañera, hoy y cada día sucesivo, pues este es mi deseo.
La categoría imparable de este espacio, es cada día más palpable, ya no le llamo blog, porque creo que esa palabra le queda corta para tanto acontecimiento.

Una vez más gracias Arminio y demás componentes de este lugar, por haberme hecho tan feliz en estos últimos años de mi existencia, ya que jamás había soñado en retroceder tantos años, para remontarme a aquella juventud a la que jamás renunciaré, está claro que me estoy refiriendo a mis años de navegante en aquel majestuoso velero, blanco inmaculado, bañado por los océanos, asediado por el sol, propulsado por los vientos, meciéndose por las olas y contemplado por las estrellas.
Me alegra profundamente que personas que pasaron por él, como las que van apareciendo últimamente, le vayan dando esta gran calidad a este nuestro lugar de encuentro, los que navegamos en él ya estamos un poco cargados de años, otros ya se marcharon, pero los hay algo más longevos con una salud de hierro que hace de ellos que se transformen en mitos.

Mis respetos para todos ellos y muy especial a esas personas un poco más mayores, que nos enseñaron y nos siguen indicando el camino perdido por esos mares de Dios.
Con lo que me sigo refiriendo a los honorables señores, D. Gabriel Antonio Concepción Conde y D. Manuel Andrés Holgado que nos están dando una buena lección, de amar aquel precioso velero, donde todos hicimos tanto como pudimos, incluso más, con muchas carencias de toda índole y en unos tiempos difíciles, que nosotros con nuestra juventud los convertíamos hasta agradables, la calma y las tempestades eran el pan nuestro de cada día.
Deseando lo mejor para todas aquellas personas que se acerquen hasta estos comentarios, reitero mis saludos para todos.
Gerardo Ureña dijo...
Hola "Gran Miguel", eres un maestro de la pluma, tienes que escribir un libro, yo te animaré hasta conseguirlo.
Quitate esas moscas de la cabeza, por que, tú si eres realmente bueno. Hoy no pensaba escribir, más, al leer tu articulo, me he tirado a la piscina, sin pensarmelo dos veces.
Gracias Miguel, garcias por muchas cosas, gracias por estar ahí, y gracias por ser un gran amigo.
Un fraternal abrazo.
Miguel Gómez dijo...
Amigos correligionarios, celebro estar nuevamente ante vosotros, para seguir hablando de aquel nuestro viejo velero, que de una forma poco ortodoxa fue abandonado y masacrado, hasta deshacerse de él por cuatro entonces pesetas, como ya he dicho en otras ocasiones nos quitaron el símbolo pero se olvidaron de quitarnos la nostalgia, que perdura y cada día se refuerza mas y mas, gracias a valientes hombres que en su momento pertenecieron a sus distintas dotaciones.
Haber Gerardo: ¿no puede ser que tú no les encuentras defectos a tus amigos?, me dices que soy un maestro de la pluma, supongo que te referirás a la pluma de los indios, porque otro tipo de pluma te aseguro que nada de nada.
También me incitas a que escriba un libro, que tú me animarías a hacerlo hasta conseguirlo, pues también te contesto que ese tema lo tengo resuelto, para eso contamos en este grupo con Arminio, que ese sí que es un verdadero maestro.

De todas formas agradezco tus elogios hacia mi persona, a los que yo sencillamente creo que son inmerecidos, también soy muy consciente de mis limitaciones, admiro tu forma de ser dando ese soplo de aliento a los compañeros que por cualquier causa se han quedado un poco más atrasados, eso no quiere decir que no sean capaces, lo que le debió suceder es que carecieron de esas oportunidades que debieron tener, pero la vida es así y por supuesto que yo soy incapaz de cambiarla.

Ahora me quiero referir a nuestra madrina, que últimamente poco o nada hablamos de ella, me gustaría que no se sintiera marginada, por no nombrarla en exceso, pero me imagino que será consciente de que nosotros, no estamos muy acostumbrados a estas situaciones, por otra parte si nos sigue, que así lo creo, ya se habrá dado cuenta de que no somos un ejemplo de gentilidad para con las damas, ya que pertenecemos a tiempos algo remotos y nuestra profesión de marinos no era muy dada a las delicadezas, siempre íbamos como caballos desbocados, le ruego acepte nuestra condición de hombres rudos, pero de momento y aunque sea simbólicamente le envío una rosa muy perfumada, que bien se la merece, cuando nos veamos personalmente le aseguro que no será una rosa virtual.

Como despedida por hoy, me gustaría darle ese empujoncito que necesita un buen amigo y por supuesto, Galateano a tope, para estar entre nosotros, me consta que sigue nuestros pasos sólo le falta esa decisión que cuando lea estas frases seguro que lo hará, para todos los de mas como es habitual desearles todo lo mejor, tanto a los cronistas como a los lectores, hasta otra.
Arminio dijo...
Miguel, aunque no lo creas, tu escritura va viento en popa y cada día es más enriqecedora para los que la leemos.
En cuanto a escribir, lo puede hacer pues creo que está preparado, luego vendrán las corecciones que todo escritor tiene que pasar, hasta los más eruditos.

De todas formas, Miguel y Castrillon, han narrado ya un libro sobre el Galatea titulado: Buque Escuela Galatea : "un guiño al pasado". y una novela como protagonistas, cuyo título es: Aleta de tiburón: "A bordo del Galatea", donde se narran las peripecias de esos formidables y jóvenes navegantes.
Un saludo a todos.
Castrillon dijo...
Hola a todos, no creáis que estoy ausente, estoy vigilando todas las intervencione. Ya veo que, hay un conato de polémica de ponerse a escribir libros, con nuestros comentarios.
Ya se han escrito algunos, entre Meizoso y Arminio, que son los cronistas oficiales de este blog, así que ahí se queda esto.

Estos escritores, al principio fueron reagrupando nuestras intervenciones y nuestros comentarios que hacíamos los unos con los otros compañeros de navegaciones, y les hemos dado nuestro consentimiento para esa obra y las que se derivarán de las mismas, ellos son los propietarios de este blog y gracias a ellos todavía sigue en pie.
Bueno, amigo Ureña,creo que te debo alguna pregunta que me has echo en su día pero, ahora no tengo claro si te la he contestado, ya me dirás, porque cuando tu escribes sobre aquella galera, me traes nuevos recuerdos, y es una alegraí volver a estar de charla con los antiguos compañeros de navegación antes que las condiciones físicas nos abandonen.
Bueno amigos tertulianos, recibir todos un muyyyyy cordiallll saludooooo todos, lo mismo que los lectores de este bloggggg.Que Dios os bendiga a todosssss.
Miguel Gómez dijo...
Perdónalo Gerardo Ureña, pero es que cada vez que quiere decir GALATEA se le escapan las teclas y pone galera, son simples errores a veces todos nos equivocamos, más si escribimos muy aprisa.
Reitero mis saludos.
Miguel Gómez dijo...
Bueno, ante todo desearía que vuestro estado de salud y anímico sea perfecto, aunque últimamente el segundo deja algo que desear, ya que vuestras entradas en este lugar se están haciendo cada vez mas espaciosas, hasta diría que son algo esporádicas, pues pienso que no debemos relajarnos tanto, ya que a nuestras edades son necesarios los ejercicios aunque sean mentales, pues estos son muy interesantes para la salud.
Mi gratitud para aquellas personas que me animan y elogian mis narrativas, se positivamente que lo hacen de corazón pero, yo sé muy bien todo lo que puedo caminar, y aunque mucho me esfuerce mi camino es excesivamente corto, y nadie mejor que yo lo conoce, el seguir caminando seria llegar hasta el precipicio, y es lo que quisiera evitar.

Oh Galatea al que escoltaban los delfines por ambos costados, jugueteando con tu tajamar, al que seguían un ejército de tiburones por tu popa, ese buque que nunca olvidaremos, aunque hayan pasado muchos largos años, tienes que saber que te echamos de menos y que te echaremos mientras tengamos algo de vida, ya somos los últimos que te recordarán, otros nos sucederán, pero solo podrán leer lo que nosotros seamos capaces de dejar escrito, puesto que ya no pernoctarán en tus entrañas, ni tus palos, jarcias y vergas, serán su lugar de adiestramiento para la vida marinera, tampoco reposarán sobre tu chinchorro del Bauprés contemplando las estrellas aquellas noches tropicales.

Arminio, pienso yo que si has navegado en el Galatea, plantas un pino y escribes un libro ya lo tienes todo hecho en esta vida, y a mí sólo me faltaría montar en globo, eso creo que nunca se llevará a cabo, por lo tanto yo no quiero tenerlo todo hecho, siempre es necesario que quede algo por hacer, ¿o no estoy en lo cierto?.
Bueno estoy en disposición de atestiguar que los años 57 y 58 del pasado siglo, en el Galatea, en las guardias de media, navegando no hubo la tan traída y llevada sopa de ajo, ya lo sabía pero también me lo han confirmado, de todas formas Gerardo Ureña si se acuerda también podría confirmarlo, pero le pregunté que si se acordaba de las raciones de tabaco que nos daban, y no lo recordaba y puede que también se le haya olvidado, aquel periódico que se editaba a bordo que se llamaba Portillo al mundo, que se repartía los domingos después de la misa, es cierto que han pasado muchos años, pero la memoria si no la ejercitamos cada vez estará más relajada.
Como de costumbre con mis mejores deseos, saludo a todas las personas que de cualquier forma tenga algo que ver con este espacio, hasta pronto Dios mediante.
Jaume Matamala dijo...
Hola, animo a los amanuenses y poetas de ese Blog
a que saquen una copia escrita, para disfrutar de su lectura; teneis publicadas unas 750 Páginas, que a doble cara salen dos tomos de un grosor de 15 milímetros de espesor. Esto se consigue con un fichereo Word, que se lleva a una copistería y te lo anillan por unos 40 Euros. Podeis pedirme el fichero, y os lo mando gustosamente por email.
También, en Fotoprix (Foto-libro)se puede editar fotos de buquegalateablogespot.com personalizar un libro con las mejores fotos.
Vale unos 50 Euros. Toda esta completa documentación es un placer tenerla en nuestra librería para quienes hemos pisado y dormido en el GALATEA. Perdonar este rollo, pero me encanta enseñar...... Jaume
Arminio dijo...
Ya se te ve otra vez por la cubierta del Galatea, aunque siempre estás a bordo, se te ve más por el Detall, pero ese trabajo tan importante lo tiene que hacer alguien. Bien merecido tienes que a veces tomes un poco de aire fresco por este castillo y se te vea el pelo.
Bueno Jaume y todos los demás, aprovecho para animaros en ese trabajo tan bueno que estáis haciendo y que en poco tiempo tendrá la recompensa que se merece.
Gracias a todos vosotros el Galatea ya ha sido rescatado del más letal abandono en el que estaba sumido.
Gerardo Ureña dijo...
Dedicado a José Mª Castrillon y por extensión a todos los galeteanos, incluidos los que tengan a bien leernos.
Era un día cualquiera,¿el mes? Septiembre ¿año? 1955; no recuerdo con certeza que día fué. Lo que si recuerdo es que el 15 de Septiembre de este 1955, salimos de Ferrol (en esos tiempos era Ferrol del Caudillo,) rumbo a Bremen (Alemania).

Al pasar por El Canal de la Mancha, en el Paso de Calais, pudimos ver las Rocas Blancas de Dover, pasando al mar del norte para tomar el rio WESER, hasta llegar al puerto de Bremen.Muy pronto subió a bordo el práctico, pues aún siendo nuestro comandante D. Ramon Liaño de Vierna un gran marino,(esa es mi opinión) ese río tenia sus complicaciones.
Pero tú recordarás José Mª que fue fascinante, entrar y salir de Bremen por ese río. Aportó a mis escasos caudales náuticos, un tesoro muy valioso. Tú ya habías estado en Nueva York y en Dublín. Tú eras un aventajado lobo de mar, tú formabas parte de esa dotación, culpable de que muchos "peludos" en período de instrucción, cambiara su especialidad por la de maniobras.

Tú y muchos como tú, nos contábais vuestros viajes y muchos de nosotros quedábamos boquiabiertos con vuestros relatos. Debo decir, que los que así actuamos, jamás nos arrepentimos de haber tomado esta decisión.(Quizá algún día os cuente mis motivos personales, ya que en mi caso fuerón otros).
Entramos en el puerto de Bremen. Muy largo, por el costado de babor de El Galatea, en la otra parte del puerto, habia un velero alemán, del que no recuerdo su nombre.
Lo que voy a contar a continuación, espero lo recuerdes. Cuando llegamos a puerto, mi brigada estaba franca total, es decir primero y segundo día libre. Formamos para salir a tierra, el oficial de guardia era D. Amalio Graiño.
El contramaestre de guardia le da la novedad y el número de francos que forman, a Don Amalio(aqui viene la sorpresa)y le dice al contramaestre, que la revista se pasará en el sollado, ¿te acuerdas José Mª,? esto fue sonado; todos abajo a formar de nuevo. Una vez en el sollado, formados, serios, muertos de curiosidad, sin adivinar porque banda entraba el viento, dice D.Amalio"bajaros
los pantalones y enseñar los calzoncillos".El cachondeo fue para nota, más de la mitad de la formación, fue rechazada por llevar los calzoncillos hechos un mapa de los paises bajos. Se suponía que tendríamos compañía femenina, y no era decente llevar el pasaporte caducado. Continuará...
Gerardo Ureña dijo...
Salí a tierra con un tal Sanchez, natural de Huelva. Salimos juntos el primero y segundo día(más tarde embarcaría en El Sarmiento de Gamboa, seis meses antes de licenciarme).
El primer día salimos, con dos jovencitas alemanas, con las que no nos pudimos entender hablando, pero si nos entendimos, dándonos generosas muestras de cariño.
Como quiera que todo quedo en esas repetidas muestras de cariño, y no senos consintió explorar más profundamente, regresamos al barco con un impresionante dolor de testículos, fruto de unas altísimas temperaturas alcanzadas con estas dos chicas que solo sabian decir "tú moro".

El portalón del Galatea se nos hizo eterno, el más insignificante roce nos producia un gran dolor.
Quedamos con nuestras ciceronas del "tu moro" el día siguiente a las cinco de la tarde. Ya nos informamos del significado de la palabrita. Algo habíamos aprendido. Llegamos tarde a la cita, unos 30 minutos, no las vimos, ignoramos si se cansaron de esperar, o por el contrario no acudierón a la cita. Nunca lo sabremos. Nos encogimos de hombros y nos dedicamos a recorrer la Ciudad.

Yo personalmente, no podía creer lo que estaba viendo. Hacia cuatro días que hubo terminado la Segunda Guerra Mundial, en Bremen no se podian ver ruinas de esa guerra, es más,tampoco vimos ningun indigente. Alemania era ya un pais levantado, mientras a nosotros aún nos quedaba mucho camino que recorrer.

Recordaras José Mª Que en Bremen había muchas bicicletas, las gentes del lugar solía desplazarse con este medio de transporte. También había muchas maquinitas, de las que podías sacar cigarrillos, zapatos, medias de señora, caramelos, bocadillos, bombones y muchas otras cosas.
Sánchez y el que suscribe, sacamos dos cajas de bombones, las abrimos con el sanísimo propósito de dar buena cuenta de ellas. De repente nos encontramos en un lindo parque, debajo de un sauce llorón, dedicados a la consumición de esos deliciosos bombones.Estaba lloviendo, era esa lluvia
finísima a la que en algunos lugares la llaman "cala bobos". Nosotros seguíamos dando buena cuenta de las golosinas. De repente a parecen delante de nosotros, dos bellezas, una morena y una rubia, altas, guapas, se paran y nos miran. Hablan ellas, nosotros no sabemos que pasa. Ellas siguen mirando, sonrien, a Sánchez le da vergüenza, a mi no. Les ofrezco bombones, aceptan, comen, se terminan los dulces, no hay manera de entenderse,¡¡que mal se pasa!!.Les hago una seña y las invito a pasear gesticularmente, me dicen que si. Yotomo el brazo de la morena, comienza el paseo.

Nunca me he considerado un "guaperas", pero Sanchez era mas feo que pegarle a un padre.Él tambien toma el brazo de la rubia y, aprovechando que las dos bellezas tenían lindos paraguas, nos ponemos en marcha.
Entramos en un salón de lujo, vamos a llamarle salón de té, tomamos varias cosas: té, té con leche, mantequilla, cafés, cafés con leche y una variadísima gama de bollería y galletas finas. Todo servido con finisima vajilla de porcelana y relucientes cubiertos, además de unas singulares servilletas de tela.
Continuara...
Castrillon dijo...
!!!! Hola Gerardo¡¡¡¡¡, no sabes lo que me alegro de tu entrada en este puerto donde nos reunimos todos los antiguos marineros, y ahora retirados gracias a nuestro muy buen amigo Arminio.Cuando voy leyendo tu detallado comentario, me parece estar viviendo aquellos momentos en compañia de todos nuestros comapañeros.
Es verdad, fué para nosotros una verdadera visión cuando pasamos por el paso de Calais, las Rocas blancas de Dover, y aquellas crucetas de los buques hundidos que velaban en el agua. Parecía un cementerio con sus cruces fuera
del agua.Así era, un cementerio de todos los buques hundidos durante la Segunda Guerra Mundial, parecia muy tétrico y desolador ese escenario marítimo, quizás cientos de cadaveres estarían en sus interior.

Bueno, cuando llegamos a Bremen, efectívamente, Don Amalio Graiño, lo conocia yo, era de Avilés de una familia muy acomodada, y lo de la revista en el sollado.
Las visitas que tuvimos a bordo fueron muy numerosas, cuando cenábamos, recuerdo que estaban las visitas por la cubierta y nosotros con el plato cenando. Ese día nos dieron albóndigas en salsa, ellos se quedaban mirando como cenábamos, y nosotros les ofrecíamos de aquella cena, y la aceptaron de muy buena gana. seguramente tendrían bastante hambre de tanto tiempo que estaban a bordo.
Lo recuerdo perfectamente, fué muy dificil despejar el buque de visitas, yo estaba de guardia, ya era el ocaso.
Cuando salimos a tierra, para regresar a puerto nos servía de guia unatorretade una iglesia que había cerca del puerto y que se veía desde el interior.
Claro que Bremen ya está levantado, a diferencia de cuando entramos en Hamburgo en el año 53, que estaba muy destruido y se afanaban mucho por levantar la ciudad.
Bueno amigos todos y en especial, a tí compañero de navegacion en aquella galera y amigo Ureña, claro que me acuerdo de muchos detalles de esos viajes, ya seguiré comentando.
Recibir todos un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Gerardo Ureña dijo...
En este salón pasamos buena parte de la tarde. Cuando determinamos salir, ellas nos llevan a las afueras de la ciudad, para poder besarlas. Sánchez y yo nos teníamos que poner de puntillas, pero llegábamos, ya lo creo que llegábamos. El resultado final, más "tu moro", y otra derrota para los de Trafalgar, otro regreso a nuestro redil, con el rabo entre las piernas, y la mecha mojada.

El tercer día tenia guardia, me sirvió para meditar, llegué a la conclusión de que, no más "tu moro", no quería que me tomaran el pelo. Los días que quedaban los dedicaría a conocer mejor la ciudad, al tiempo que me divertía contemplando como a otros le decian "tú moro".
Dice el refrán "que siempre hay un roto para un descosido", no lo se, pero lo que si se, es lo que dijeron la gran mayoria, "tu moro".
Hubo pocos que tocaron el cielo con los dedos.
El regreso fue muy movidito. En El Canal de la Mancha, nos sorprendio un temporal guapo, teníamos la barloa desde el castillo hasta la toldilla.¿Recuerdas José María, Cuántas veces vomos meterse el bauprés en la mar, y pensar, éste no levanta, y zaaass, arriba de nuevo.?
Tal parecía que el barco jugaba con la mar y no la mar con el barco. Pasamos serios temporales, tú más que yo, pero verdad José Mª que nunca tuvimos miedo, ni nunca nos "acojonaban" los temporales.

Una noche, entraba de guardia de media. En El Canal de la Mancha, la noche estaba muy fea, el viento soplaba de "moito carayo", tomamos la sopa de ajo. Por vez primera en mis treinta meses de Galatea, el oficial de guardia baja del puente, nos forma al pie del palo trinquete, y pide voluntarios para subir a aferar los velachos.
Ni un solo muchacho se quedó rezagado, todos como un solo hombre fuimos a la jarcia. En el Galatea todos fuimos voluntarios, nunca nos arrugamos ante cualquier adversidad, no tuvimos jamás miedo a nada. Subimos a los velachos, aferrarlos nos llevó su tiempo, no más que en cualquier situación, era lo nuestro, estábamos en nuestra salsa, arriba era donde el marinero de El Galatea se encontraba a gusto. Parecerá mentira, pues no, no lo es, es bien cierto y Dios bien lo sabe.¿Por qué?, porque así nos forjaron. Es por este motivo,que de este barco, salieron auténticos hombres de acero.

José Mª ¿te acuerdas del cabo SEIJO, cabo primera de maniobras, perteneciente a la dotación del Galatea. Entró en la escuela para suboficiales en el viaje de Puerto Rico, salió suboficial en Diciembre del 56 y fue destinado al cuartel de marineria de Ferrol. De Aquilino Alvarez Miniño, soldado de infanteria de marina, rebajado de guardia. Pintaba el barco a pistola. Tenía más reenganches que una escala de gato. Hacia maquetas del Galatea y se decia de él, que fue el corneta que toco abandono de buque del crucero BALEARES, gemelo del CANARIAS.
Gran Miguel, puede que tú tengas razón, quizás las últimas sopas de ajo se dieron en el viaje de Puerto Rico. Lo que si recuerdo, es, que en el viaje de Guinea, no, nos dieron. Hacía mucho calor. Pero que tú no las conocieras, no quiere decir que no existieran, Yo las he tomado muchas veces y me sabían a Gloria Bendita. Si podía repetir, repetía
LAGUNA, dinos como sigue tú mujer.
Un fuerte abrazo para todos.
Miguel Gómez dijo...
Castrillon, otra vez te has vuelto a equivocar, no es galera es GALATEA, tienes que estar más atento a la hora de escribir, observo que te sucede con mucha frecuencia.
Saludos.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo, claro que me acuerdo del Cabo Seijo, no se si te acordarás del Cabo López, era cabo primero fogonero, estaba destinado en las máquinas, también tenía una escala de gato en la manga de los reenganches. Era muy mayor, ese fué el que, me animó a mi que no dejara la Marina, que, lo peor ya había pasado, y que ahora era cuando se iba a vivir mejor en los barcos de guerra, y así fué.
Cuando salimos de Bremen nos fuimos a Santa Cruz de la Palma. Allí en Santa Cruz de la Palma, fueron a vernos unos cuantos cabos que habían desembarcado en el viaje anterior, estuvieron siempre con nosotros, nos alegramos mucho de vernos de nuevo.
De Santa Cruz de la Palma fuimos a la isla de San Vicente de Cabo Verde, luego a las Madeiras, Funchal etc. tengo las fechas anotadas.

Lo de los temporales, claro, que nos les teníamos miedo, desde que nos cogió aquel famoso ciclón en la madrugada del año 53 para el 54, a la salida de Nueva York, a partir de ese temporal, los demás nos parecían menos fuertes, pero sí, eran muy fuertes pero sabíamos salir de ellos, como asi fué en varias ocasiones.

Oye, no se si estabas tú, (creo que si) cuando una tarde noche se hizo una fiesta en cubierta, estábamos todos sentados en la cubierta alrededor del palo mayor y en las jarcias para ver mejor, el comandante Liaño de Vierna estaba sentado con el segundo y otros oficiales en unas sillas.
En plena fiesta, un marinero especialista cogió el gato del comandante y lo lanzó desde la jarcia de estribor al centro de la reunión, pero con tan mala suerte que cayó encima del Comandante, y claro, el comandante no dijo nada, pero se paró la función.
Yo habia visto como el compañero cogía la gata y la lanzaba, nadie rió esa travesura.

En otra ocasión, también pasó otra cosa semejante, que estropeó la función, tampoco dijo nada el Comandante, pero ya no se hicieron más fiestas de esa índole.

Bueno, Gerardo, ya te seguiré recordando cosas, y como lo psasamos en los anteriores viajes.
Sin mas por ahora recibir todos un muy cordial saludo, !!!! Lagunaaaaaaaaaaa ¡¡¡¡, te esperamos.
Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, sean galateanos o visitantes dense por saludados muy afectivamente, una vez pasado el fin de semana aunque aquí en Barcelona hoy también sea fiesta, volvamos a la tarea que nos concierne a todos, haber si somos capaces de despertar de este letargo que nos está afectando, que puede que lo arrastre la explosión primaveral, de todas formas como quiera que sea nos hemos de sobreponer a ello.
En lo que a mí se refiere, estos últimos días he estado en contacto por vía telefónica, con varios antiguos compañeros galateanos, nos hemos intercambiado saludos y algunas preguntas por ambas partes, quedando volver a vernos como mínimo para el tan esperado viaje de Glasgow, por lo que los organizadores tenéis la necesidad imperiosa de no cometer ni un solo fallo, en este aspecto, ya que en vosotros están puestas muchas esperanzas, y que son nuestra última oportunidad.

Hace días que comente que había uno que debido a su estatura ya que se acercaba a los dos metros, y que tenía asignada doble ración de comida, pues bien a este le apodamos el largo, creo que tenia la maniobra general en el Trinquete, es natural de la provincia de Cádiz por lo que a pesar de todo tenía cierta gracia, cuando en plena maniobra gritaba el Contramaestre el largo que no trabaje refiriéndose al chicote de escota si mas no recuerdo, este se sentaba y no trabajaba al ser preguntado por cualquier responsable de la maniobra, contestaba a son de gracia a mi me han dicho que no trabaje, y por lo tanto cumplo ordenes, buena persona también está apuntado para el viaje Dios mediante.

Como siempre los comentaristas deben de formar la vanguardia de esta virtual formación, así como gavieros y juaneteros ya deben de estar al pie de la jarcia, esperando la orden de arriba una vez llegados a las crucetas, de las correspondientes vergas esperar la orden de fuera para ocupar cada uno su lugar de destino.
Ya veis que no le exigimos nada a nadie, pero tenemos que tener en cuenta que aunque nadie es imprescindible todos somos muy necesarios, por lo que tenemos que ayudarnos en todo lo posible los unos a los otros, unidos por el compañerismo que nos caracteriza como galateanos, que siempre fuimos un ejemplo a seguir.
De momento por hoy se acabo la tinta, a todos un cordial saludo tanto a los
escritores como lectores.
Castrillon dijo...
Hola Matamala, gracias por el correo que me has mandado con unas fotos del Galatea. En alguna de ellas se está cubriendo pasamanos y candeleros, y cubriendo tambien las vergas de los palos, vestidos de blanco, es un espectáculo asombraso visto desde fuera.
Me recuerda mucho, cuando en un viaje hemos entrado en Canarias, no recuerdo que autoridad estaba en el muelle, el caso es que tuvimos que cubrir pasamanos y candeleros así como las vergas de los palos, hasta ahí todo normal, pero lo que no es normal es aquella plaga de langostas que cubrían todo el buque, se posaban sobre cualquier superficie, en especial en los palos y vergas. Revoloteaban sobre nuestros cuerpos sobre la cubierta.
Cuando subíamos por las jarcias, eran una gran molestia para nosotros, las teníamos sobre nuestros cuerpos, por los flechastes, por las vergas, por la velas, era una verdadera plaga, además con aquel zumbido que hacian que parecian los motores de un avión.
Fueron demasiado molestas para subir, pero muchísimo más molestas cuando estábamos en pie sobre las vergas, no podíamos movernos nada, estaban asentadas sobre nuestos cuerpos, caras y manos, nadie se imagina lo terrible que lo pasamos y como tuvimos los nervios tan templados, que nuestras mentes estaban ocupadas solamente en dominarnos a nosotros mismos para no perder el control y ser arrastrados todos abajo.

No veas tú cuando se hizo el saludos a la voz y al cañón. Nosotros, cuando había saludo al cañón y estando sobre los palos, solíamos tener la boca entreavierta para que los estampidos no fueran tan duros en nuestro interior, claro que teníamos esos bichos sobre nuestros labios, date cuenta que estábamos de pie en la verga tocanco con las manos un cabo quitamiendos a la altura de la cintura, no teniamos singuna sujeción.
Así que para tener un perfecto contro de los nervios tuvimos que hacer un gran esfuerzo mental, al primer cañonazo y dar los "vivas". Mira, aquello parecia un avispero enfuerecido, ya no podíamos aguantar más, teníamos que tener los ojos abiertos, y ellas (las langostas) tomando posesión de nuestros cuerpos y de nuuestras caras, fueron terrible aquellos momentos, repito, hemos hecho un profundo esfuerzo mental para aguantarnos de pie y sin ningun fatídico error.

Cuando hemos terminado el saludo a la voz y al cañon, bajamos como gatos a la cubierta, claro que todavía teníamos las langostas sobre el barco, hasta que poco a poco se fueron marchando.
Hemos superado aquella terrible prueba de cntrol mental con gran éxito, pero no quisieramos volver a tenerla.
Por eso, cuando veo esas fotografías, me viene a la cabeza aquel saludo a la voz y al cañón sobre las vergas, jamás se nos olvida a ninguno de todos aquellos compañeros que la pasamos, ni se la deseamos a nadie.
Claro, por eso te digo tambien que son muy bonitos esos saludos desde esas alturas y muy vistosos, pero en aquella ocasión parecía un castigo de penas capitales, si no teníamos suerte.
Bueno Matamala gracias por esas fotos del Galatea en posición de cubrir candeleros, pasamanos y vergas.Sin mas recibir un muy fuerte abrazo a todos, esto ya lo conté otra vez, pero no por eso dejo de recordarme de aquellos dramáticos momentos de la plaga de langostas.
Castrillon dijo...
Hola Ureña, si lees el comentario anterior, dime si estabas tu embarcado cuando sucedió estas invasión de la plaga de langostas en el archipiélago canario, si estuviste embarcado lo recordarás fácilmente, y tu ampliarás este acontecimiento.

Bueno, espero que me contestes. Sin más recibe un fuerte abrazo.
Arminio dijo...
Para Castrillon y para todos:
A la llegada a puerto, el personal de maniobra comenzó a ascender a la arboladura tomando los candeleros y pasamanos para efectuar el saludo a la voz y al cañón. Se cubrían pasamanos con la dotación de los palos, de pie sobre las vergas y agarrados entre sí con los brazos en cruz y sujetos con un frágil quitamiedos de cáñamo alquitranado, más fino que el dedo meñique, el cual no bastaba para sujetar a una persona si perdía el equilibrio y caía al vacío.

En esta arriesgada maniobra, la dotación del buque se vio sorprendida por una plaga de langostas procedentes de África, las cuales casi cubrieron los cuerpos y cabezas de los valientes especialistas.
Era terrible la sensación de vacío, sin poder soltarse y cubiertos de esos agresivos coleópteros, pero a pesar de todo se hizo el saludo a la voz y al cañón.

Al disparar las salvas, el tremendo estampido de los cañones de proa hizo que las langostas empezaran a revolotear formando una gran nube. Entre el estampido, las langostas y la tensión del momento, apenas se podía aguantar el equilibrio sobre las vergas, sujetos simplemente por el frágil cabo.

Poco tiempo permaneció el velero en tierras canarias y navegando hacia Guinea Ecuatorial la calma chicha obligaba a llevar todo el aparejo desplegado a fin de lograr que el Galatea no perdiese el rumbo a su destino.

Saludos a todos.
Gerardo Ureña dijo...
José Mª, yo no padecí la plaga de langosta.
No tengo experiencia de este suceso, seguramente esto se produciría anteriormente a mi embarque, tal vez ocurriera en el viaje que yo me perdí, el de Puerto Rico¿?.
Lo que si recuerdo, fueron seis alunnos de la escuela de buzos que, hicieron un viaje con nosotros. Estos estaban al mando de un sargento buzo, que también enbarcó con sus protegidos "bucitos". Por cierto, serán muy buenos bajo el agua, pero a bordo... cogieron unas borracheras impresionantes. Se mareaban más que los "peludos".
También recuerdo(creo que fue en el viaje de Pernambuco) encontrarnos por la banda de babor con el gran transatlántico "QUEEN ELIZABETH".
Nos pasó tan cerca, que pudimos oler la maravilloso fragancia del perfume, perfume que llegó hasta nosotros, embriagándonos con sus deliciosos aromas. Nos saludaron desde cubierta y nosotros les correspondimos. Los del Galatea oliendo a brea, los turistas a "Maderas de Oriente".

Y los sueños, sueños son,
que al despertarnos se olvida,
sólo no es sueño en la vida
la virtuosa intención.
Porque es ley de la razón,

en la vida, que es anhelo
que nos lanza al marcial duelo
con la enseña que flamea,
que el que en la tierra pelea
reciba el premio en el cielo.

¡¡Amigos, Compañeros, Camaradas!!. Las mejores y estupendas personas. Que Dios os bendiga.
Gerardo Ureña dijo...
¿Donde estás José Luis Martinez.?Por si te interesa saber, mañana miércoles tenemos reunión de Colores. Les hablaré de ti.
La cita la celebraremos Dios mediante, en el minibar de Torrente a las 10 horas A.M.
Saludos sanos y fraternales.
Castrillon dijo...
Hola Ureña, ya veo que has perdido aquella peste bíblica, la plaga de langostas, suerte que tuviste, no te das una idea de lo mal que lo pasamos, y para colmo tenerlas que soportar estando de pie en las vergas sin poder moverse ni soltar una mano para intentar espantarlas,
jamás hemos hecho un supercontrol mental como aquel, con nuestro cerebro para poder controlar los nervios y estar atentos a las detonaciones del saludo con el cañón para que no nos cogiera desprevenidos.
Pero, ya ves, hemos pasado de todas las penurias, pero gracias a Dios las hemos superado todas con una puntuación muy elevada.

Lo que me dices del buque transatlántico, yo me recuerdo muy bien, efectívamente, desde el mismo, todos los tripulante y pasajeros, asomados por la borda, haciendo fotografías al buque y a nosotros, eso fué tambien para nosotros algo fuera de la rutina, era especial ver esa imagen, íbamos a toda vela, navegando con toda magestuosidad y nosotros encaramados por las vergas, por las jarcias, saludándoles con nuestros brazos.
Los que estábamos en las jarcias, estábamos cojidos con una mano a los flechastes y con un pie también, el resto del cuerpo sobresalía de la jarcia haciéndoles señas de saludo con el brazo libre, y nuestras cabezas mirando hacia ese enerme buque y sus tripulantes.
Les decíamos "adios" con nuestras bocas, vamos, que empleamos todos los mecanismos de saludos para que nos entendieran bien, ese buque se acercó bastante a nosotros, a una distancia prudente para no interferir nuestro magestuoso modo de navegar.
Hasta que no lo hemos perdido de vista en el horizonte nos recreábamos viendo aquella mole.
!!!! Claro que me recuerdo muy bien de todo, Ureña,¡¡¡¡¡¡¡¡ ya sabes que, cualquier cosa que encontráramos por la mar, nos servía mucho de distración, ya que nos aliviaba de aquella rutinaria manera de navegar.
Bueno amigo Ureña y todos los demás compañeros y los que leen estos escrito, tener en cuentas de que, estos hechos son auténticos, sin exagerar ni un ápice, a todos recibir un muy fuerte abrazo y Él que nos protegió en todas las navegaciones, os bendiga y nos vuelva a protejer.
F. Laguna dijo...
Queridos compañeros galateanos, por hoy sólo manifestaros mi sincero agradecimiento por el apoyo que he recibido de vosotros en unos momentos bastantes dramáticos para mi.
Por ahora ya me estoy reponiendo de ello, pero que sepáis que no olvidaré en mi vida éstos gestos de afecto y amistad de unos caballeros de la mar. Un fuerte abrazo a todos.
Arminio dijo...
Fernando, en todo momento creo, que hemos estado ahí con nuestras mente apoyando a un verdadero compañero que estaba lejos de nosotros y atravesando serias dificultades y muchas veces ante tu ausencia nos hubiese gustado estar a tu lado para darte a tí y a los tuyos un rayo de apoyo y de esperanza.

Creo que lo digo en nombre de todos, te hemos echado mucho de menos y nos alegra volver a saber de tí. Nos enorgullece tener amigos como tú.
Un abrazo muy fuerte y piensa que un grupo de galateanos estamos siempre contigo.
Miguel Gómez dijo...
Excelentes amigos galateanos, en la vida no siempre hay tristezas, aunque en la forma de vivir de hoy predomine la incertidumbre, que nos abraza de forma desesperada, no dejándonos ver la luz, que la tiene que haber, a la salida de este túnel. Hoy tenemos que alegrarnos por tener con nosotros a ese compañero, que por circunstancias nada deseables de la vida se quedo un tanto rezagado, hoy jubilosamente levantamos los brazos para abrazar a nuestro compañero y amigo Fernando Laguna, que después de superar tanto él, cómo su familia, unos días algo inciertos, se haya vuelto a unir a nosotros, para continuar nuestro rumbo marcado por el éxito.
Pues si amigo Fernando, sabes positivamente que todos hemos notado tu ausencia, puede que algunos hayamos sido más atrevidos y hasta te hayamos molestado, haciendo llamadas telefónicas, en esos momentos que seguramente tu no tenias ninguna gana de escuchar a nadie, por todo ello quisiéramos excusarnos y como no, celebrar tu nueva entrada en este blog, donde todos deseábamos verte y seguir nuestras tertulias.

Dicho todo lo anterior, ahora me gustaría reivindicar el honroso cargo del Comandante de nuestro viejo velero, en aquellos tiempos entre los años 1956 y 1958 no puedo afirmar fechas porque se me escapan de la memoria, al entonces Capitán de Fragata D. Felipe Pita da Veiga, que según las listas de Comandantes en la dilatada vida de este velero llamado Galatea han omitido, no apareciendo su nombre por ningún lugar, creo que habríamos que ser más justos y darle a cada uno su lugar, recorrido por este mundo de Dios, quiero que quede constancia de que dicho Señor. también capitaneo con éxito a nuestro querido velero, por lo tanto hay quedarle su lugar en la historia.

Ya empiezan a oírse el flamear de las banderas, poéticas de Arminio y Gerardo, eso quiere decir que se están aproximando, para deleitarnos una vez más en esta monótona navegación, donde sólo en nuestro mundo atlántico nos distrae el silbido del viento, el implacable sol y el susurrar de las olas junto a los peces voladores que revolotean a nuestro paso a bandadas por ambos costados, tampoco estamos exentos de los delfines y algún que otro tiburón que van siguiendo nuestra estela, y puede que alguno acabe en las ollas de la cocina.
Como de costumbre y desando lo mejor para todos, me gustaría que tanto la salud como el bien estar estén presentes hoy y cada día de nuestras vidas.
Recordando a nuestros lectores un saludo para tod@s y les animo a continuar haciendo crecer cada día ese número que divisamos al final de página, Hasta otra.
Arminio dijo...
Muy bien Miguel, eres todo un poeta de la prosa,de esta que cada día con más acierto nos deleitas.
Le doy una noticia a Fernando, hoy ha venido a verme, su compañero Santiago Criado, y nada más verle le he reconocido. Si aquel cabo eventual que junto a fernando estaba en el castillo del Galatea, ambos con su brazo en el hombro del otro. Me ha dicho que se acuerda de Fernando a pesar de casi cuarenta años que han pasado.Bueno no tengo más tiempo y aprovecho para saludaros decirle a Miguel que ya están metidas las nuevas fotos, para que vea que no me retraso en mis obligaciones. Mañana haré la tapa de Aleta de Tiburón
Castrillon dijo...
!!!! Eh,eheheheheheheeeee¡¡¡¡ ¿ que estáis planeando Miguel y tú Arminio?, no se ocurra planear algo a espaldas mias, ¿enterados?.Oye Arminio, quien debía
deleitarnos con uns buenas poesías eres tu, ya que hace tiempo que no las vemos, así que no pierdas esa muy buena costumbre.
Estamos esprando a que asome la Madrina, ya que creo que se le terminaron las vacaciones, cuando asome Laguna ya se encargará de avisarla.
Bueno amigos todos, espero que lo estéis pasando muy bien todos, de lo cual me alegro mucho, Ureña asómate al portillo.
Recibir todos unmuy fuerte abrazo.


Miguel Gómez dijo...
Hola a todos los galateanos de cuna, y los otros galateanos que sin ser de cuna nos regalan su precioso tiempo, siguiendo nuestros derroteros por esos mares que antaño recorrimos. En este caso me estoy refiriendo a nuestros queridos lectores, porque los que no surcaron los mares en el Galatea y se formaron entre sus cuadernas, también son mis incondicionales compañeros, que el tiempo se ha encargado de hacer a muchos de ellos en unos verdaderos amigos, sin tener la menor importancia que fuesen o no navegantes de aquel nuestro viejo velero.
Verdaderamente es una pena, pasar por el muelle del puerto, observar al que fue, y sigue siendo, el barco de nuestros amores, un tanto abandonado y esta vez no por los gobernantes de turno, si no por nosotros mismos, los pocos portillos que tenia permanecen cerrados, así como las lumbreras y escotillas, la cubierta sucia y toda la maniobra de cubierta desordenada.

Está claro que éramos muy pocos los que hacíamos estas labores, pero ahora parece que cada vez lo hacemos con bastante menos frecuencia, por supuesto que no tengo ninguna autoridad para poder remediar esto de alguna forma, pero cada vez que tenga algo en mente me acercare a él, para que no se encuentre tan solo.
Ya hace años que empezamos nuestro intento de recuperar sus memorias a base de las vivencias que pasamos a bordo, pero al ser tan pocos todas nuestras vivencias ya fueron vertidas en estas páginas, al menos las recordadas, nos ha pasado como a los cantantes que también se les acaba el repertorio, no queremos ser repetitivos puesto que no queda muy bien, tampoco estamos escribiendo una novela por lo que la inventiva no entra en este blog, aquí todo lo expuesto son realidades.
También es cierto que con el paso de los muchos años haya algún baile de fechas, pero nunca intencionadamente.

Seguimos esperando nuevas experiencias y anécdotas, para así de esta forma poder rememorar alguna que haya quedado un tanto escondida, y seguir avanzando en nuestro navegar diario, con un poco más de velocidad y dentro de la normalidad, como hasta ahora lo hemos estado haciendo.
Para finalizar por hoy como ya es habitual en las despedidas de mis mal narrados y torpes comentarios, pero siempre con mis mejores deseos para todas aquellas personas que se acercan hasta estas páginas. Saludos.
Castrillon dijo...
Hola a todos nuevamente, ya veo que estáis un poco perezosos para escribir.

Bien, he recibido un correo de Matamala, en el que dice que, está en contacto con CHINCHON, que estuvo en el Galatea en los años 54 al 57, pues claro yo me recuerdo muy bien su nombre, lo que pasa es que, no recuerdo su rostro, pero sí su nombre. Me acuerdo muy bien, él tambien se recordará lo de la plaga de langostas en Canarias.

Referente a lo distintivos que teníamos en nuestras mangas de la marinera de trabajo:
La gris tenía un circulo blanco, los nuevos que iban a hacer el curso de especialistas de maniobras. Un rectángulo blanco los que estábamos esperando para hacer el curso de especilaistas, y el distintivo grande de una "V" invertida los ayudantes especialistas.
No sé si lo dije bien, pero estos distintivos sólamente correspondían a los que íbamos a efectuar el curso, los de la dotacion propia del Galatea, no tenían estos distintivos.
Gerardo Ureña, tú tienes muy buena memoria, así que ponte a la pizarra y explícanos bien estos temas.
bueno Ureña te estoy esperando a que contestes, sin mas recibir todos un muy fuerte abrazo, en particular a nuestro buen amigo Arminio, que gracias a él que por su tesón y constancia, desde hace tres años, está reuniéndonos a todos y formar nuestras tertulias, que parece que estamos en puerto todos los compañeros, a pesar de la distancia del tiempo, comentando nuestras navegaciones y aventuras, !!!!!!! gracias Arminio ¡¡¡¡¡¡¡¡ mereces un homenje.
Que Dios os bendiga a todooooossss.
Gerardo Ureña dijo...
José Mª. Me encuentro escribiendo el borrador de mi último viaje, este fue el de Guinea, como es un poco largo quiero que salga bien.
No he podido resistirme a la tentación de, asomarme al blog y, leer lo de los simbolos en las marineras.
Curiosamente hace un par de días se lo estaba comentando a "Gran Miguel".
Bueno, pues, como yo si los tuve, os cuento.
En mi primer viaje, el sastre, nos puso en las marineras de faena, un círculo blanco, en el segundo viaje, nos quitó el círculo, cambiandolo por otro rectangular.

Lo que no recuerdo es lo que tú dices del ángulo. Del angulo, solo puedo decir, que me lo pusieron el tercer viaje, es decir, el de Puerto Rico, por haber entrado en la escuela de maniobras. Todo esto previo exámen, y aprobando, claro.

Esto se hacía para poder distinguir la veteranía de cada uno de nosotros. El novato círculo blanco, el veterano, rectangular.Hasta luego chicarrones, un abrazote.
Arminio dijo...
Soy el Galatea, que juega con la espuma
de los mares olvidados.
Por esa playa embanderada de gaviotas
yo estiro mis brazos como flojas velas
mientras las olas pellizcan mis sueños
y una sola lágrima revienta contra las rocas.

Los arrecifes se asoman a la orilla
vienen descalzos a bailar sobre mi alma
y en sus labios traen algas y corales,
la levadura del mar convertida en beso.

Recuerdo con nostalgia entonecs
como los aprendices navegaron en mi,
y mi corazón se llena de añoranza,
de un océano de rostros y de manos.

Y yo entro en sus recuerdos, sin darme cuenta
con mi equipaje de velas y madera,
aferrado al timón del viento,
a la proa del paso de los años,
donde una voz que no es mi voz
eleva mi ancla de este pequeño puerto
y me alejo con mi pasado a bordo

Saludos.
Arminio dijo...
El Galatea en Sevilla.
Aquí estoy desde el día en que me varó la rosa.
Nadie podrá saber quién distrajo su rumbo.
Aquí fui destruyéndome y hoy, casi roto,
sólo la fiel madera permanece en su forma

La tempestad me trajo del pedrusco y el limo
que arrebaté al secreto de las aguas atroces.
Los náufragos partieron y el capitán, sin razones,
quedó en los arrecifes lejanos del olvido.

Cuando la luna saca mi mascarón a flote
la aventura vacía se puebla de recuerdos,
donde en el remolino de las ondas amargas
una paloma besa la frente de la noche.

Vuelvo a ver hondos puertos de carbón y de sal,
tiestos en la ventana del práctico triste,
y oigo los acordeones que en los barcos de sombra
dicen dulces sones en nostalgia de mar.

Vuelvo a ver marineros que cantan ¡Oh Galatea!,
deliciosos tatuajes con nombres de mujeres,
la Virgen fluorescente y el pontón fatigado
en donde el ángel vela su sueño de gaviota.

Vuelvo a ver horizontes de aldeas sumergidas,
madres que lloran a sus hijos muertos,
callejones con fondos de marinos abandonados,
y el muelle, cuando atracan los buques con vida.

He bordeado islas atlánticas llenas de fragancia
tardes en que me vieron pasar sus pescadores.
Con mis muchachos cerca de los penoles,
y yo Galatea, con mis velas blancas,

Vencedor de la niebla, timoneles de ojos astutos,
por los mares cargué placer y pena,
alegres contrabandos de amores fugitivos,
Besos, despedidas, anclas y cadenas.

Ni los soles tremendos ni la bruma enervante
consiguen abatir mi esqueleto solemne.
Sólo turban la paz de mi prisión mecida
los asaltos furtivos de esas gentes salvajes.

Quisiera ser en Sevilla un puente, un refugio
en la lluvia o el féretro de los exploradores.
No estar aquí tumbado, deshabitado, eterno.
Quisiera ser el arca del último diluvio.

A veces desde el tiempo, por el muelle
viene algun curiosos a verme,
bajo la Cruz del Sur se tiñe extrañamente
y me contempla, solo, y desierto inerte.

Su clara aparición me hace amar esta orilla,
el otoño mojado y mi antigua congoja.
Entonces un albatros nace en alguna parte,
y se torna dorada mi magnífica ruina.
miércoles, 06 junio, 2012
Luis Martínez Angel dijo...
Para Gerardo Ureña:
Aunque parezca mentira porque estoy jubilado estoy muy atareado, y también he estado unos días fuera, por lo que no he entrado en el blog hasta hoy.
La semana que viene me pondré en contacto contigo para que nos veamos.

Para todos:
Estoy admirado de la calidad y la "fuerza" de vuestros comentarios. No me extraña que le pongáis tanta pasión porque yo, que solo estuve en el Galatea tres meses haciendo un curso de de marinería cuando ya estaba "retirado" en Ferrol (yo era especialista electrónico) quedé maravillado del barco y siempre he lamentado no poder navegar en él.
Sin llegar a vuestro nivel de recuerdos (sería imposible) os podría describir con bastante precisión las cubiertas, los sollados y la arboladura, especialmente el trinquete que era mi destino y el bauprés que era el de todos.
Podéis estar seguros que yo he hecho "baldeos recorridos con arena y polvos de gas" sobre la misma cubierta que vosotros baldeasteis y he dejado mi coy en la misma batayola que lo dejasteis muchos de vosotros. También recuerdo algún "achuchón" del silbato del contramaestre animándome a subir al juanete la primera vez que me obligaron a hacerlo, descalzo por supuesto. ¿vosotros no?
Un abrazo
Miguel Gómez dijo...
Bueno esto está muy estimulante, en estos momentos yo personalmente y creo que en nombre de todos los que participamos en estas tertulias, que de alguna forma hacemos navegar a aquel viejo velero, celebramos efusivamente, el fuerte y fresco viento que estamos recibiendo, llegando a una velocidad de crucero más que aceptable.
Vemos la blanca espuma de nuestra estela como queda atrás, y nuestra proa deslizarse por esos mares de siempre, haciendo que el tajamar trabaje de forma incesante, enarbolando todo su velamen, para envidia de los demas barcos, como diciendo dejarle paso al Rey de los Mares.

Desearía y lo voy a hacer en primer lugar, darle la bienvenida a José Luis Martínez, que según parece se incorpora a esta dotación de la mano de Gerardo Ureña, pues al estar arropado por un verdadero marino que conoce sobradamente todos los confines de los mares, ya debe de estar muy bien adiestrado, por si fuese poco también conoce con exactitud todos los pormenores de nuestro emblemático Galatea.
Hombre curtido en los baldeos con arena polvos de gas y sosa cáustica, al más puro estilo marinero, pantalón remangado hasta las rodillas, pies descalzos, frotando enérgicamente con el brus a un ritmo frenético acompasado como si de un buen ballet se tratara, y amenizado por la música estridente del silbato del Contramaestre, dejando la cubierta de madera tan limpia, que más quisieran otras muchas dependencias estar a su altura en la limpieza y en el arranchado.

Pues si José Luis, por todo eso te agradecemos tu ingreso en esta familia, esperamos que te sientas lo más cómodo posible entre nosotros, y tu estancia sea lo más prolongada posible, a decir verdad has caído como una buena tormenta tropical, las que no te puedes ni imaginar cómo se agradecen dichas tormentas cerca del Ecuador y más si son a pleno día, supongo que Gerardo te habrá comentado algo al respecto.
Al jefe de derrota Arminio, ya no tengo las palabras adecuadas para ponerle en el lugar que merece, nos ha vuelto a deleitar con sus poesías al estilo que sólo él lo sabe hacer, agradecemos sumamente estos momentos que nos hace pasar tan fascinantes, que nos hace la rutina diaria mucho más llevadera, esperamos que aunque sea algo esporádico continúen estos momentos tan agradables.
También Gerardo a veces se suelta y nos hace pasar momentos gloriosos, ahora estamos esperando a que se digne intervenir en nuestras tertulias con sus intachables y amenos comentarios.
Luego está el jefe de toldilla, esperando, recostado en su tumbona a que yo le sirva algún refresco o whisky con soda, que eso le mola, finalmente estoy yo para todos los demás quehaceres de a bordo, a veces ya me canso y me tumbo en la batayola algún que otro rato, pues me tienen muy estresado,

Mis más sinceros saludos para nuestros seguidores, también para todos los colaboradores. Hasta otra.
Castrillon dijo...
Hola a todos, !!! Arminio muyyyyy bieeeeennnnnn ¡¡¡, pones pasión en tu escrito de la poesia, la vives, haces que también nosotros, al leerla detenidamente, nuestro pensamiento se va detrás del buque como la estela que deja por la popa cuando, empujado por un fuerte viento y con todo el aparejo largado se va deslizando y surcando las aguas de todos los mares.
Lo hace silenciosamente, no se oye el rugir de esas grandes y potentes máquinas que llevan el resto de los buques, él unico ruido son nuestras risas, nuestras pausadas tertulias, y como música de fondo los graznidos de los silbatos de los contramestres.
Arminio, tú llevas en tus venas las navegaciones de esa Galera, con toda su vida y toda su arboladura, eres un fuera de serie.
Gerardo Ureña, no me has respondido a la pregunta que te hice, de que si, estuviste tu embarcado en aquella navegacion del viaje y con rumbo a Canarias, cuando hemos cogido una plaga de langostas. Cuando aún no veíamos la costa, ya empezaban a cubrir nuestro buque, y nos empezaban a molestar, si estuviste en ese viaje forzosamente tienes que acordarte de aquellos molestos animales voraces y voladores.
Bueno, repito, "" Muyyyyy bien Arminioooooo"" por tus poesias, nos hacen sentir nostalgia.
Bueno amigos y compañeros, recibir un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Miguel Gómez dijo...
Castrillon, tienes mala memoria ya te dije anteriormente que no se escribía como lo sigues haciendo, no es galera es GALATEA.
Gerardo González Antón dijo...
Bueno, pues ahí va uno de los que aún me acuerdo.
"Si quieres saber peludo
como se aferra el juanete,
arría de los escotines
y entra de los chafaldetes".

Lo aprendí en los años:
de 1972 a 1973 para ser Cabo de Maniobra
de 1975 a 1975 para ser Cabo 1º de Maniobra
de 1979 a 1980 para ser Sargento Contramaestre.

Y aúnque ya no estaba allí en lo que quedó en tierra aprendí durante todo 1991 para ser Oficial Especialista de Maniobra y Navegación.
Miguel Angel Fernández Durán dijo...
Acabo de ver la página y a traves de Gerardo que me la acaba de enseñar y ya me apunto.
Soy Contramaestre y aprendí en las tracas del "Galatea".
Espero que nos vamos a bordo en Abril del 2013
Miguel Gómes dijo...
Hola a todos.
Galateanos, seguidores y lectores de estas páginas una vez más ante vosotros, espero que la vida transcurra sin incidentes destacables, para las personas que se agrupan tras la memoria de nuestro añorado Galatea, también deseo que esos otros que tienen a bien hacer alguna visita, que se animen a pisar la cubierta que en alguna ocasión tuvieron que baldear.
En esta ocasión me quiero referir a Gerardo González y Miguel Ángel Fernández, que han tenido el firme propósito de cruzar el portalón, aunque ya han sido recibidos por nuestro compañero jefe Arminio, dándole la bienvenida a este grupo, haber charlado de algo que por lo visto tienen en común, yo también quisiera sumarme a ese acto protocolario y desearles, una feliz estancia entre nosotros, ofreciéndome para cualquier cosa en que les pueda ser útil, que verdaderamente creo que en pocas debido a sus graduaciones, y sus veteranías en la Armada, sólo les puedo ofrecer mi humilde amistad que es todo cuanto poseo.

Esperamos de ellos que nos colmen estas páginas, con sus vivencias y anécdotas a bordo del ya referido buque, seguro que tendrán sus mentes repletas de comentarios vividos entre las cuadernas de nuestro singular velero, pues me atrevo a darles un consejo, que no se precipiten los vayan exponiendo poco a poco con el fin de disfrutarlos al máximo, y así seguiremos las tertulias entre todos los que componemos este cada día menos reducido grupo.

Con mis mejores deseos espero que la salud y la buena mar, nos acompañen en esta singladura, que lo demas vendrá por añadidura.
Saludos para todos los que tengan algo que ver con estos episodios.
Arminio dijo...
Gracias Miguel, estás siempre ojo avizor en cada singladura del Galatea. Como ves ya les di la bienvenida en el apartado de Viaje a Glasgow y los he copiado en esta página principal.
Aprovecho para saludar a todos que poco a poco van poblando la cubierta del Galatea que vuelve a sentir entre sus cuadernas a todos sus queridos marinos, que lo fueron no hace muchos años.
Un saludo a todos.
 
Gerardo Ureña dijo...
Haber José Mª, el lunes 28 de Mayo de 2012 Castrillon dijo.


Hola Ureña, si lees el comentario anterior, dime si estabas tú embarcado cuando sucedió estas invasión de la plaga de langostas en el archipiélago Canario, si estuvite embarcado lo recordarás fácilmente, y tú ampliarás este acontecimiento.

El día 30 de Mayo de 2012
Gerardo Ureña dijo:
José Mª, yo no padeci la plaga de langosta.No tengo experencia de este suceso, ect. ect.
El día 30 de Mayo de 2012 Castrillon dijo:


Hola Ureña, ya veo que has perdido aquella peste Blibica, la plaga de langostas, suerte que tuviste, etc. etc. etc.
Y hoy me dices que no te he respondido a esta pregunta. José Mª, no entiendo nada, no se por donde vas, me tienes desenfocado, fuera de plano, como decimos por esta tierra, me tienes a la luna de Valencia. Bueno gran jefe, ya me diras. Siempre a tus ordenes.
¡¡¡Señorrrr, siiiii, señorrrrrr!!!!
Anónimo dijo...
Hola Jose Luis Martinez, contesto a tu pregunta que haces en tu escrito del fecha 07 de los corrientes, de que sí cuando baldeábamos la cubierta con polvos de gas y arena descalzos.
Bueno, em primer lugar gracias por fijarte en nuestras tertulias de aquellas vidas a bordo en aquella galera, perdon, en aquel buque a vela llamado Galatea.
Contestando a tu pregunta, los que han hecho el curso estando el buque en tierra, o sea que no salía más a la mar, no se como harían los baldeos, si con botas de agua o descalzos.

Nosotros los que estuvimos embarcados navegando y haciendo los correspondientes cursos a bordo, te diré, si nos preguntas si nos calzábamos alguna vez, te diré, que sólamente cuando salíamos a tierra después de unas largas navegaciones, y cuando nos vestíamos y calzábamos las botas para salir en cualquier puerto, te diré que nos era muy dificultoso andar calzados y vestidos de paseo.
Como sabrás, nuestra indumentaria a abordo era siempre descalzos y con los pantalones remangados hasta las rodillas y cuando hacía calor en pantalones cortos, y algún sombrero que otro, para eso no habia mucha exigencia lo principal era andar un poco cómodos a bordo para nuestro desenvolvimiento por las jarcia y vergas y demás maniobras que siempre estábamos haciendo.

Ibamos ligeros de ropas, pero de calzado ni pensar en él, había que estar preparados para, en cualquier momento, de cambios de viento hacer las correspondientes maniobras sin entorpecimientos de calzado y vestimenta, lo puramente necesario.
Para los baldeos, claro, todas las mañanas al alba siempre al manejo de, al principio eran con ladrillos, luego con escobas de brezo, y despues, ya más modernos con bruses, de modo que cuando eran las siete de la mañana ya estaba la cubierta bien limpia y seca, pero como te digo siempre eran al compás del dichoso silbato del contramestre, que cuando se enfadaban nos metian el silbato por las costillas.
Bueno espero que te haya contestado a tu pregunta, ¿de que necesisades carecíamos?
Solamente te dire que, el comer con tenedor era un lujo muy desconocido, beber agua fresca de la baca, otro superlujo que no hemos visto, dormir una noche entera, otro superlujo que no hemos tenido, hablo navegando, yo estuve tres años seguidos navegando.

Bueno así podría estar contándote la vida a bordo, y no hablemos de los castigos, los palos y vergas eran nuestras aliadas, siempre encaramados a ellas.
Bueno no te aburro más con esta clase de vida que llevábamos, la conoce muy bien Arminio, y Meizoso, y los que estuvieron embarcados conmigo en aquella época.

Bueno amigos todos, recibir una muy cordial saludo, todos lo mismo que los que leen este blog.
Gerardo Ureña dijo...
El otro día tuve un sueño, fue un sueño increible.
Soñaba que los politicos de mi querida Patria, habian decidido salvar el Galatea, y esta magnífica noticia, era respaldada por los mandos de Marina de mi Pais. España se habia convertido en un Pais serio y digno, eramos admirados por todos los Paises del Mundo. ¿Cual había sido el milagro.?

Aplicar la lógica, tan sencillo como esto.
Nuestros politicos se dierón cuenta, que todo el Pais, estaba bañado y rodeado de mar.
A si pues el Galatea, sería reparado en Ferrol y votado por una gran mayoria, pasaría dos años en cada puerto importante de nuestra piel de toro. Empezaría por Ferrol, recorriendo todo el Cantábrico, para pasar más tarde al Mediterráneo, llegando a los puertos de océano y vuelta a empezar de nuevo.

¿Para que todo esto? Para deleite y disfrute de todas las generaciones presentes y futuras de este País. Asi como todos los habitantes de otros Paises, que quisieran y tuvieran a bien visitarnos.
Sin olvidar a todos los supervivientes, que alguna vez a lo largo de su historia, formaron parte de sus dotaciones.
Hombres que tendrían una muerte serena, viendo como el Galatea, estaba ocupando el lugar que le tocaba, en las páginas de su vida.

La Marina le asignaría veinte marineros, tres cabos segundos, tres cabos primeros, tres suboficiales, tres maquinistas y un oficial, que ocuparía plaza de comandante.

Las entradas al barco serían donativos, que irían en función del poder adquisitivo de cada uno, más el grado de generosidad del individuo. Todo lo que se recaudara, serviría para crear un fondo, con la única finalidad de auto pagarse sus futuras reparaciones.
Las visitas al barco seran diarias de lunes a domingo. En un lugar del interior, se habilitaría una especie de librería. En esta librería, se podría comprar, todo lo concerniente al buque, desde su nacimiento hasta nuestros días.

Como no podria ser de otra forma, se podrían comprar todos los libros que escribiera nuestro maestro y mentor Arminio, al que ¿como no?,añadiríamos sus magníficas poesías.
Al Galatea le saldrían, una legión de voluntarios y voluntarias, personas de elevados estudios, que de una desinteresada manera, estarían dispuestas a aportar ideas, con el único fin de reforzar la historia y mejorar todo lo mejorablemente posible, recaudando más y rentabilizando al máximo el buque. Personas altruistas siempre se encuentran.
En ese sueño, me vi a mi mismo, dándole un abrazo a la altura del palo macho del palo mayor, y mirando al bauprés le decía yo:
¡¡¡Lo conseguimos grandullón.!!! ¡¡¡Ves como si, ya te lo decía yo.!!!.
Apoyé mi cara en el palo mayor y con un chorro de maravillosa tensión, dándole continuos besos, le seguía diciendo. "Ya eres nuestro para siempre". ¿Sabes?, ¡¡¡para siempre!!!.
No se por que te quiero tanto grandullón, no lo se, me gustaría saberlo, pero no me importa, solo se que te quiero a rabiar, por ti daria mi vida Galatea, por que tú eres mi vida.
¿Cuantos momentos gloriosos tenemos vivido juntos? ¿Cuantos girones de piel nos dejamos en el gran camino.?¿Cuantas lágrimas tenemos derramadas juntos.? ¿Cuantas y cuantas vivencias, nos contemplan tus cuadernas.?

Sigue....
Gerardo Ureña dijo...
Miles y miles de muchachos sufrieron los rigores de los crudos inviernes, los titánicos temporales, pudiendo ver olas de gran magnitud.
Legiones de cursos, vivieron los tiempos de bonanza, los pasos por el Ecuador y sus magníficas fiestas. Cuantas vidas contadas y lloradas al abrigo de tus mamparas. Esperanzas conseguidas, otras arrojadas al mar, a través de los ceniceros de cubierta. Ha habido de todo, mi querido Galatea, más malo que bueno; entonces, ¿por que regla de tres, nos has inyectado estos embrujos tan fuertes y penetrantes.?

Nos has envenenado la vida, nos convertiste en unos locos marinos totalmente entregados a ti.
Unos locos marinos, que aún dejando la vida castrense, nunca fuerón capaces de olvidarte.
Unos locos marinos, que tienen en las venas de su cuerpo al Galatea navegando.
La grandeza de todo esto es, que nadie puede entender esta bendita locura, si, bendita, por qe es sólamente nuestra, y para poder entenderla, es de adsoluta necesidad haber pertenecido a sus dotaciones.
De pronto me desperté. Una vez los ojos abiertos, me di cuenta que todo fue un lindo y desgarrador sueño. Que el Galatea está en el mismo sitio y que todo fue...eso un sueño y los sueños sueños son.

Quise escalar la cumbre inaccesible,
descender al abismo por mi pie,
conocer lo remoto y lo asequible,
descifrar el enigma del¿por que?
WILHELM RAABE.

Dedicado con todo mi corazón a las milenarias dotaciones de nuestra Marina, que ocuparon espacio en el Galatea.
 
Arminio dijo...
Gerardo, tu comentario original lo tengo guardado por si lo quieres recuperar, pero el que está aquí es más dulce que la realidad y creo que queda bien. Además muchos pensamos como tú pero esos pensamientos los dejamos para nosotros mismos.
En este espacio queremos solo hablar del Galatea, lo bueno y lo malo, pero no meternos en más disertaciones que nos llevarían por un derrotero incontrolable.
Espero que no te moleste y te animo a que sigas escribiendo, pues es un lujo leerte.
Un saludo.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo Ureña, he leído tus escritos y me sorprendiste mucho, no creía que tuvieras ese don de exponer tus pensamientos literarios, solo le falta ponerle música. Entre tu exposición y Arminio con sus poesías, hacéis las lecturas de este blog muy amenas y de muy buena calidad, así que enhorabuena por esta nueva faceta que pones al descubierto ante nosotros.
Lo que me has dicho de aquella plaga, quedo muy bien enterado, lo que pasa es que no había leido esa parte, así que disculpa este error.

Dime si te recuerdas del suboficial sanitario, quiero decir su nombre, había también un cabo sanitario que se llamaba Conesa, luego te diré algo sobre él, pero por correo.
Bueno amigo Ureña, ya he visto que Arminio, pasó la lija por tu comentario anterior, ya que había algunas palabras un tanto fuera de tono, pero no te preocupes que no eres el único, también a nosotros nos pasó lo mismo, de esta manera se mantiene el blog limpio de alguna mala interpretación, por que hemos tenido un antecedente.
Bueno Gerardo, espero tu contestación, recibe un muy afectuoso saludo.
Gerardo Ureña dijo...
Buenos días José Mª : Te envío este correo, para contestar a tu pregunta sobre los sanitarios del Galatea.
Yo, José Mª, no recuerdo sus nombres, si que recuerdo sus caras, las recuerdo tan bién, que parece que los estoy viendo.
Había un suboficial bajito y muy educado. Había otro, alto, con el pelo cortado a cepillo, que más bien parecía un instructor de marines americanos, este por cierto, educación poca. He consultado con Miguel, y él si recuerda sus nombres.

El bajito se llamaba D. Basilio y el alto era D.Cecilio. Debo decirte que, yo por suerte frecuentaba poco la enfermería, pero esto no es obstáculo y corta pisas, para acordarme de sus caras, pero no de sus nombres.
Espero y deseo, haberte podido ser útil.
Siempre a tus ordenes. "El Timonel del Galatea"
Gerardo González Antón dijo...
Claro que me acuerdo. Con las salvedades de los años transcurridos, pero me acuerdo de casi todo.
Aún conservo entre otras cosas la primera libreta que use para tomar apuntes de maniobra.
El Mayor Contramaestre don Robustiano Alvarez Blanco, fue mi primer profesor de Maniobra y quien me recibió a mi llegada por primera vez al Galatea. Aún puedo contar como fue el recibimiento.
Estoy para escanear algunas fotos que aún conservo, pues de aquella ya tenía afición a la fotografía. En cuanto las tenga las remitiré.

Aprovecho para poner en conocimiento de todos que en el Museo Naval de Madrid se encuentra expuesta una maqueta de nuestro Galatea tal cual era, realizada por el conservador del Museo, señor Godoy, con su barloa, y sus botes, incluido el mixto. Con un detalle que puedo asegurar que cada vez que bajo a verla no puedo articular palabra.
Aprovecho para solicitar que me incluáis en la lista de viajantes a Glasgow a la de cargo (es decir a mi mujer) o al menos contéis que ella, irá conmigo.
Adjunto punto de contacto para el asunto que nos ocupa: maestregergon@terra.es.
José Luis Martínez Angel dijo...
Para Arminio:
El otro día, creo que el domingo por la tarde, mandé un comentario que no se ha editado.
No se si no lo mandé bien o habéis tenido algún bloqueo en los correos.
Un abrazo
Miguel Gómez dijo...
Bueno compañeros ex-galateos, seguidores, simpatizantes en definitiva escritores y lectores en general, esto es como una noria ya ha dado la vuelta, por lo que ya me tenéis de nuevo ante ustedes, para seguir haciendo algunos comentarios.

Gerardo González, a ese tal D. Robustiano Álvarez Blanco, durante mi estancia en el Galatea todavía era Sargento Contramaestre, pues ya sabes que por aquellos tiempos las escalas de los subalternos eran distintas, que yo recuerde estaba Sargento, Brigada y el Mayor, que creo que era a lo máximo que se podía aspirar, después cambiaron mucho las distintas escalas en los subalternos, pues de este Sr. podría extenderme y hablar mucho de él, fui pacto de su fuerte profesionalidad en varias ocasiones, quiero dejar constancia que no tenía nada en contra de él, pero tampoco a su favor, de momento sólo deseo que Dios lo tenga en un lugar de privilegio, D. E. P. eternamente.

Para José Luis Martínez, no tengo ni idea de lo que Arminio te puede contestar a esa anormalidad que tuviste al enviar en el blog tu comentario, yo lo que sí puedo decirte es que a mí nunca me ha fallado, pero también puede que esto de la informática tenga sus errores, de todas formas ánimo que esta vez si te ha salido bien.


De Gerardo Ureña, estoy esperando que aborde el comentario del viaje que hicimos a Guinea, que ese viaje da para mucho, yo hace ya algún tiempo comente algo por encima, pero Gerardo lo vivió de muy distinta forma ya que él ya era especialista, yo entonces era mi primer viaje y estaba destinado en la Cámara de Oficiales, de repostero, tenía que atender a todos los Oficiales, pero era repostero de el Teniente Médico D. Juan Bohórquez y el Alferez de Navío D. Francisco Cortes, que ocupaban el mismo camarote, los días que me tocaba guardia tenía que servir la mesa, pero todos eran muy agradecidos, nada que ver con los Contramaestres, cuando te cogían por su cuenta.

Recuerdas el diario que se editaba a bordo, llamado Portillo al Mundo, la Quinina, el ATP, la ración semanal de tabaco " LA MASCOTA " el cargamento de bananas al regreso, la Belarmina y muchas cosas más que tú si las debes de recordar, ya que posees una memoria privilegiada
Mis más afectivos saludos para todos los que se acerquen a este portillo, aunque sólo sea por curiosear, nuestra vida a bordo de aquel emblemático Buque, que nos atrapo entre sus velas para siempre.
Arminio dijo...
Hola a todos. En cuanto al comentario, Jose Luis, a veces aparece en Espam, pero esta vez no, puede ser un error, porque no aparece por ningún lado.
Para Gerardo, haber si nos lee enesta pagina principal, pues siempre se va al viaje a Glasgow, claro es tendencia de marino, pues el viajar es su vida.

Aprovecho para animar a todos a escribir y aportar fotos y todo lo que tengan que recuerde al Galatea y también aprovecho para comentar que la novela de Aleta de tiburón, " abordo del Galatea" está presentada desde hoy al premio de novela "Ciudad de Salamanca", al menos la leerán para valorarla, aunque hay mucha competencia para ganar el único premio valorado entre dieciocho mil Euros, y publicación inmediata.
También para Gerardo, esperamos sus fotos y que conteste si se acuerda de los de su promoción, como el cabo Largo.
Un saludo
Gerardo Ureña dijo...
Era en el viaje de Guinea, asi que, "Gran Miguel", espero puedas recordar algo de lo que me dispongo a ralatar.
En ese momento, mi rango en la Marina, tenía la graduación de Especialista. Supuestamente, si aprobaba, sería mi último viaje em el Galatea. Tenía el destino en el palo Mayor. El contramaestre de este palo era D. Pedro Gimenez.

Afortunadamente D. Pedro y yo manteníamos una gran comunión. Tanto es así, que, en una ocasión, y delante de mi persona, D. Pedro le dijo a D. Pablo San Emeterio,(D. Pablo era el contramaestre del palo Mesana), "Pablo este nuchacho es para mi, tan importante como el cabo Jubia es para ti". Esto viene a cuento, por que D. Pablo le tenía un especial aprecio al cabo Jubia.

Cuando yo embarque de quinto en el Galatea, el primer contramaestre que vi, fue a D.Pablo San Emeterio; por cierto que me dio una muy mala impresión, yo pensé que tenía cara de mala persona. Me equivoqué, fue una gran persona y mejor profesional.
Retomando el tema, debo decir que recibí una magnífica satisfacción personal, saber que para un contramaestre, era persona importante. Hacia lo que me parecia bien, nunca me puso ningún pero, siempre aceptaba mis sugerencias, esta forma de actuar me hacía sentirme importante, al tiempo que mejor valorado. Cuando embarque en el Galatea aquel 12 de Marzo de 1955, jamás pude suponer llegar a tanto.

Ahora es cuando le tengo que reconocer a José Mª, en uno de sus relatos dice..."Y nos pasabamos el día en las vergas", asi es realmente, yo subia con la navaja y el pasador, dispuesto a sanear todo lo que estuviera mal, se pasaban las horas sin darme cuenta. Arriba en las vergas era totalmente feliz y dichoso, mucho más reconfortante que, en cubierta.
A D. Pedro le preocupaba mucho, el perfecto estado del palo Mayor, ami me preocupaba mucho, la preocupación de D.Pedro.
En este viaje, tuvimos,(como en todos) un sin fin de anécdotas y vivencias, algunas ya las he contado en este blog, pero hay una muy especial que me gustaria resaltar y contaros.
Como ya he dicho al principio, espero que "Gran Miguel" lo recuerde, a pesar de que Miguel no se debería examinar en esa travesía.
El día no lo recuerdo, el examen, Scoot,(creo que se escribe así?) una maldita asignatura, que a mi personalmente se me resistía. No fui capaz de sacarle punta. Como yo había muchos, al igual que había muchos que para ellos era pan comido. La marinera, solia ser por contra, una bendición. Creo que le puse empeño, más siempre se me negó.

Ese día teniamos exámen de Scoot, el examen era en el sollado de popa. Se hizo en dos tandas, yo debería entrar en la segunda. El examinador, un teniente de navio, que sólamente hizo ese viaje. Desembarcó cuando llegamos a Ferrol, y dijo.
"Me voy con una profunda pena. No haber averiguado como me copiaron el examen de Scoot, no he sido capaz de saberlo. "Ignoro si este hombre, sigue en el mundo de los vivos, de ser así, aún se podría enterar a través de este blog, y si no es asi, como creyente que soy, pienso que donde quiera que se encuentre, lo sabrá también ..., supongo.
Los que deberíamos entrar en la segunda tanda, nos mantuvimos juntos en el sollado de proa.
Habia un muchacho de Cádiz, muy alto él, al que todos llamabamos "Látigo". Este compañero era un "figura" con la asignatura del Scoot.

Los que habéis vivido en el Galatea, de una u otra manera, sabéis que las mamparas que separaban los sollados de proa y popa, tenían diversos circulos para el paso de tornillos, tornillos que en alguna ocasión servirían para instalar alguna conducción eléctrica.
Bueno, pues si acercas el ojo y lo pegas a uno de esos círculos, la pantalla que tenemos al otro lado, se agranda de forma estraordinaria.
Mientras se examinaba el primer turno, nosotros anduvimos un tanto revoloteados, tratando de elegir el mejor de los circulos, Continuará...
Castrillon dijo...
Hola Gerardo Ureña,ya veo con tatisfación tu intervención, ya que eres de una mente previlegiada y me refrescas mi memoria tanto que, me parece estar viviendo aquellos momentos.
Bueno voy al grano, ese don Pedro, efectívamente, su destino era el palo mayor, y también tenía un miramiento por mi, era el único suboficial que no me había puesto la proa, me tenia bastante aprecio.
Cuando yo aprobé el curso para cabo segundo de maniobra, junto al palo mayor, me llamó y me regalo un silbato de plata con su nueva rabiza, que fué el que llevé durante mi estancia en los buques de guerra a lo largo de mi vida, y siempre me acordaba de esa noble y buena persona.

Cuando pasé destinado a los buque de guerra lo perdí de vista, también tenía a don Pablo San Emeterio, con casi todos los contramestres de aquella época en el Galatea.
Me encontré con ellos en el Crucero Almirante Cervera, estaban haciendo el curso para Oficiales, y tenian que ir al puente a observar con el sextante, eran prácticas, yo tenía el destino en el puente y sabía como iban en las prácticas, y cuando bajaba a cubierta solían llamarme aparte para que, les dijera algo de si lo habían hecho bien o habian fallado.
Fíjate como cambian los tiempos, ahora era yo el solicitado para hacerles alguna observación ya que estaba al alcance de mi mano. Para los examinadores el mejor era, don Pablo, era el que más sabía, yo también lo sabia, por que veia como corregían las anotaciones.

Bueno al Cabo Jubia también lo conocia yo, cuando yo embarqué ya estaba él embarcado, y otro cabo segundo de maniobra llamdo el Cabo Moreno, cuando desembarqué quedaba él a bordo todavía.
Tambien habia otro cabo segundo de maniobra que estaba destinado en la batea que estaba en el espardell, bueno me callo su modo de ser y omito su nombre.

Yo también era un poco flojo en geografía, pero en maniobra y navegación y militar era muy aceptable, luego superé con creces la geografía, era el número uno, y en señales no estaba nada mal, tanto en Scot y como en banderas y banderitas de mano, por ello siempre tuve en los puentes en los barcos de guerra de señalero.

Bueno Ureña, como sigas así podemos hacer un diario de nuestra vida navegando en aquella galera, ¿conociste a don Jacobo,? ese era un gran pirata, nos medía las espaldas con los rebenques embreados, ese fué tambien el que navegando por el Canal de la Mancha con todo el aparejo largado y navegando con el viento por la aleta de estribor, si me recuerdo muy bien esa banda, ya que ahí fue cuando hice el comentario con un compañero al que le dije que "hacia muy buen "aire" para las velas,!!.

Mira Gerardo no me dio tiempo a teminar, por detrás de mi estaba este don Jacobo, era la banda de estribor, y me dio tal bofetón en la cara que me derribó sobre la cubierta, y tuvo la molestia de agacharse y decirme al oido, pero a viva voz, "no se dice aire, se dice viento", se me quedó grabado en toda mi vida, bueno, claro a este castigo seguieron otros muchos más, por eso te digo que parecía que me habían puesto la proa.
Bueno no te molesto más, recibe un muy cordial saludo, y un muy fuerte abrazo.
P.D. ¿nunca te tocó comer tortilla de garbanzos? llamada "tortilla pegaso"
Gerardo Ureña dijo...
...y, aquél que mejor recogiera la imagen de este artilugio de cuatro caras, con una bombilla en su interior, y que manejado por D. Antolín Souto servía para comunicarse.

¿Que podia pasar,? podrían cambiar el exámen, en cuyo caso no habría tema. A quien Dios se la de, San Pedro se la bendiga. Podría ser el mismo exámen, entonces "Latigo" tosería los más veteranos, traté por todos los medios, puesto que de hacerlo así, seremos descubiertos.
Los más flojos, tenemos que sacar un aprobado raspadito para no levantar sospechas. ¿Conformes todos,? pregunté, yo, conformes, contestarón ellos. Bueno, ya teníamos nuestro plan montado, solo faltaba que saliera bien y que los chicos demostraran su inteligencia, aplicando las consignas al pie de la letra.

A fecha de hoy, todavía recuerdo el exámen.
Que barbian trata de comerse los boquerones tirando del mantel.
Colocare los codos sobre la mesa, para impedirlo.
Unos lo memorizamos, otros lo apuntaron haciendo una chuleta. Entra la segunda y última tanda a exámen, todos pendientes de que "Latigo" tosiera tres veces, un silencio sepulcral, empieza el martirio chino,¡¡¡ por fin Látigo tose.!!!

Yo hago mi examen, tal como habíamos quedado.
Termina el examen, todos a cubierta. En los comentarios de corrillos, yo ya me di cuenta, que no se hizo como habíamos quedado, temiéndome lo peor,y lo peor no tardó en llegar. El oficial instructor, se dio cuenta enseguida del milagro.

Resulta que el Espiritu Santo, bajó del cielo, revoloteó sobre nuestras cabazas, y los más burros de la clase, se habían convertido en los más inteligentes, y aún sigue habiendo gente que no cree en los milagros, vivir para ver. Lógicamente, se lió guapa. En una cosa, si que supimos ser una piña. Nadie le dijo al oficial como se había gestado el plan. Hizo entrevistas personales, y no fue capaz de averiguar nada.
A algunos les prometió a cambio un buen aprobado. No consiguió nada.

A mi no me llamó, por que yo había mejorado un poco, y lógicamente no estaba bajo sospecha.
Supongo que Miguel, en este viaje estaría de repostero en la camara de oficiales. Imagino que en esa camara se comentaría el hecho. La buena cuestión, es que, se repitió el exámen y todo quedó donde debía.

En uno de mis viajes de vacaciones, ya en la vida civil, tuve que pasar por El Grove. Me dirigía a la casa de conservas Yago, con la finalidad de comprar tres mil cajas de bonito en aceite, de un octavillo, y visitar a mi prima Raquel. El marido de mi prima era Celador de Puerto, destinado en esa plaza. Un día me acerque a la Comandancia de Marina, con la única pretensión de hablar con el marido de mi prima, dándome de narices con el comandante de El Grove. Teniente de navío de la reserva D. Pedro Gimenez. El alegrón que yo tuve fue para nota, a él le costo un poco de tiempo reconocerme, yo le reconoci enseguida. Es curioso comprobar que esa alegría tan desbordante, haga posible que salten todos los resortes, y sientas un volcán de sensaciones nuevas y maravillosas, imposibles de clasificar y controlar.

Estuvimos comentando lo clásico, él me dijo "Ya veo que no has continuado en la Marina, me preguntó como me resolvía la vida, le dije que no me podía quejar. Nos despedimos y nunca más nos volvimos a ver. Cuando me quedé solo pensé, y si no hubiese sido con D. Pedro el encuentro, si hubiese sido con otro, con el que no me llevase tan bien. ¿Sabéis a que conclusión llegué? Me llevaría la misma alegria, sin rencores, al menos por mi parte.
José Mª, supongo que tú si recordarás al cabo Jubia, el del palo mesana. He querido contaros esta historia por muchas y variadas razones, pero especialmente, por que disfruto con ello, lo vuelvo a vivir, y os puedo asegurar, tal parece, que me encuentro en el escenario real de los hechos, es increíble compañeros, no se puede decir con palabras. Es como si te sintieras inundado, por la magia y el misterio de nuestro querido BRICBARCA,
continúa...
Gerardo Ureña dijo...
Es como los rostros de la mar infinitos.
Algun día llegará que volvamos a navegar juntos en la otra dimensión, donde espero que los vientos nos sean faborables y podamos hacer, con la majestuosidad del Galatea, miles de viradas por avante, contempladas y disfrutadas por todas sus dotaciones.
Siempre vuestro. "El Timonel del Galatea"
Jose Luis Martínez Angel dijo...
Ya se lo que pasó el otro día: Mandé un "rollo demasiado largo" y el sistema no lo admitió.
Lo mandaré en dos tandas: Primera parte.
El otro día mandé una nota que no llegó a su destino y que trataré de reproducir.
Más o menos decía que la Marina de los 60 estaba realmente ilusionada con un plan de modernización de buques y dotaciones, que incluía la creación de nuevas especialidades, probablemente coincidente con la compra a los EEUU de algunos barcos como el Lepanto, uno de los "5 latinos", que fue mi destino como electrónico y al que recuerdo con gran afecto.

No conozco el programa de los anteriores especialistas, pero en nuestro caso pasamos tres meses en San Fernando recibiendo instrucción militar y también nos mandaron al Galatea para un curso de marinería.
En el cuartel de instrucción se limitaron a asignarnos algunas guardias de serviola, a darnos algún curso de señalero o de nudos y, sobre todo, a provocarnos callos en las manos de remar desesperadamente en los caños de la Carraca si queríamos evitar que la bajamar arrastrara los pesadísimos botes salvavidas hasta la bahía de Cádiz, mientras el contramaestre instructor nos arengaba "cariñosamente"… desde tierra.

Seguramente muchos de vosotros recordaréis esas horas agotadoras en las que el mayor éxito era mantener el bote en el mismo punto en el espacio, especialmente con viento de levante, a dos metros del instructor, que paseaba arriba y abajo por el camino paralelo al caño, entre toses, humo de tabaco, arengas y gritos: ¡Más fuerte!, ¡más fuerte!, ¡remad!, ¡remad..! ¿sois hombres o sois niñas..?, ¡repaleo!, ¡repaleo!, ¡más fuerte!, ¡más fuerte!, ¡remad!, ¡remad..!
¡Hay esas guardias nocturnas en las garitas del cuartel con viento de levante..!. ¡Menos mal que también pillamos los Carnavales de Cádiz…!

Valga esta introducción para llegar al "nudo" del relato.
Durante el tiempo que estuvimos en el Galatea nos asignaron destino y realizábamos tareas de mantenimiento para gozo de los marineros de "dotación", que no tuvieron la suerte de salir a la mar, pero disfrutaron de una mili sumamente apacible y descansada porque incluso la mayoría dormían en su casa, ya que eran "de Ría".

Por esta razón baldeábamos la cubierta con arena y polvos de gas, descalzos, como vosotros, con el mismo ritmo rápido y con el zig-zag acompasado de cada mañana. Lo hacíamos casi de pie porque, afortunadamente, disponíamos de brus, aunque en alguna ocasión el cabo o el contramaestre que dirigía la tarea, y que de vez en cuando nos espabilaba con el silbato, apreciaba alguna zona en peores condiciones. Entonces había que arrodillarse y tirar de estropajos y productos más abrasivos.
He visto en vuestras fotos que ibais descalzos o con botas de agua. A nosotros no nos las dieron, aunque había algunas para las ocasiones especiales. Nuestro calzado era la bota reglamentaria, o ninguno si teníamos que baldear o subir a las jarcias.
Y, como vosotros, hacíamos guardias, pintábamos, pelábamos patatas, tirábamos de cabrestante cuando se abarloaba algún buque de guerra (en nuestro caso casi siempre el Sánchez Barcaiztegui), etc., etc.

Nos dieron parte de las clases que vosotros recibísteis (menos especializada porque el futuro de la mayoría de nosotros era la tecnología, aunque también habían algunos "maniobras") y otras de rudimentos de navegación, y también de matemáticas y de física.
Nos hicieron conocer hasta el último sollado a bases de alarmas y zafarranchos y, naturalmente, tuvimos que aprender los toques de silbato de los contramaestres para realizar los frecuentes ejercicios de maniobra, tanto desde cubierta como subiendo a "aferrar", casi nunca con velas. Mi destino era juanetero de trinquete.
Como veréis teníamos el día muy ocupado y a cada hora descubríamos cosas nuevas que nos "enganchaban" más y más al Galatea, que pronto dejó de ser un destino "provisional" para convertirse en una especie de fantasía, un referente para muchos de nosotros. ¡Jodido barco..!
Jose Luis Martínez Angel dijo...
Segunda parte:
Pero llegaba la tarde o el fin de semana, se iban los francos, y el Galatea era prácticamente nuestro. Nunca he conocido un barco que, siendo tan pequeño, tuviera tanto espacio y tantos rincones "íntimos" para fumar un cigarro con los amigos o comentar las "aventuras" del día, Claro que cuando hablo de espacios incluyo el "palo de cada uno" (¡que importantes nos sentíamos charlando en la cofa del trinquete!) o el castillo y el bauprés, que eran terreno de todos.
En mis otros destinos jugábamos al dominó (pronto aprendí que cuando se juega contra radiotelegrafistas hay que vigilar sus "golpecitos" de ficha…), o al ajedrez, o a lo que fuera. En el Galatea ni se nos ocurría. Pronto nos dimos cuenta de que era una ocasión que no se repetiría y que teníamos que aprovecharla al máximo.

Momentos malos: El temor a las primeras subida a la jarcias. La mayoría de nosotros se quedaba agarrado a los obenques como garrapatas, que solo podían "despega" los gritos de los cabos de maniobra o sus silbatos empujándonos en los riñones.
El terrible dolor que causaban los flechastes en las plantas de los pies hasta que se nos hizo un poco de callo. Si no fuera porque a mí también me ocurría, era verdaderamente cómico ver nuestros "andares" con los pies inclinados para no apoyar la planta, y las horas que pasábamos haciendo "lo que podíamos" para rebajar sufrimientos. En mi caso era un dolor tan intenso que casi agradecía el achuchón del silbato porque si no, no me movía.

Momentos buenos: Todos los demás,.
Anónimo decía que "gracias por fijarte en nuestras tertulias de aquellas vidas a bordo en aquella galera…". Muchas veces imaginábamos que sentirían o como vivirían los marineros "de verdad" que navegaron en el Galatea y, mira por donde, lo estoy descubriendo.
Vosotros sois para mi una especie de "voces del mas allá" (en el buen sentido de la palabra), no unos fantasmas porque sois reales, que os contáis, desde la distancia, anécdotas, aventuras y alguna que otra desventura, de las que soy un asiduo "oyente".
Tengo que decir que, en muchos casos, lo que narráis coincide con lo que me imaginaba.

Un abrazo para todos
Castrillon dijo...
Hola Jose Luis Martinez Angel, he leido tus dos escritos, pero primero he de decirte que, efectívamente has escrito un comentario en fecha 7 de los presentes, fué jueves, y el anónimo, que escribió al dia siguiente, dia 8 fuí yo, dispulpa por usar ese nombre sin darme a conocer, muy mal hecho por mi parte.

En la pregunta que hacías para "todos", decías sobre los baldeos, si se iba calzado y si se empleaba el mismo sistema en en dichos baldeos sobre la cubierta de aquella galera, digo bien, galera, ya que fué eso para nosotros, en todos los sentidos, trabajo en los palos bueno en todo el buque, malos tratos, hambre sed, etc. lo único bueno era cuando llegábamos a puerto despues de muchos dias de navegación a vela.
Te hice un extenso comentario sobre ello.
Bueno, gracias por llevarnos hasta los años sesenta hasta, aquel buque que habíamos dejado, ya que así se completando toda la vida que tuvo ese buque con sus diferentes dotaciones.
Así que, vuelvo a pedirte disculpas, a ti y a todos.
sin mas por el momento, recibir un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo a todas las dotaciones de todos los tiempos del Buque Escuela Maniobra Galatea, y que Dios os bendiga a todos.
Arminio dijo...
Buenos días en esta mañana de un larga jornada de junio. Aprovechando la bonanza del clima y el frescor del comienzo del día, con la cubierta baldeada, todos los cabos adujados y estibados en sus correspondientes cabilleros, y tanto el personal como el buque en perfecto estado de revista, nos disponemos a afrontar esta nueva singladura en el día de hoy.
Para el Galatea cada día va siendo mejor, pues abandonado a su suerte y casi olvidado por todos, de un tiempo a esta parte cada día es más brillante que el anterior.

Ahora ocurre lo contrario de lo que hace tan solo tres años sucedía. Cada jornada que pasa es recordado con más cariño, más viveza y más alegría que lo era hace poco tiempo. Gracias a un grupo de entusiastas que decidieron embarcarse en este viaje que les ha hecho formar parte, y para siempre de la magnífica dotación del Galatea
Espero que de aquí en adelante los sucesos que vayan acaeciendo sean cada vez, mejores y de mayor magnitud para nuestro velero.
Sin ir más lejos los proyectos que tenemos poco a poco se van cumpliendo, gracias a la tenacidad y la constancia de aquellos jóvenes muchachos que ahora y en esta trepidante actualidad no dejan de ser la vanguardia y el baluarte del Galatea.
Gracias a todos ellos por su buen quehacer que ha hecho que el Galatea navegue de nuevo. Un saludo a todos.
Miguel Gómez dijo...
ESTOY INTERESADO EN IR A ESCOCIA A VISITAR NUESTRO GALATEA
ALGUIEN ESTA INTERESADO SE PODRIA HACER UN NUMEROSO GRUPO PARA IR JUNTO
SALUDOS
Comment by arminio sanchez mora— 20 octubre, 2009 #
Qué lejos estaba todo lo que ahora nos acontece, cuando nuestro incombustible jefe de derrota, Arminio, escribía este párrafo, eran mis primeros contactos con él, gracias a sus líneas maestras marcadas rumbo a un horizonte un tanto incierto, con muy escasa dotación puso la proa de nuestro Galatea en las coordenadas precisas para conseguir el éxito, gracias a su gran trabajo y tesón ahora nos encontramos, mucho más cerca de los objetivos marcados en su día, que eran recuperar la memoria de nuestro viejo velero, es cierto que todos en mayor o menor medida hemos puesto nuestro granito de arena, con esos granitos ya hemos formado una pequeña montaña, ya está levantando expectación ese arduo trabajo, el Galatea virtualmente vuelve a navegar de nuevo, ya es de interés para los lectores así como para los medios de comunicación, los que amamos a ese emblemático buque hoy lejos de nuestra patria, me permito en nombre de todos ellos y en el mío propio volver a darte las gracias Arminio.

Me comentó, vía telefónica, un gran amigo y compañero de promoción, residente en Cartagena, un hecho que yo no recordaba, según me dijo estando todavía nosotros a bordo, se realizo el cambio de los chalecos salvavidas, aquellos de corcho de la época de Colon, que ya estaban muy viejos y quemados por el paso de los años, por otros que eran mucho más modernos, aquellos de espuma forrados de nailon que parecían los de la US NAVY, lo cierto es que encontró dos de aquellos antiguos muy pequeños con una marca G1 y G2, su curiosidad le llevo a preguntar a alguien que llevaba mas tiempo en el Galatea, que para que se hacía servir aquellos chalecos de juguete, le contestaron que eran de los gatos que había tenido un comandante a bordo.

Yo les pregunto a Castrillon y Gerardo Ureña, ¿si durante vuestra estancia a bordo, a parte de la perrita Chiclana también había dos gatos, ya que yo jamás vi ningún animal a bordo, al no ser alguna rata de sentina?.
Para finalizar este comentario me remito a los anteriores, como de costumbre deseo lo mejor para todos, mis mas afectivos saludos para los que se dignan leernos, gracias por estar cerca de nosotros, para los cooperantes abrazos colegas.
Castrillon dijo...
Hola Miguel, estoy cansado de decir como se llamaba la perra pastor aleman que llevábamos a bordo en los años 53-54, era del Segundo comandante, y se llamaba LAYKA, que desapareció en la mar, en un muy fuerte temporal debido a un ciclón que nos duró tres dias. Ya lo he contado más veces para aclarar algunos puntos, y que nosotros sepamos no tenía ningún chaleco salvavidas, y menos de esa índole que tu mencionas, ya que los que nosotros teníamos eran de corcho forrados con lona y estaban muy viejos y deteriorados,y que yo sepa, no recuerdo haberlos puesto nunca, ya que era casi imposible que aguantáramos con ellos en caso de naufragio.
Lo más que nos podría ocurrir, sería que estuviéramos a flote unos minutos. ¿Que les paso a los del Pamir? pues lo mismo nos pasaría a nosotros.

Y, lo del gato, ¡ claro que también teníamos un gato!, andaba por cubierta y nosotros poco caso le hacíamos, excepto cuando un compañero lo cogió y lo lanzó al centro de una actuación festiva que se hizo a la puesta del sol por el paso de los trópicos.
Pero esa clase de chalecos tan modernos como tú dices los desconocíamos. Ya sabes que, los medios de salvamento de que disponíamos eran de la época del descubrimiento de las Americas, gracias al Aquel a quien cantábamos la oración todos los atardeceres y oía nuestras súplicas y, que a pesar de los grandísimos peligros de los temporales, nos libró de ser arrastrados por la mar y desaparecer bajo las aguas.

Sabes que éramos muy austeros en materia de comunicaciones, sólamente conocíamos la radio, y para eso en un temporal nos desapareció la antena que teníamos en la galleta del palo mayor, estuvimos incomunicados algunos días, y en Madrid ya estaban un poco alarmados por falta de noticias nuestras hasta que hemos puesto una antena nueva y se comunicó a Madrid. Bueno éramos austeros en todo.
Bueno, Ureña ¿dónde estassss? te estamos esperando,a ti y a los demás contertulios,!!! Laguna, donde estassssss tu también ¡¡¡
Bueno amigos y compañeros todos, sin más recibir un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Gerardo Ureña dijo...
José Mª Y Miguel, Miguel y José Mª.
La gata que tenia el comandante, Ramon Liaño de Vierna, se llamaba la "pepa". el comandante la quería y cuidaba muchismmmmoooo. En este blog he contado la latas de sardinas de la marca "Miau" que se comia esta gata, y que le daba el mismo comandante. Eran de 320 gramos, de aquellas latas amarillas de lengueta.
En más de una ocasión, estando yo de ordenanza del comandante, he sido testigo directo de lo que os cuento. Bien, aquella gata desapareció un buen día y nunca más se supo de ella. Pero antes de que desapareciese, esa gata tuvo un gatito. El comandante cogio un gran cabreo y montó en colera, pero se tuvo que resignar. El maestro velero le hizo un coy al gatito y lo solia tener en el pañol de velas.

Este animal estaba mejor cuidado que el Cardenal Cisneros. Esta es la historia de la gata "pepa".
Referente a los chalecos salvavidas, los dos estáis equivocados, los viejos, si es cierto que andaban por el barco, pero los nuevos de esponja, yo los he llevado desde el primer día. Con toda seguridad compañeros.
José Mª, preguntas ¿donde amarro?, Ando recién operado del caño (no confundir) izquierdo de la nariz y estoy un poco "tiruleta". Ahora mismo salgo para el hospital general. No es nada preocupante (eso me dicen). Hasta pronto.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo Ureña, yo creo que estás en un error de fechas y chalecos, yo como tú sabes y Miguel también, salí del Galatea en el mes de Agosto del año 1.956, entré en el año 1.953, y te digo y vuelvo a decirte, que JAMASSSS he visto esos chalecos salvavidas a que tu aludes.
Eran de cocho y forrados de lona y tenían unas cintas para pasarlas alrededor de la cintura, también te diré que esos forros de lona estaban totalmente quemados por el sol, la salitre y el óxido.
Miguel también se recuerda bien de ellos, por que Miguel embarcó cuando yo desembarqué, y tiene unas fotografias que estan expuestas en el blog y en los botes, uno de ellos tiene ese chaleco que menciono, puesto, o sea que seguían siendo los mismos.

También hablas de dos gatos, yo sólamente sé de uno, además era blanco, pero no más, en todo caso sería en el viaje siguiente al último mio.
Bueno ya nos dirás como te va la nariz, esperamos que no sea nada, ya sabes que estamos a tu lado en todo momento.
Sín más por ahora recibe un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Castrillon dijo...
!!!!!! Eheheheheheheheheheeeeeeee¡¡¡¡¡ ¿dónde os encontráis todos ? ¿ estáis durmiendo en la batayola? !!!!!! Arminioooooooo toca maniobrageneraaaaaaaaaallll¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Ya vemos que hay visitantes pero, no aparece nadie en la escritura, Miguel también te digo a ti, ponte en el teclado y escribe.
Si alguien escribe algo, yo, por mi parte os cuento algo que todavía no he contado, bueno tengo bastante oculto, pero ya lo sabréis si no decae el ánimo y os ponéis a escribir, pero scribir algo de la vida del Galatea y su dotación. Venga animaros todoooooooosssss.
Recibir un muy cordial saludo todosssss.
Arminio dijo...
Parece que la tripulación está algo relajada, claro se acercan de nuevo las vacaciones y cada uno tiene perdida la mirada en sus lugares de destino.
A pesar de todo, el buque se encuentra en perfectas condiciones de revista y con toda la dotación siempre alerta para, ante cualquier imprevisto saltar sobre la cubierta y en menos que que canta un gallo, estar todos en su destino.

A veces, algo de relajación biene bien para recuperar nuevas fuerzas y proseguir esta larga navegación, que aunque tiene momentos de tranquilidad, siempre sigue adelante salvando los avatares que algunas veces nos pillan de improviso, los cuales superamos con tesón y saber marinero, como lo saben hacer los especialistas del Buque Escuela de Maniobra Galatea.
Un saludo a todos.
Miguel Gómez dijo...
Hola apreciados galateanos y demás seguidores de estos comentarios, ante todo mis más expresivos deseos de disfrute de un confortable y sosegado verano que acabamos de empezar, es cierto que según en el lugar que ocupemos en este territorio peninsular, estaremos más o menos "calentitos", lo importante es pasarlo de la mejor forma posible.
Cuando yo embarque en el Galatea había un compañero de Cádiz, no recuerdo si era de mi curso o ya estaba, por lo que en ese caso seria de un curso anterior, era muy alegre y divertido, su destino era bombero de cubierta, como bien sabemos esos destinos eran antes de entrar en la escuela, no éramos del mismo grupo de salidas a tierra, pero simpatizábamos bastante, bueno el era muy extrovertido y popular a bordo,.
Hicimos juntos el viaje de Guinea, en el segundo viaje que fuimos a Dakar, no sé que le motivó para junto a otro que también eran amigos y quiero recordar que del mismo rancho, decidieron desertar y quedarse en tierra, la salida de Dakar se retraso algunas horas pero al no regresar se decidió zarpar sin ellos, sólo fue salir a la mar, cuando dieron la orden de custodiar sus taquillas, a los pocos minutos se presenta el Condestable junto a un cabo primero, desactivan los candados y proceden al registro de sus pertenencias, que las metieron en sus respectivos sacos, los depositaron en el pañol del Contramaestre y ambas taquillas quedaron libres.

Pasaron muchos años y por casualidades de la vida y gracias a las nuevas tecnologías, nos ponemos en contacto nos alegramos de volver a retomar nuestra amistad incluso reforzarla, aunque la distancia es considerable no ha sido ningún obstáculo para comunicarnos y seguir siendo muy buenos amigos, a él le gustaría escribir en este blog, pero los años van dejando sus huellas y tiene cierta dificultad óptica que le impide hacerlo, de todas formas si este comentario llega hasta él tiene que saber que lo recuerdo y le saludo efusivamente.

Haber Gerardo, yo no sé si estoy en lo cierto pero creo que si, en cuanto a los chalecos salvavidas, tengo que decirte que en este caso estoy mucho más cerca de Castrillon que de ti, si miras las fotos del blog veras que en una donde me encuentro yo junto a otros compañeros en un bote salvavidas, uno de ellos tiene un chaleco puesto y es de los antiguos que eran los que habían en los botes, esta foto se hizo en el viaje a Guinea y a decir verdad tampoco recuerdo ese cambio de chalecos, como creo que tengo razón orinaré por barlovento en la toldilla que es la zona de Castrillon, ahora que está algo ausente.

Saludando desde el castillo me despido por hoy, rogando que no seáis perezosos, que estamos un tanto relajados, hasta pronto.
Castrillon dijo...
Hola a todos.
Miguel, en nuestros viajes desertaron más marineros que en los viajes que diste, que yo recuerde, en total desertaron seis marineros, y como te dije en otros escritos, también a mi y otros compañeros míos, de Asturias, cuando llegamos a Hamburgo, en plena calle, un gran señor nos propuso que nos quedaramos allí en su granja, le dijimos que si, pero que teníamos que ir al barco para coger nuestras cosas y que al día siguiente nos esperara en el mismo lugar, y nos dio unas targetas de visita con su domicilio.

Esta conversación la estaba oyendo un joven, que era de España y que vivía allí, y nos dijo que ese señor era uno de los más ricos de Hamburgo, claro está que cuando llegamos al barco se lo dijimos al contramestre de guardia, y le dimos las tarjetas que nos había dado ese alemán.
Al día siguiente salimos otra vez a la calle pero no hemos pasado por el sitio del día anterior, y no lo hemos visto más.
Ya te digo, se que desertaron más pero no recuerdo quiénes eran, ya que nos enterabamos cuando estabamos en la mar navegando, y como quedaba el destino al descubierto era cuando nos dabamos cuenta. También sé que, en Nueva York desertaron algunos.
Bueno, a ti te digo, tú que estás leyendo este blog, danos tu sabia opinión de como ves este blog.!!! Ureñaaaaa¡¡¡¡¡¡ te esperamossssss. Recibir todos un muy cordial saludo.
Arminio dijo...
Bueno, un saludo a todos desde tierras gallegas, muy cerca de Ferrol, donde se fueron a pique el bergantín Palomo y la fragata Magdalena, en la bahía de Viveiro.
Espero de vez en cuando encender el ordenador para deciros que aunque no escriba trato de asomarme por el castillo del Galatea de vez en cuando.

La próxima semana iré a Ferrol e intentaré, al menos, ver algo de aquella ciudad donde viví junto al Galatea.
Un saludo a todos.
Castrillon dijo...
Oye Arminio, no nos pongas los dientes largos, esperamos que lo paséis muy bien toda la familia, y que rememores tu antigua enseñanza en el Buque Escuela de Maniobra Galatea. Deja volar el pensamiento y vive aquellos momentos que jamás volverán.
Desde aquí, en el Castillo, os deseamos unas felices vacaciones.
Miguel andra tramando algo para quitarte el puesto, estaré atento.
Recibir todos los tuyos un muy cordial saludo de esta dotación.
Gerardo Ureña dijo...
COSAS SUELTAS-PEQUEÑOS RECUERDOS Y ALGO MAS.
Para todos los auténticos Galateanos, dedicado con gran respeto y mucha admiración.
Miguel, es posible que tú estes en posesión de la verdad, no lo se. Posiblemente he tenido un empacho de fechas y me confundiera, puede ser.
Yo diria que tengo razón, pero eso ahora ¿que más da?. Hecha esta salvedad, el que suscribe ha llevado esos chalecos en el Galatea, y no un día, ni dos, muchas veces.
José Mª, espero poder aclararte el tema de la gata, a la que todos llamabamos "Pepa".
Este minino, un buen día desaparecio. No faltó quien señaló a un grupo de habersela comido.

Este comentario llegó a mis oidos y a más gente, más yo no podria jurarlo. Anteriormente a su desaparición, esta gata, "La Pepa", tuvo gatitos; parece ser que tuvo más de uno.
También se decía que nuestro comandante, "el sordo", dio orden de que viviera solamenta uno.
Suponiendo que todo lo que digo es cierto, cosa que ignoro, lo que viene a continuación es rigurosamente verdad, lo he vivido en primera persona del singular, o del plural, según se mire.
Veamos José Mª. Tú te tienes que acordar de lo que viene a continuación, pues en aquellas fechas Miguel no estaba, pero tú eras un acreditado veterano.

¿Te acuerdas bien del maestro velero.? ¿Si?, me alegro. En el viaje de Bremen, uno de los quintos que embarcó, fue el hijo de maestro velero (no recuerdo su nombre) este muchacho, con el que tuve muy buena relación, era muy "coñero", y las borracheras le gustaban más que chuparse los dedos. Pero ademas era intimo de una familia, que a su vez era también de mis tíos.
Todo esto dió como resultado, mayor afianzamiento entre nosotros.
El comandante le encomendó la custodia del gatito al maestro velero, (que tenia la graduación de mayor) y este lo cuidaba en el pañol de velas.
El maestro le hizo un coy pequeñito (parece que lo este viendo) para dormir, y el tío vivía mejor que un cura. Y esto José Mª lo he visto yo, no me lo contaron, lo ví y lo viví personalmente. Parece ser que al regreso de Bremen, el comandante se llevó el gatito a su casa. sigue...
Gerardo Ureña dijo...
Continúa… Es por este motivo, que, poca gente, sabía de la existencia de este pequeño gatito, pero yo doy fe de ello.
Si supuestamente se estaría celebrando un juicio, esto serían hechos probados.

Esto es para José Mª.¿Tú te acuerdas de TAHUIMA"?.(Espero que este bien escrito) "TAHUIMA" era un muchacho bastante guaperas, tanto que más de un corazón se quedo desgarrado y sin consuelo. Creo recordar que fue en el viaje de Pernambuco. "TAHUIMA" estaba en las vergas del palo mayor, concretamente en las gavias. Quiso hacer de "tarzán", y bajó a cubierta deslizandose por uno de los muchos cabos que tiene el palo mayor. Tuvo problemas, estuvo a punto de pegársela, le ayudó su ángel de la guarda, pero no le hechó una mano el oficial del puente que le vio caer. Este dio parte al segundo y al comandante.
El cabreo del comandante fue de impresión, lo mando pelar al cero, más el consiguiente arresto. Esto yo no lo presencie, pero lo que se dice pasar, paso.
Supongo que lo recordaras, tú estabas a bordo.

Me preguntas José Mª, si he comido tortilla de garbanzos, creo que no, al menos no recuerdo.
De lo que si tengo memoria es de la ropa vieja, ami me gustaba. Tambié me acuerdo de los "fritos", masa de harina frita en aceite, que te comías un par y te quedabas muy bien comido.
Algo que recuerdo con intensidad, son los bocadillos del mayordomo. Tú recuerdas aquellos bocadillos de mortadela, que venían en latas cilíndricas, y que sabían a gloria bendita, ¡¡¡que ricos estaban!!!
El mayordomo nos vendía unos cartones, donde tú gastabas, pero ojo, que no te podías pasar, él siempre tenia el cobro asegurado. Que cosas José Mª, con los años que pasaron y no se me despintó su cara. Recuerdo también la invasión de ratas que padecimos. Fue tan grande que el comandante decidió premiarnos por cazar estos desagradables roedores.

No recuerdo bien la cuantia de los premios, lo que si recuerdo que había una cantidad en metálico por cada pieza, y estas se acumulaban para disfrutar días de permiso extras.¿Te acuerdas de esto José Mª.?
Habia un muchacho de mi promoción, cuyo nombre era GERARDO GARITAHONANDIA, nacido en Ferrol, que decidio tomarselo en serio, y en serio se lo tomo.
Una noche, recien salido de guardia, eran las doce horas, cuando bajé al sollado de popa, me disponia a sacar mi coy de la batayola, cuando le veo colocando cepos en lugares más o menos estratégicos. No pude resistir la curiosidad y le pregunto ¿que haces?. Sin ningun problema responde todas mis preguntas.
"El comandante ofrece por pieza cazada, tanto... y cada diez piezas un día más de permiso" " ¿y tú como lo llevas", le pregunto. "Yo, de primera, ya tego cobradas tantas piezas", no recuerdo cuantas me dijo, pero era una importante cantidad. "Ven conmigo", me dijo, y me bajó al pasillo de la sala de máquinas, tenía un número considerable de cepos, y esto a lo largo de una noche, daban un rendimiento "chachi trujana calcetines de lana". GARITAHONANDIA puso al comandante contra las cuerdas, tanto fue, que nuestro comandante anulo la convocatoria.

Dijo que el que quisiera matar ratas, que lo hiciera por placer y deporte.
La respuesta no se hizo esperar, desde ese preciso momento, el único cazador en activo, pasó a clases pasivas. Lo que yo no pude entender nunca, quien aconsejaba al comandante, y por que tomaba esas decisiones, que rápidamente dejaba sin efecto. ¿No sabía el comandante que le podía salir un "fenómeno.?
Y si lo sabía ¿por que lo hace.? ¿No quería eliminar el mayor numero de roedores.? Lo estaba consiguiendo,¿por que lo cortó de raiz?
¿Tal vez, eso fue un viva Cartagena y haber que pasa? (¿ ? )
Supongo José Mª que tendrás memoria de este singular asunto, fue muy comentado.
Un abrazo a todos.
Miguel Gómez dijo...
A mis apreciables amigos ex-galateos, también a los simpatizantes de estos temas o comentarios, que al parecer son numerosos, vaya por delante mis deseos de felicidad para todos ell@s, agradecemos sinceramente su grata compañía.

Hola Gerardo, ya veo que te has repuesto de esa pequeña molestia que te tuvo algo preocupado, y que también has recuperado parte del tiempo perdido, tu extenso comentario te delata de que tienes necesidad de exponer tus agridulces vivencias a bordo de aquel viejo velero, pues bien sabes que los que colaboramos en este blog, así como los que lo visitan somos como un banco de peces hambrientos por devorar aunque sólo sean las migajas que caigan por la borda, por lo que te digo avante toda.

Referente al mayordomo, también yo lo recuerdo perfectamente y ¡quien no! Los bocadillos de mortadela estaban muy buenos, pero mi debilidad eran los de chorizo a la plancha con el panecillo caliente también en la plancha, lo que no recuerdo es esa forma de pago que tu relatas en tu comentario, yo creo que lo pagaba con dinero al contado, puede que este algo desmemoriado, de todas formas son gratos recuerdos.
En cuanto a las ratas y su captura, también estaban en mi época pero mayormente era en puerto, en Ferrol al que entregara una rata muerta el Contramaestre de víveres le pagaba X pesetas, no recuerdo la cantidad pero no debía ser muy alta como para dedicarse a la caza y captura de ellas, también la tuvieron que suspender, porque se dieron cuenta de que la misma rata la pagaban varias veces, debido a la picardía de los jóvenes marineros, el sistema era el siguiente: alguien cazaba la rata la presentaba a la persona encargada recibía su recompensa, la mandaba tirar por la borda, ya había otro compañero preparado para su rescate que pasado un tiempo prudencial volvía a hacer la misma operación, y así varias veces hasta que se dieron cuenta y se acabaron las recompensas.

Haber Castrillon, no estoy preparando ninguna jugada para desposeer a Arminio de su cargo, ni nada más lejano de mi mente, como es lógico durante su ausencia es cierto que estoy asumiendo su relevo, pero eso es normal, cuando se incorpore ocupara su destino, no sería lo mismo si el que estuviese de vacaciones fueses tu, seguro que en esas circunstancias otro gallo cantaría, por lo que quedas advertido no se te ocurra coger ni un solo día de vacaciones, pues ya sabes que tu puesto sería ocupado para el resto de esta singladura y hasta puede que para las siguientes, " ojo avizor".
Mis más afectuosos saludos para todas las personas que de cualquier forma tengan algo de proximidad a este espacio.
Gerardo Ureña dijo...
Mi estimado "Gran Miguel", tú seguramente, fuiste un gran previlegiado. ¿Sabes cuántos giros de dinero, recibi yo, de mi casa, en cuatro años de Marina?. Sólamente uno de ciento cincuenta pesetas. Al mayordomo y al cartero, se le pagaba al rendir viaje a Ferrol. El cartero, no gastaba tikets, éste te apuntaba todo lo que le comprabas; cuando llegabamos a Ferrol, le presentaba las cuentas al habilitado, y a su vez cobraba todas las cuentas pendientes.

Lo mismo sucedía con el mayordomodo, pero éste nos daba un cartón que llevaba treinta y un números (un mes) en todo el borde del mencionado cartón. Tú consumias y él te recortaba un número cada vez, cuando terminabas un cartón, inmediatamente te reponía uno nuevo. De esta manera tú consumías y él feliz.
La operación la misma que la del cartero. Le pagaba el habilitado. Si tú dices que pagabas al contado, este modelo también lo aceptaba, pero al contado sólo pagaban los ricos, salvo que tú pillín tuvieras posibles.
¡¡¡Vamos que ya me entiendes!!! Un banquero en el Galatea. En mi casa Miguel, habia permisos que tenía que vestir de marinero, por que la poca ropa que yo dejé, se la quedo mi hermano José Luis.
Espero y deseo haberte aclarado suficientemente el tema, y como siempre a tu disposición.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo, mira, podría acordarme de cualquier cosa por muy difícil que fuera, de aquelos lejanos años a bordo del Galatea cuando estábamos navegando, !! digo de cualquier cosa por muy difícil que fuera ¡¡¡¡ pero de TAGUIMA jamás me acordaría de su nombre!!!! pero efectívamente, sí, ahora que tú lo has mencionado, mi memoria retrocedió a una velocidad vertiginosa a áquel tiempo, y me eché a reir.
!! Claro TAGÜIMA¡¡ ¿ como no me voy a acordar ? gracias a ti, que tienes una super memoria.
Mira, ese incidente lo veo en mi meoria muy borroso, !! si ¡¡ se que hubo un acidente de esa índole, pero no lo recuerdo muy bien, y el famoso TAGÜIMA andaba por el medio.

Lo que si me recuerdo fue un accidente,en el que estando aferrando las velas, estaba Victor Moreno Maqueda, estaban aferrando el velacho alto, y un marinero, estando recostado sobre la verga con los pies en el aire, como solíamos hacer, en vez de teneros sobre el marcha pies, cuando quiso ponerlos, falló y se quedó colgando del tomador de fijar la vela a la verga, entonces Maqueda, que tenía una fuerza descomunal y otro compañero lo cogieron por el brazo y de un fuerte tirón lo pusieron sobre el marcha pies, casi nadie se dio cuenta de esto,y no paso nada, pero como te digo, el otro incidente lo tengo muy borroso.

Referente a lo del gato, bueno, yo poco o nada me ocupaba de ello, tampoco me interesaba, pero me suena de un gato pequeño, y lo del hijo del maestro velero lo conocía muy bien, era muy buen muchacho y compañero, todavía parece que lo estoy viendo, ya que cuando desembarcamos para ser ir a nuestro nuevos destinos en la barcos de guerra, estuvo todo el tiempo con nosotros hasta que cogimos el tren, ya no supe más de él.
¿Te recuerdas de mastro cocina capilla ?sigue........
Castrillon dijo...
Sigo Gerardo.
Claro que me recuerdo de los famosos bocadillos de mortadela, claro queestaban ricos, bueno cualquier cosa que comíamos nos sabía demasiado bien, estábamos acostumbrados a pasar hambre y sed.
Yo, menos mal que tenía un paisano mío, de Lastres Asturias, que estaba destinado en la panadería y me daba buenos bollos de pan tierno.
¿Que me hablas? ¿ de las ratas? bueno, eran asiduas compañeras nuestras. Mira, en una de las guardia, yo salía de guardia de media, y entraban los del alba. Me bajo al sollado, subí al coy, y me quedé dormido rápidamente, pero, al poco tiempo me despiertan unos arañazos por la cara, eran ratas que andaban por encima mía, y eso que tenía el coy colgado.

Las veía llegar por las bolinas, por más que hacía para echarlas no podía. Total, decidí no pelear con ellas, me tapé bien la cara y todo el cuarpo con la manta, y sentía como andaban por encima de la manta, pero no intenté más, tenía sueño, me dormí y hasta que, más tarde tocaron diana.
Tambien cuando dormíamos en el suelo, nos hacian visitas y nos despertaban, hacíamos lo mismo enrollarnos en la manta y listo.
!! Claro que daban premio por cada rata que cogías, la llevabas al puente y después de comprobar el oficial de guardia te mandaba tirarla a la mar, solían darte un puro para fumar, pero, había alguien que tenía una jaula y las metía en ella y siempre tenia premio, yo jamas me dediqué a ello.

Ellas formaban parte de la dotación, casi las conociamos a todas.
Bueno Gerardo, te seguiría contando pero quiero ver el futbol.
Te tengo que contar algunas cosa más, ya que me acuerdo de ellas, pero para la próxima.
Bueno, sin más por ahora, espero que no tardes en refrescarme la memoria. así que, sin más por ahora, recibir todos un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo y que Dios os bendiga a todos.
Jaume Matamala dijo...
Compañeros GALATEANOS; estamos sumergidos en una fuerte campaña publicitaria que nos tiene que llevar a incrementar la lista de nuestra tripulación del GALATEA.
Ya se ha publicado mucho. Ahora en 20 MINUTOS, saldremos en 15 ciudades y con todo este patrimonio periodístico nos haremos oír aún mas, para que nuestro viaje tenga la resonancia que se merece y demos una lección a quienes quisieron silenciar la memoria de nuestro VELERO.
Arminio dijo...
Hola a todos, perdonar mi tardanza en escribir, pero desde hace unos días no me he podido conectar.
Estuve en Ferrol, viendo Capitanía, la calle Real, los cines a los que solíamos acudir y otras cosas. Me he llevado una decepción ya o era lo que hace unos años.

Estuve en el Bar Galatea y me deron algunas direcciones de personas que tienen muchas fotos del Galatea. Jaume estaba en primera línea de los reseñados. Ya les comenté que participaba con nosotros en el proyecto del Galatea. Quedé en enviarles algunas fotos por correo.
Bueno un saludo y ya me reincorporo el lunes que viene.
Castrillon dijo...
Hola a todos, os voy a proponer una cosa, ahora que no está Arminio, el dueño de este blog, por encontrarse de vacaciones.
Vamos a hacer una fiesta en la toldilla, Miguel va a llevar dos mil barriletes de cerveza, de los seis mil que me debe, Laguna llevará unas buenas riestras de chorizos, Gerardo Ureña llevará unas cuantas costillas asadas, y Miguel se encargará de los postres. Yo, por mi parte ya sabéis pongo los dos mil barriletes que me debe Miguel, y también pongo las tumbonas en la toldilla y el toldo, también el tocadiscos.
Mientras estamos en la fiesta Miguel, subirá a la cofa del palo Mayor para vigilar si viene Arminio.
Asi que animo a todos y a la fiestaaaaaaaaaaaa.
Castrillon dijo...
Hola Gerardo Ureña, te voy a hacer una pregunta,¿ Tu has visto alguna vez al Galatea navegar con todo su aparejo largado y con muy buen viento por un largo?.
Quiero decirte, cuando digo con todo el aparejo, quiero decir, con todas las velas, más con una vela puesta en el tangón, se puso el tangon dado y en el mismo se puso una vela triangular, parecido a una vela latina.
Yo lo he visto una vez, no había lona que no estuviera largada, hasta las de reserva, que eran la del tangón, era una admiración ver esa forma de navegar, pocas veces lo he visto así. Repito era una maravilla, el viento era constante de la misma direción y fuerza, navegabamos a unos doce nudos. !!! Eso era navegar ¡¡ haciendo gala de su gran destreza, brio, pericia y sobre todo de magestuosidad, no había quien nos cruzara la proa, y menos para darnos alcance.

Bueno en cuando a la tortilla de garbanzos, la introdujo el maestro Capilla. Teníamos la nevera estropeada, y claro, al final de las rutas, nos quedábamos sin víveres, las carnes había que tirarlas al agua por estar en muy mal estado, los demás alimentos teníamos que sacarlos a orear al castillo, o sea que estábamos escasos de alimentos para las comidas.
Entonces había que idear algo de comer distinto a las patatas, y no se ocurre otra cosa que hacer totilla de garbanzos,!! mira Ureña¡¡ los garbanzos ya en sí estaban tan duros como bolas de rodamientos de acero, así que cuando hicieron las tortillas, no había ser humano que las comiera. Se la empezó a llamar ""tortilla Pegaso"" es posible que si haces memoria, te recuerdes bien de ello.

Suponiendo que te tocara ese viaje, en que tanto escaseaban los alimentos, menos mal que hacíamos bocadillos de leche condensada, y comprabamos algún bocadillo de chorizo.
Bueno Ureña, espero que tengas memoria de eso que te pregunto, si es que te toco esos viajes.
Sin más por ahora recibe un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Jaume Matamala dijo...
En contestación a la visita de Arminio a Ferrol, tengo que decir que hay dos ciudades que puedes volver al cabo de 50 Años y están igual son: Roma y Ferrol.

Está el Cantón, Capitanía que creo que está en obras; el Barrio Viejo, tan viejo que casi está derruido; las instalaciones militares son las mismas, La Graña, las playas, Las Cafeterías donde estaban OSLO, TEVA y SIENA. Los churros con chocolate EL BONILLA, el Teatro JOFRE reformado;el puerto, esas grandes piedras en el suelo de las calles centrales.La plaza de Armas con su Ayuntamiento impresionante.
En la Plaza España donde estaba el Caballo del Generalísimo sigue la Cafetería AVENIDA donde te sirven churros hasta las tantas de la noche. Es una Ciudad muy Provinciana.
Ya ves Arminio, todo depende del color con qué se miren las cosas y las vivencias que hayamos tenido cada uno. Siento contradecirte en esta ocasión.
Gerardo Ureña dijo...
José Mª. Yo he visto muchas veces navegar al Galatea, con todas sus velas, pero mi memoria no me dice nada de la vela del tangón.
Si te diré que ciertamente lo escuché comentar, pero yo José Mª, creo que no lo presencié nunca.
Con todo el trapo al viento, este barco no dejó de ser un espectáculo, y doce nudos los alcanzabamos varias veces. Si, ya lo creo, eso lo recuerdo muy bien.

El viaje en el que se estropearon las cámaras, yo también lo viví, esto ya se comentó aqui en el blog. Como tú dices muy bien, la carne estaba negra, también el pescado, pero si de algo nos pudimos alegrar la vil canalla de proa, fue de los huevos fritos extras que nos dieron.
Seguramente pensarón,antes que tirarlos que los coman, y los comimos, ¡¡¡vaya si los comimos!!!.
Ni el más ilustre de los escritores, describiría también y con menos palabras, como tú lo haces, para decir lo duros que eran los garbanzos. Recuerdo un día que el segundo pasaba por la banda de babor, y con gran asombro observa y ve que las gavetas son volcadas en los ceniceros y arrojados al mar los garbanzos.

Don José Rey Pantin, que asi se llamaba el segundo, baja al sollado de popa, y en un rancho al que pertenecía un valenciano que llamabamos Lacomba, pregunta. ¿Qué pasa,?
¿Por que tiráis la comida al mar? ¿Es que no tenéis hambre?, a lo que Lacomba contesta.
"Mire mi segundo, hambre es lo que nos sobra, pero esto no hay quien se lo pueda comer". Coge un garbanzo, lo tira contra la mesa y rebota en el techo. Sube rápidamente el segundo a cubierta, se planta en la cocina y le pega una broca al maestro Capilla, que creo que aún le dura la diarrea. Al mismo tiempo le ordena freir patatas y huevos para que coman los marineros.

Si Capilla inventó la tortilla de garbanzos, seguro que yo la comería, más parece que se me resiste en la memoria.
Del que también me acuerdo es del maestro panadero, Antonio. Cuantos favores le debemos a la leche condensada, y cuanta hambre que nos quitó. Gracias leche condensada.
Tú recuerdas a los pinceles de Galatea, los más "peras", los más limpios y los más solitarios, pareciera que no tuvieran nada que ver con el resto de la tripulación. El cabo primera del pañol de banderas, siempre acompañado con un marinero, que daba la impresión de no ser de este mundo; estos dos que siempre andaban juntos y no se solían mezclar con casi nadie.
Solían llevar los sextantes a la derrota para los oficiales, y repito daba la impresión, que el resto éramos poca cosa para ellos, siempre impecables y dandys.

José Mª como no seas más serio organizando fiestas, conmigo no cuentes más. Resulta que yo me voy a la fiesta con dos sacos de costillas asadas y no acudió nadie. Tuve que donar las costillas a Cáritas. No es serio esto.

Me alegra en gran manera que te acuerdes de TAGÜIMA. Hay muchos recuerdos dormidos que todos tenemos, y que solo necesitamos una ligera pista para recuperar en nuestra memoria.
Hasta siempre a todos.
Castrillon dijo...
!!!Jajajajajajaaaaaaaaa¡¡¡ ¿a que hora fuieste a la fíesta???? jajajajajaaa¡¡¡¡ cuando nosotros llegamos, tú, ya te habías ido, así que, nosotros lo hemos pasado pipa, hemos consumido dos mil barriletes y unas riestras de chorizo,bueno !!hay que ser más puntuales Ureña¡¡.
Bien, ya veo que, no te tocó ver la vela sobre el tangón, pues has perdido una vellísima estampa, es cuando más vistoso y con todo su explendor navegó ese buque, nosotros nos sentíamos muy orgullosos en esos momentos de pertenecer a ese buque. Si a eso, le añades el lugar por donde navegábamos, era por los trópicos, con sus amanecidas y sus puestas de sol.
No hay palabras para describirlos, aunque parezca mentira, en esos momentos nos sentíamos felices, a pesar del hambre y sed, sobre todo sed, ya que el agua de la baca de cubierta estaba que parecía caldo de caliente que estaba.

Ureña, creo que te recordarás de la "belarmina" aquella tubería con agujeros en la banda de babor de la cubierta, también nos servía como ducha, muy bien para mantenernos un poco frescos.
Bueno Ureña, ahora mismo, tengo hambre, por lo tanto voy a comer, que es hora. Ya continuaremos urgando en nuestras mentes para sacar a orear los recuerdos, contando también con nuestro amigo MIGUEL, ya te he dicho que por correo tengo que hacerte unos comentarios, no tardaré.
Bueno, sin mas por ahora, ESPAÑA CAMPEONAAAAAA.
Miguel Gómez dijo...
A todos los tertulianos de este gran blog también dirigido, así como a todos aquellos que sigue estos comentarios, les deseo que las sendas de sus vidas sean como un camino de rosas. La mayoría de nosotros estamos ya un poco mayores, bueno mayores no, yo diría un tanto usados, pero aun tenemos fuerzas suficientes para llevar a cabo este velero a buen puerto, espero y deseo que así lo hagamos entre todos.

Haber Gerardo, lamento de que tus ingresos extras durante tu vida militar no fuesen muy cuantiosos, pero mientras que estuviste en el Galatea tampoco te eran muy necesarios, puesto que navegando no te hacía falta el dinero, al llegar a puerto extranjero, que eran la mayoría, ya te daban divisas para que en tierra lo pasaras lo mejor posible, no eran muy generosas pero bien administradas daban para lo más esencial, bien sabes que lo pasábamos de cine por aquellos puertos, donde en algunos no hacía falta ni dinero, lo que es más, para pasarlo bien no hacía falta ni salir a tierra, ya te servían los placeres carnales a bordo estuvieses o no de guardia no importaba.

Cuando rendíamos viaje en Ferrol, recuerda que nos pagaban los meridianos y puede que hasta los paralelos, que en aquella época era un dinero, seguidamente un mes de permiso, al regreso cobramos la paga y las raciones a plata de ese mes que no comíamos a bordo, todo esto pasaba en un abrir y cerrar de ojos, enseguida vuelta a la mar para hacer el siguiente ciclo, cuando ya salíamos de la escuela para cubrir nuestros destinos en los barcos de guerra la paga también era muy superior, que llegaba para bastante más, para tu tranquilidad tengo que decirte que en honor a la verdad yo no lo pase tan mal, ya que mi familia fue bastante generosa dentro de sus posibilidades.

Observo a Castrillon muy juerguista, quiere hacer una fiesta con los dineros de los demás , pues le tengo que decir que mi deuda ya fue pagada, se la envié por trasporte terrestre, lo que sucede es que al estar las carreteras Asturianas cortadas por la huelga de mineros puede que no hayan llegado todos los barriletes, pero la deuda esta más que saldada, tampoco estaría muy de acuerdo que mientras que él está de fiesta yo haga de serviola, las guardias ya me sobrepasan.

A Jaume Matamala, también tengo que decirle que en esta ocasión estoy más cerca de Arminio que dé él en cuanto a la visita a Ferrol, pues yo estuve después de 48 años y se me cayó el alma al suelo, ya que para mí está muy distante tirando a menos, del Ferrol que yo conocí al de hoy, puede que él al visitarlo más frecuentemente no note tanta diferencia.
De momento haré un punto y final por hoy, no sin antes desear lo habitual salud y armonía para todos, hasta pronto.
Arminio dijo...
Bueno, ya regresé de las vacaciones, pasé por Coruña y la he visto muy dinámica con el tranvía que rodea la ciudad, es una preciosidad.

En cuanto a Ferrol, hice fotos de los cines, de las calles, de Capitanía, del parque en el que se conservan las garitas y las anclas, que por cierto está el edificio en obras. No ha cambiado nada está todo casi igual como dice Jaume. también de la pensión donde solía acudir a comer y a dormir cuando regresaba despuñes de las vacaciones, antes de ir al Galatea, ahora es una farmacia.

Ferrol sigue casi igual pero ha desaparecido la gente, sus bulliciosas calles se encuentran desiertas, y el ir y venir de los militares ha desaparecido por complero. Claro, es así, ahora para el que que no conozca Ferrol, apenas se daría cuenta de que existe un arsenal militar.
La Armada ya no coloniza las calles, pero eso ocurre en todos los sitios, como en San Fernando, Cartagena, etc... Los lepantos y las gorras blancas de plato ya no caminan por las calles. Por eso al llegar depués de más de veinte años ya no me parecía la misma, pues estuve otra vez cuando el Galatea estaba desarbolado.
También estuve en la cafetería Galatea y los dueños me hablaron de Jaume, tenían su tarjeta y les dije que ya lo conocía, pero me facilitaron la direción de otros marinos para que me aportaran fotografías.
Bueno ya comentaré algo más, de momento un saludo a todos.
Jaume Matamala dijo…
Efectivamente Arminio; es así como explicas lo del gentío del Ferrol; pero también hay que apuntar que ya no se sale vestido de militar. Si te vas a los bares de tapas,las conversaciones son todas de Marina. En Ferrol, en estos meses todo el mundo se marcha a la ALDEA y Ferrol queda vacío. Los que han estado en Cartagena y Cádiz dicen que son Ciudades mas vivas; pero ya sabeis Ferrol ha sido siempre una Ciudad Terminal y seguramente la crisis ha hecho mas mella que en otras.
Arminio dijo...
Si, creo que las sensaciones son así, de todas formas casi todo permanece en su sitio. Lo que he visto muy mal cuidado son los jardines de Capitanía, pero la vista desde allí es la misma de siempre, He colgado algunas fotos en "Recuerdos del Buque Escuela Galatea". Un saludo a todos
miércoles, 04 julio, 2012
Miguel Gómez dijo...
Hola amigos, compañeros de reuniones en el castillo, de este nuestro viejo velero, estas tardes veraniegas, cuando ya el sol va en busca de sus ocaso, es una delicia sin igual tumbarse en el chinchorro del bauprés, y en el caso de que estuviese todo ocupado, que se da con mucha frecuencia, no importa también en las duras maderas de la cubierta se está de muerte, por lo que hay que disfrutarlo a tope.

Últimamente se están dando muchas novedades en prensa y TV, de nuestro añorado Galatea, al parecer está en primera plana que en realidad es donde siempre debió estar, he observado en un reportaje de TV. de los últimos días, algo que me ha llamado la atención negativamente, se trata de un coleccionista, según da a entender dicho video, que muestra un trozo de palo de madera que dice ser de la botavara del Galatea, me sorprendió por lo siguiente; como bien sabemos todos los mástiles así como las vergas, pico y crucetas eran metálicas, de plancha de acero curvada, por lo que no todo vale, puede que este señor lo ignore si por casualidad leyera este comentario creo que le servirá para salir de la duda, de todas formas admito rectificaciones, creo que no las habrá puesto que de no estar en lo cierto no lo comentaría, pero sí que me gustaría, algún comentario, puesto que todos conocimos la arboladura de nuestro velero.

Como ya comente al inicio de este escrito, estamos en la estación veraniega de este hemisferio, ya se nota en las actuaciones de los colaboradores, prefieren dormir la siesta y el refresco antes que ponerse a teclear, pues por otra parte es algo lógico, hablando de hemisferios quiero hacer un llamamiento a mi amigo CAI también Galateano, que reside en Australia, sé que es seguidor de este espacio si las condiciones se lo permiten que haga su entrada triunfal, en este blog que yo se que tiene ganas de hacerlo, y yo de verle por estos lares, cuando leas este comentario observaras que te tengo en mi mente, y envío un muy fuerte abrazo tanto para ti como para Clara.
Desde el castillo y saludando al tendido os deseo mucha felicidad que sea progresiva cada día, hasta otra.


jueves, 05 julio, 2012
Gerardo Ureña dijo...
Estaba finalizando el verano del año l954.
Mi tía Segunda, escribe como tenía por costumbre, a casa de su hermano (mi padre.)
Las cartas de mi tía Segunda, siempre fueron motivo de alegria. Yo conocí por vez primera a mi tía, en el verano de 1944, cuando nos trasladamos de Ferrol a Alicante. La quería mucho y aprendí a quererla sin haberla conocido; con ella me pasó lo mismo que con mi padre; los quise tanto, que nunca fui capaz de decírselo.

Craso error, que lleva doliéndome toda mi vida. En esta ocasión, mi tía nos enviaba junto con la carta, la convocatoria para marineros voluntarios, con las correspondientes especialidades. Es evidente que todo su contenido era para mí, yo era el protagonista. Y el protagonista se puso loco de contento.
Mi buen padre me alertó, que no había calculado bien el riesgo, pero yo, como si lloviera. Después de las recomendaciones, afines al tema, nos ponemos manos a la obra y comenzamos a preparar el papeleo, que como siempre resulta odioso. Papá me puso al día y me advirtió que este cambio de vida sería duro. Mi alegría era tal, que no estaba yo para escuchar sermones.
Como quiera que a los 13 años papá me sacó del colegio, para ayudar a la maltrecha economía doméstica. Sabía escribir a máquina ligeramente, bastante ligeramente. Fue por este motivo que mi padre me aconsejó la especialidad de amanuense, y así se hizo.
El día 30 de Diciembre de 1954 me presenté en el cuartel de instrucción de Ferrol. Después de darte un número y quitarte el nombre, te ordenan desnudar, solo te quedas con zapatos y calcetines. A gran escala y al por mayor, nos van cortando el pelo al cero. Este trabajo duró un suspiro. Te revisan, con la ayuda de un palito y una bombilla, la higiene de las partes púdicas.
Te largan un pedazo de jabón, una faena gris, una muda interior, el abisinio, una toalla y te mandan a las duchas. En las duchas te encuentras con cincuenta marineros y un sargento con ganas de jugar, cerrando y abriendo el agua caliente. A continuación, en mi caso, el cabo Prendes, nos lleva a recoger el coy, regresando a la brigada, donde tratamos de dormir. A dormir el que pudo hacerlo, no fue fácil. Esas estampas guardadas en la retina, desnudos y pelados, no se borran nunca, siempre las tienes presentes, te acompañan de por vida.

Pasada una semana, tenía decidido no quedarme en la Marina, a si que sin dilatar más el tema escribi a casa y lo manifeste, tal, cual. Pensaba que se alegrarían, que todos se pondrían muy contentos. Cuan equivocado estaba. No supe hacer una valoración, contando alguna mentira piadosa y la metí hasta el cuello, más tarde lo agradecí, pero antaño me llevé varios disgustos.
¿Que fue lo que pasó? Pues sencillamente, la palabra renuncio, en mi familia, no existía. No me di cuenta que mi abuelo paterno, fue teniente coronel de infantería, y uno de LOS ULTIMOS DE FILIPINAS. Poseedor de innumerables condecoraciones. Hoy en mi poder. Mi tío José Ureña Sellès, alferez de infanteria, muerto en batalla con un tiro en el corazón, segun dice la carta que Millán Astray le dirige a mi abuelo, hoy en mi poder. Que Gerado Ureña Sellés, sargento de infanteria marina, para más tarde, ascender a alferez, siendo el Nº 17 de su promoción, esta en posesión de la cruz de guerra entre otras. Mi padre y yo mantuvimos una lucha titanica, esta lucha duro mes y medio sigue...
Gerardo Ureña dijo...
.../ Mi padre me decía. "En la vida todas las profesiones tienen que ser vocacionales, pero unas más que otras, el sacerdocio, la medicina y el militar, tienen y deben ser vocacionales, sin ningun genero de dudas".
Mi padre me seguía diciendo. "Yo no te lo pinté facil, tú no quisiste escuchar, volver a Ferrol, ver a la familia, y luego, a casa que esto no me gusta." Papá seguia diciendome. "Si cuando termines los cuatro años, sigues pensando que no te gusta la Armada, yo seré el primero que lo entenderé, eres un Ureña, los Ureña no renuncian nunca."
A pesar de todo esto yo seguía queriendo renunciar. La última vez que mi padre y yo hablamos del tema, mi padre me decía. Tu madre dice que vengas, tus hermanos tambien, tú veras lo que haces". "Si renuncias, esta seguira siendo tu casa, y tendrás como todos un plato en la mesa, pero tú padre ya no sera el mismo.

En mi brigada había dos excelentes muchachos que eran de Ferrol, yo solía hablar mucho con ellos, tenían un nivel muy superior a la media, relacionarte con ellos no era fácil, en cambio a mi no me costó nada. Yo estaba leyendo la ultima carta de casa y ellos (no recuerdo sus nombres) me estaban observando, como me vieron triste, me preguntaron. ¿Algún problema.
"Ya he dicho que solía hablar con ellos, pero no les decía nada de la lucha que mantenía con mi padre. Ese día me abrí, creo que lo necesitaba, me hicierón mucho bien, pero le dieron la razón a mi padre. Fijaros ahora como se desbordan los acontecimientos, con lo que viene a continuación. Quedaban tres días para renunciar, cuatro días antes a que todo esto pasara, hablé con el comandante de mi brigada y le dije que yo quería renunciar. Después de hablar con los chicos de Ferrol, yo decido no renunciar.

Al día siguiente estábamos haciendo la instrucción en la explanada del cuartel. La cuarta brigada tenía para estos menesteres un brigada de infanteria de marina. En unos instantes se acerca a nuestro brigada, otro brigada al que yo no tenía visto, se pone a hablar con el nuestro y cuando terminan de conversar, nuestro brigada eleva el tono de voz y pregunta. ¿"Gerardo Ureña, está en la formación?. Desde mi llegada al cuartel era la primera vez que me llamaban por mi nombre, en el cuartel siempre fui el 3104.
Presente, dije yo."Sal de la formación y acompaña al brigada". Asi lo hice, estramos en el cuartel, nos dirigimos al segundo piso, a un despacho donde tras de la mesa había un capitan de infantería de marina. El brigada que me había sacado de la instrucción, se dirige al capitán y le dice. "Aqui tienes a Ureña", me manda sentar.

Me entero que es el capitan Calderón y que ambos son compañeros de armas de mi padre. El capitán me pregunta por mi progenitor y me dice. "Tú padre dejó aqui buenos amigos que le quieren, tambien hay gente que no le quiere tanto, que sepas que nosotros formamos parte de los que le apreciamos". "No sabíamos que estabas aqui, te vimos en las listas y de esa manera nos enteramos".

"Queremos que sepas, -continua el capitán- que cualquier cosa que podamos hacer por ti, solo tienes que decírnoslo. En ese momento se me encendio la luz y les dije."Me gustaria cambiar la especialidad". Les conté la que pedi de inicio, y seguidamente la que quería. ¿"Que especialidad quieres"? "Maniobras, dije yo,como si la cosa no tuviera importancia. continua...
Gerardo Ureña dijo...
/...¡¡¡El Galatea!!! dice Calderón "Efectivamente, respondo". El capitán me dice
¿Tú sabes que la vida más dura de la Armada esta en el Galatea" "No lo se , pero si otros lo hacen yo tambien lo haré".
La conversación, fue generosamente larga. Me dierón su palabra que lo harían. Les dije que si necesitaba algo más de ellos, que no tendría pereza y acudiria a su encuentro. Me dierón muchos saludos para papá y nos despedimos, no sin antes darles las gracias por mi parte. Jamás les volvi a ver y nunca les molesté. Cuando este encuentro se produjo, estaríamos a cuarenta días de finalizar el priodo de instrucción. Yo notaba que los exámenes parciales, eran diferentes, pero no más. Es por este motivo que ya conté en este blog, cuando el cabo Prendes cita mi nombre y destino el Galatea, me dije a mi mismo, misión cumplida.

Ahora le podria demostrar a papá que no era un cobarde. Había elegido la especialidad más dura de la Armada. Papá podria sentirse feliz con su primogénico.
Escribí a casa, para comentar a mi padre, que unos compañeros suyos se acercaron a mi, interesándose por él, pero no dije nada más.
El resto del paquete viajaba de incógnito. Ya dejé dicho en este blog, como el 12 de Marzo de 1955, el cabo Prendes cantó mi nombre y mi destino. El Galatea salía de viaje el día 15 de Marzo, el día 14 escribí a casa y les decía donde estaba y los puertos que tocaríamos, Valencia era uno de ellos. La primera carta que yo recibi de csa, fue en Pernambuco, esa carta que perdí con las fotografías y todo el correo de los cuatro años de permanencia en la Armada, la leí infinidad de veces, en y después de la Marina.

Tantas veces como leyera, tantas veces como me emocionaba. Entre otras cosas, mi padre me decia. "La noticia del Galatea, nos ha dejado noqueados, no la esperábamos"." La tía Segunda estaba preocupadísima y preguntaba que se podía hacer para desembarcarte" "Tú madre tambien se ha alterado". "Los que mejor lo pasan son tus hermanos, que en su ingenuidad piensan que les vas a traer un mono de Brasil". "Yo les he tranquilizado a todos, les he dicho, que si es esta tú decisión, debemos respetarla". "Como padre te digo que me siento muy orgulloso de ti". La carta era muy extensa, toda ella muy emotiva, me sente en el castillo dispuesto a leerla. La lei una vez, dos, tres, perdí la cuenta.

Cuando me dieron el destino, dije, misión cumplida. Es en el momento que recibo el beneplácito de mi padre, cuando dije de verdad
¡¡¡MISION CUMPLIDA!!!
A todos mis compañeros de hoy, de antes y de mañana, ahora me conocéis un poco más, no me duelen prendas, también tuve mis miedos, los superé, me costó lo mío. Supe estar, estuve y no me arrepiento de nada.
QUE DIOS OS BENDIGA A TODOS.
Arminio dijo...
Buenas tardes a todos, espero que el día sea bueno y fructífero para los lectores y para los excelentes narradores que cada día son más y mejores.

Gerardo, me he quedado boquiabierto leyendo tu historia, contada con palabras sencillas pero exactas y llenas de significado. Según leía me parecía estar Leyendo " La busca " de Pío Baroja, las palabras son atinadas y dicen muchas cosas, con un vocabulario perfecto, salido de un narrador de tu talla ,que no tiene que envidiar a esos importamtes clásicos, y lo digo de verdad.

Creo que además de haber elegido la especialidad más dura de la Armada, no debiste olvidar la de amanuense, pues con la práctica se aprende y eso tú lo sabes. Enhorabuena por tu excelente pluma, este blog está agradecido de tener tan buena dotación en los quehaceres de la mar y de la literatura.
Bueno espero que vaya todo mejor, y el temporal de estos días con las publicaciones va pasando, como esas tormentas inesperadas pero violentas que sorprendían al Galatea por los mares de Guinea.
Un saludo a todos y gracias Ureña.
Bitácora dijo...
Ah se me olvidaba y lo quiero participar a todos.
Nuestro Blog "Buque Escuela de Maniobra Galatea", el primero que ha conseguido que el Galatea navegue de nuevo y por lo tanto el pionero en el rescate del Galatea de su olvido, se presenta a los premios con motivo del día del Carmen de la Armada en la disciplina de blogs. Espero que los dirigentes de la Armada se fijen en él y aunque no gane el primer premio tenga al menos alguna distinción, al ser el Galatea el buque que muchos marinos llevan en sus corazones.
Ya ha habido un primer contacto al tener el honor de ser elegirlo para el reportaje de T.V.E en Galicia, sobre la noticia de la aparición de esas imágentes de una película de casi cien años, en la que aparecía el Galatea.
Saludos de nuevo.
Gerardo Ureña dijo...
Asi es Miguel, la botavara siempre fue metálica, seguramente a este Sr. le engañarían.
Miguel, no tienes que lamentar mi excasez de ingresos en aquellos tiempos, tú no tienes la culpa de la precariedad de mi familia. No me quejo de nada, solo lo comento. Ya dije en su día en este blog, que en el Galatea casi siempre estábamos cobrando. La asignacón mensual, las raciones a plata, meridianos, estancia en islas, aguas extranjeras y no se cuantas cosas más.

Yo cobraba más en el Galatea, que de cabo en la Armada.
Miguel, la próxima vez que le tengas que enviar algo a José Mª, mándaselo por Seur, dicen que es más caro, pero llega más tarde. Como podrás ver todo son ventajas.
Si José Mª. Claro que me acuerdo de la "belarmina", y también me acuerdo de las "gorritas" negras que se hacian frotando el jabón de glicerina con agua salada.
Me alegra saber que la fiesta fue un éxito, me alegro por ti, pues me habia dicho un pajarito, que andabas muy preocupado de que todo saliera bien.

Arminio, gracias por tú incienso. Creo conocerme bien y soy consciente de mis limitaciones. Los piropos siempre gustan, en este caso son muy generosos. Dan mucha moral y para mi tienen más valor que el dinero.
Una y mil veces gracias. Posiblemente no te falte razón en lo de amanuense. En una larga etapa de su vida, mi padre se dedicó a lo laboral, yo le ayudaba, hacia recados, presentaba las demandas y recursos en magistratura, y me gustaba leerlas antes de presentarlas. Me dio que pensar. Arminio hasta a un jorobado le gusta que le llamen "guapo"¡¡¡GRACIAS AMIGO!!!
Miguel Gómez dijo...
Me es muy gratificante el volver a conectar con estos lobos de mar, que en su día pasaron por las jarcias y cubiertas de nuestro Galatea, el buque que a pesar de los años sigue reuniendo en su castillo, aquellas tertulias de unos jovenzuelos, que por aquellas fechas iniciaban sus vidas en la mar.
Sin duda alguna que su paso por este buque les marcó, ellos dejaron su huella imborrable entre sus mamparos, ahora ya en la madurez de la vida, sus mentes retroceden en busca de sus primeros pasos, por aquella senda tan estrecha y empinada, a veces llena de obstáculos que todos fueron superados con éxito, hoy volvemos a estar juntos en el castillo y lo celebramos como chiquillos.

Haber Gerardo, nos has dado una lección magistral con tus excelentes comentarios, no cabe la menor duda de que me sumo a todo lo expuesto por Arminio, valorando tu narrativa y muchas más cosas positivas que posees, yo ya no tengo calificativos o puede que no sepa valorar tanta belleza literaria.

En lo que a mí se refiere me has dejado patidifuso, como debes de comprender ahora estamos ansiosos por volver a leer muchos más comentarios, de esa y otra índole, como puedes ver somos insaciables, yo me siento super satisfecho de estar rodeado de excelentes compañeros con tanta habilidad en este y otros muchos temas, en pocas palabras que somos pocos pero abundan los poetas y los artistas literarios.
Castrillon al parecer se ha sumado a Fernando Laguna y se han tomado unas largas vacaciones, no digo que no se las merezcan, pero bien saben que la dotación no es muy amplia, y el trabajo debe ser repartido equitativamente, pues yo mañana día nueve me marcho para otros lares de la península, pero estaré al pie del cañón siempre que sea necesario.

Por cierto que tengo previsto reencontrarme con dos antiguos compañeros del Galatea, que ya hace más de cincuenta años que nos separemos.
Gracias a este buque que navega de nuevo de la mano de Arminio nos hemos vuelto a encontrar, como es lógico lo celebraremos y vosotros aunque en la lejanía estaréis presentes.
Puede que me quede algo en el tintero, pero ahora no lo recuerdo por lo que voy a dar por finalizado este mini comentario, deseando como es habitual lo mejor para todos los cooperantes de este blog, agradecer sumamente la compañía de todas aquellas personas que se toman la molestia de seguirnos, siempre a vuestra disposición. Saludos Paz y Bien.
Castrillon dijo...
Hola a todos, solamente es para deciros que a partir de hoy mismo y, temporalmente dejo internet, cojo mis vacaciones por un tiempo, ya volvere.
Mi deseo es que, continueis muy bien.
Ya volveré.Que Dios os bendiga a todosssssss.
Cabo Tanger dijo...
Ya,ya embarqué en nuestro Galatea virtual, primero GRACIAS A LOS AUTORES DE ESTA PAGINA, ya me conoceis del Facebook y otros como Carretero y Murcia nos hemos vuelto a encontrar gracias a Matamala.
Nos hablamos Carretero y Murcia por teléfono y espero reencontarnos este Agosto en Murcia y el que escribe,algunas veces mal por que la dislexia ya no me la curo.
Mi apodo del Galatea durante 4 viajes es Tánger y en 2 viajes Cabo Tánger,ya estuve en Glasgow con mi mujer viendo nuestro Galatea-Glenlee y espero volver con mis compañeros nuevos y viejos y espero encontrar compañeros de los dos últimos viajes.
Tengo anécdotas que contar pero es que algunas cuando las cuente son difíciles de creer, pero me ocurrieron a mi y si por aquí encuentro al corneta de Infanteria de Marina Fuertes, le pedire perdón de la "putada" que el hice con la Negrita.

Le fastidié el rollo y se repartieron "ostias" ella él,gamberradas de la juventud.
Fué en el viaje de la Martinica en La Martinica, la broma es del viaje donde los Jeeps de la policia militar acompañados por una patrulla del Galatea traía a nuestros compañeros con una MERLUZA de palangre y derechos al castillo a dormir la mona hasta que la manguera baldeando los despiertó.
Hasta otra compañeros ceo que ya he conseguido entrar para escribir aqui y si no lo intentaré otra vez como no se poner mi nombre aqui SOY TANGER
Arminio dijo...
Muy bien cabo Tanger, te agradedecemos tu comentario y ya sabes que estamos aquí para escucharte y sorprendernos con tus narraciones.
Para poner el nombre tienes que picar en Comentar como y luego te sale un desplegable donde hay varias opciones, picas donde dice NOMBRE/ URL, pones tu nombre y ya está. Por ser el primer comentario tuyo te lo he corregido y he puesto tu nombre. Un saludo muy fuerte del todos los componentes de este blog.
Tánger dijo...
Gracias compañero, me voy acordando de anécdotas y ójala también como fuertes(el cornet) pueda estar por aquí.
Esta anécdota es sobre Mazaricos (apodo del pueblo de donde era,era marinero de dotación, lo que sigue no se tome como decalificación, pues era muy buen persona y muy "gallego",en el buen sentido de la palabra. Cada dos por tres estaba en la enfermeria diciendo "me duele el peito" con lo que conseguía algun día de baja y librarse de alguna guardia.
Tantas veces iba que el Cabo Sanitari,ójala lo encontrara por aqui, compañero y amigo de jaranas en tierra, y gallego también, me dice a Mazaricos: lo voy a curar y si que lo curó, cuando volvió a la enfermeria, me llamó(y lo presencié).

Mazaricos diciendo ,"me duele el peito" que lástima de no acordarme del nombre o apodo del Cabo pero si lee por casualidad esto, pues estuvimos de juerga con dos maduras en SAVANNAH. Bueno sigo con Mazaricos,le dice el sanitario Mazaricos levante la marinera, Mazaricos se la levantó dejando ver un pecho velludo qe parecia un mono.
El sanitario corto unos 10 o 12 cms. de esparadrapo ancho y se lo puso en el pecho y le dijo dentro de un día vienes y le dió la baja, al otro día volvió, yo delante también, el compañero sanitario le quitó de golpe el esparadrapo CON UN GRITO DE MAZARICOS que se curó, digo que se curó, pues eso fué en el penúltimo viaje del Galatea,pero Mazaricos era o es único, parecía un mono pero en Liverpool las chicas las ligaba el tio mejor dicho lo ligaban a él.

Sería por lo llano que es o era, pero en Liverpool me decía, Cabo Tánger " hay que ver estos nenos tan pequeñito saven falar inglés y yo non se falar ni español.

GRAN MAZARICOS Y Arminio gracias por corregirme mi escritura te prometo que no te faltará trabajo, tengo anécdotas unas sin X y otras xx. La próxima contaré como nos librabamos cuando era ayudante especialista de alguan guardia de media hasta que nos cogieron y toda la Brigada enganchamos con un baldeo, y menos mal que no era "baldeo detenido con polvos de gas y arena.
Un abrazo para todos y avante toda.
Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, tertulianos y demás visitantes, espero que las calores sean soportables, sobre todo a los que residen en zonas templadas extremas, son días para disfrutar por el norte de la península, donde estarán con una muy agradable temperatura, pero sin duda alguna que todo pasará y nos volveremos a quejar del frio.
Quisiera agradecer a Tánger su entrada triunfal, en estas navegaciones virtuales pienso que no habrá que decirle que se acomode, puesto que creo que su estancia en este blog será prolongada en el tiempo. Tengo que aclarar que su nombre de pila es Manuel, pero ya hemos hablado telefónicamente de que entre nosotros nos llamaremos por el nombre de guerra, el Tánger yo Murcia, este trato no está reservado sólo para nosotros, cualquier tertuliano que lo desee lo puede aplicar con toda tranquilidad.

Aunque ya te dio la bienvenida el compañero Arminio, que estaba de serviola cuando tu cruzaste el portalón, yo también quiero sumarme a esas palabras y darte las gracias, aunque dentro de muy poco estoy seguro que nos daremos un fuerte abrazo, junto a nuestro gran amigo Carretero, en estas calenturientas tierras de la comunidad de Murciana.
Se nota en el blog que ha entrado savia nueva, traes mucho empuje con tus vivencias en aquel viejo velero llamado Galatea, pues sigue vertiendo todas y cada una de tus anécdotas, que nosotros estamos sedientos de esa agua fresca que brota de eses tu manantial, adelante compañero el camino esta despejado.

Por lo que he leído parece que tienes algunas cuentas pendientes con el corneta Fuertes, por aquí por Barcelona andaba el otro corneta o tambor, que se llamaba Arturo, estaba trabajando de camarero en una gran cervecería, cuando pasábamos por sus dominios y hacíamos consumición a la hora de pagar, si le dabas un billete de cien pesetas nos traía el cambio de quinientas, hasta que dejamos de visitarle por precaución para que conservara su empleo.
De esto hace ya muchos años, todavía éramos solteros, y le perdimos la vista, mis compañeros eran, uno el flecha que también jugaba junto a ti a "lo tomas o lo dejas", en el carrusel sobre las olas, el otro era Pedro García, pero se hacía llamar Pepe Blanco que también cantaba en dicho carrusel, seguro que los recuerdas, ambos han fallecido no hace mucho.Yo estoy disfrutando de estos días calurosos, pero de vez en cuando le echo un vistazo a este espacio, para enterarme de la buena nueva.
Esperando que la mar este en calma, que la navegación sea un placer por el bien de todos los tripulantes, ya que no es tiempo de tempestades, de momento lo dejaremos aquí, como de costumbre mis más sinceros saludos, para todo aquel que se acerque a estas líneas, hasta pronto.
Antonio Fernández dijo...
Hola soy Antonio Fernández Martínez, del 3º del 57, conocido como "el quillo".
Como anécdota recuerdo en mi primer viaje, como haciendo los 9 meses de prácticas entré como repostero de suboficiales y en uno de aquellos días me tocó servirle el desayuno a Don Antolín.

Como era la hora del desayuno y Don Antolín se retrasaba me comí su desayuno creyendo que ya no venía, con tan mala suerte que terminando de comérmelo apareció D. Antolín a lo cual me presenté a él diciéndole lo ocurrido. Me lanzó una patada en el culo, sin llegar a darme por que salí corriendo escaleras arriba y Don Antolín quedó riéndose, no hubo castigo.
Recuerdo a un compañero de Cádiz que le decían el Golfo de Cádiz, por lo pillo que era. Nos gustaría participar, a mi esposa y a mi, del acontecimiento que estais planeando y acudir a Glasgow el año que viene.
Miguel Gómez dijo...
Hola magníficos compañeros, navegantes y seguidores de este espacio, que tengan un esplendido día, en todas sus extensiones, gracias por estar ahí incondicionalmente.

En primer lugar quisiera referirme a Antonio Fernández, celebrar la firme decisión que ha tenido dando un paso hacia adelante, y entrar en estas navegaciones virtuales donde aunque solo sea mentalmente el Galatea navega de nuevo, bueno yo soy del 3º. del 56, al estar ingresado en la enfermería cuando era ayudante me hicieron repetir el curso, por lo que navegamos juntos como mínimo un año, yo hice los viajes de instrucción de Guinea, Dakar, Martinica y Pernambuco, supongo que tu estarías hasta el final de las navegaciones, de nuestro viejo velero, más o menos por ahí debe andar la cosa.

Conocía muy bien a D. Antolín y posiblemente a todos los suboficiales, oficiales y los de la maestranza, que estarían cuando tu caminabas por aquellas maderas de la cubierta y gateabas por las jarcias de sus mástiles, aquellos momentos que a veces eran muy duros con el tiempo se han convertido en gratos recuerdos, me olvidaba de decirte que mi nombre de guerra era Murcia debido a mi procedencia, si haces un poco de memoria puede que hasta me recuerdes, a mi tu nombre de momento no me suena, lo de quillo me suena mucho mas, pero creo que había más de un quillo por aquella época en el Galatea, de seguir con nosotros seguro que el tiempo se encargara de recordar muchas más cosas,

También me alegra que hayas tomado la decisión de viajar con nosotros, el próximo año a Glasgow si las cosas salen como están previstas, para esto ya debe estar trabajando el equipo organizador, para incluirte en la lista de viajeros, seguro que nos lo pasaremos fantásticamente, nos reencontraremos un montón de buenos amigos, porque como bien sabes los amigos hechos en aquel precioso velero jamás se olvidan, son amigos para siempre aunque las circunstancias de la vida los tenga muy separados.
Te damos la bienvenida, esperando que te encuentres cómodo entre nosotros, y que tu estancia en este blog sea prolongada, nos comentes tus vivencias a bordo del Galatea así como muchas anécdotas, que tienes almacenadas en tu mente y que debes de estar deseoso exponerlas, ya sabes que te hallas entre amigos, como en aquellos tiempos.
Deseando lo mejor para todos, mis más emotivos saludos, hasta otra oportunidad, que Dios os bendiga.
Arminio dijo...
Hola Miguel, te repito el comentario tuyo en la página "Viaje a Glasgow", pues es allí donde ha escrito.De todas formas le dije en ese lugar que se pasara por aquí, y que le duplicaba el suyo en este apartado, que es la entrada principal.
Por si acaso lo hago, si te parece bien.
Miguel Gómez dijo...
No problemas, como siempre tu trabajo es impecable y tus decisiones equilibradas.
Saludos.
Castrillon dijo...
Hola a todos y, muy espacial a todos aquellos que estuvieron y que están en la Armada, en la mercante, pesca y de recreo, a TODOS VOSOTROS QUE TENGAIS UN MUY BUEN DIA Y QUE DISFRUTEIS DE ESTE DIA TAN SIGNAFICATIVO PARA VOSOTROS, !!VIRGEN DEL CARMEN ¡¡.

Nosotros, los que ya estamos retirados de la Armada, y que nos sentimos muy orgullosos de pasar nuestra vida en ella, solamente tenemos muy buenos recuerdos que permanencen dentro de nuestro ser y que jamás olvidamos, lo mismo que,aquellos compañeros inseparables que teníamos.
A todos!!!!! UN MUY FUERTE ABRAZO Y UN FELIZ DIA ¡¡¡¡¡¡¡¡
Arminio, Miguel, Ureña, Laguna, y todos los de este blog, tomar una,cerveza y brindemos por todos. Que Dios os bendiga a todosssssssss.
F. Laguna dijo...
Me uno en el brindis por nuestra patrona al amigo y compañero CASTRILLON y a todos los miembros de esta gran familia que es NUESTRA ARMADA.
Miguel Gómez dijo...
Aunque hoy estoy muy triste, debido a una noticia recibida este mismo día, ya lo comentare más adelante, ya que ahora soy incapaz de coordinar unas cuantas letras, a pesar de eso me sumo a esta celebración, VA POR NUESTRA PATRONA NUESTRA. SEÑORA VIRGEN DEL CARMEN ¡¡¡ LA GALEONA DE LOS MARES !!!!. Gracias Fernando por haberte asomado al portillo, como quiera que sea, has mitigado un poco mi tristeza.
Saludos para todos en este día un tanto especial, con sabor agridulce para mí.
Gerardo Ureña dijo...
Desde mi inicio en La Armada, siempre fue mi Patrona la VIRGEN DEL CARMEN, y siempre lo sera mientras viva. Hoy quiero dedicaros estas cuatro letras, a todos vosotros, por que vosotros en estos momentos de avanzada edad, ocupáis el pan y la sal de mi vida.

A jOSE Mª, a ARMINIO, a MIGUEL, a LAGUNA Y a MANUEL ORTIZ.
Sin olvidar a JUME MATAMALA, que tambien forma parte de esta familia. A todos les deseo lo mejor y les doy las gracias por estar al pie del cañón todos los días, manteniendo este blog lleno de vida. Hoy es el día de nuestra PATRONA LA VIRGEN DEL CARMEN, Y DEBE SER UNA FECHA FELIZ.
Espero y deseo, que lo de MIGUEL, no sea nada. A todos una vez más mis BENDICIONES y hasta siempre.
Castrillon dijo...
!!! Eheheheheeeeeeeeee¡¡¡¡¡¡ Laguna no te marches tan rápidamnete, ni tú Gerardo, no os marchéis sin antes estar de tertulia con nosotros un poco, ya que somos los últimos de Filipinas, porque queramos, o no queramos, todos fuimos comapañeros en aquellos lejanos tiempos, en los que nuestros descalzos y endurecidos pies y brazos se dedicaban, días y noches, a trabajar con toda la arboladura de aquella galera llamada Galatea.
Sí, en cuanto llegabamos a puerto, ya teníamos todo preparado para ese festivo día, el engalanado General, el rancho extraordinario, levantamientos de arrestos, y muy amables los contramaestres con nosotros.En ese día eramos felices.

Luego los permisos, y en el mes de septiembre otra vez a empezar de nuevo otros meses navegando, con todo lo que ello suponia, de maniobras generales, arriado y aferrado de los aparejos, largando de nuevo las velas, en fin lo propio de una navegación sólamente a vela.
Muy lejanos quedan aquellos tiempos, por eso es bueno que los recordemos juntos todos. Bueno amigos y compañeros, y tu ARMINIO, te estamos esperando.
Un muy fuerte abrazo a todos vosotros, amigos y compañeros.
F. Laguna dijo...
Miguel, no sabes cuanto lo siento que este día tan memorable sea de tristeza para tí; por lo menos que sepas que estás arropado por nosotros los galateanos y estamos contigo para lo que haga falta. Un fuerte abrazo.
Arminio dijo...
Saludos a todos y me uno a vosotros en el día de la Virgen del Carmen, del que aún me quedan buenos recuerdos, con el engalanado, la diana floreada, el desayuno especial, y la comida con café copa y puro.
Me alegra que estéis todos en cubierta, y que Fernando esté de nuevo, ya que le echábamos de menos. Gracias a todos, por vuestros comentarios y a Gerardo Ureña le pido su correo y teléfono para apuntarlos en la lista del viaje a Glasgow.
También le doy ánimos a Miguel y a continuación escribo unas letras.
Un abrazo.
LA DOTACION DEL BLOG Y COMPAÑEROS dijo...
Lamentamos mucho que ya no esté entre nosotros aquel mozalbete que acompañaba con su presencia los momento más duros en el Galatea y los momentos de alegría que también fueron muchos.
Desde este espacio te dedicamos estas letra y te llevamos en nuestro corazón.

Este temporal a destiempo,
estas velas blancas en las niñas de tus ojos,
esta pequeña historia de amor que
se cierra como un abanico que abierto mostraba a la bella alucinada Galatea .

Se fué así tu vida,
la más desnuda ente el bosque de olas
sol, viento, luna y estrellas.
La más arropada entre marinos,
amigos y compañeros del Galatea.

Gracias por haber sido compañero de mis compañeros,
por haber hecho reir a aquellos valientes muchachos, entre los que te encontrabas y compartías, tus risas, tus temores, tus incertidumbres y tus certezas de aquella vida
en la mar.

Para Oscar Guerra Sánchez "el canario".
Miguel Gómez dijo...
Me es muy grato el regreso a este espacio, donde encuentro cobijo y apoyo de todos los compañeros y amigos, lamento el haber dado una nota de tristeza, pero la verdad es que no lo pude evitar, como ya debéis saber ha fallecido un magnifico compañero, que para mí era como uno más de mi familia, era una gran persona e incondicional amigo, era como vosotros solo que él estaba un poco antes, fuimos inseparables a bordo del Galatea y en todos los puertos que tocábamos, era ese amigo que se necesita muchas veces cuando se está a muchas millas de la familia, nunca perdimos el contacto, habiéndonos visitado con alguna frecuencia, pero como en esta vida todo tiene un fin ese ya llego, que Dios lo tenga en el lugar que merecía, y gracias a todos por vuestra compresión.

Tenéis que perdonarme pero tengo que seguir hablando de él, este es mi pequeño homenaje , ya que mis recuerdos marchan detrás de aquella gran amistad, recuerdo la técnica que teníamos para cubrir aquellas guardias de media, en las frías noches del Atlántico Norte, como bien sabéis sobre todo los que habéis navegado en aquel viejo velero, que la guardia entrante formaba en cubierta a babor, la formación era de tres, pues la técnica era que había que estar en el centro de la formación, ya que el cabo primera aspirante a Contramaestre, encargado de distribuir la guardia, siempre empezaban por una de las dos puntas de la formación, es decir los diez primeros de la formación o los diez últimos cubrían los puestos de guardia, por lo que los del centro se salvaban de esa guardia, en su defecto los primeros que son los que iban a la caña y siempre había algún castigado para relevarte, había que estudiar todas las triquiñuelas para zafarse de las guardias.
Quiero agradecer a Arminio, y a todos los componentes de este blog, la elegancia con que han tratado esta ausencia, la verdad que me he sentido arropado en este espacio, como bien a expresado Fernando Laguna, una vez más gracias.

Por si alguien no lo sabe, este blog ya está en Wikipedía, gracias al esfuerzo y tesón de Arminio, estamos donde debíamos de estar, es cierto que todos hemos aportado buenamente lo que hemos podido, pero no es menos cierto que el rumbo marcado por el jefe de derrota es imprescindible, y más si esa trayectoria es la más adecuada, yo seguiré de guardia en la giroscópica manteniendo este rumbo certero.
De momento, como de costumbre desear todo lo mejor para todos, sin excepción alguna, saludos para los seguidores, de esta estela que el Galatea va dejando en su surcar diario, por estos mares de Dios. Hasta luego Paz y Bien.
Miguel Gómez dijo...
Hola amigos correligionarios.
Solo hay dos días en el año que no se puede hacer nada, uno se llama ayer y el otro mañana, por lo tanto hoy es el día ideal para hacer cosas, recordar, escribir, en definitiva hacer algo por uno mismo y por los demás, haciendo estas cosas seguro que alguien lo agradecerá, despojemos nuestras perezas y pongámonos mano a la obra, dando un empujoncito a este nuestro espacio, que son muchas las personas que nos siguen y debemos mantenerlas saciadas de nuestros comentarios, animo.
En estos días abrasadores de este verano que estamos soportando, me viene a la mente nuestras navegaciones en los trópicos. En nuestro viejo velero, era un sábado tarde noche cuando se celebraba el festival del "Carrusel sobre las olas", creo que era al regreso de Martinica, donde los que habían comprado algo importante, mostraban públicamente su compra.

Un oficial había comprado una canoa de plástico hinchable, era toda una novedad para nosotros por aquellos años, ya que el plástico aún no estaba tan extendido como ahora, y puede que fuese la primera embarcación hinchable que veíamos muchos de nosotros. El repostero de dicho oficial se dispuso a inflarla, y después de estar llena se produce un pequeño silbido, era la canoa que se había estropeado por defecto de fabricación, este oficial quedó un tanto contrariado ya que su hijo estaba a punto de perder el juguete.
Creo recordar que un suboficial de electricidad la pudo recuperar, por lo que este oficial quedo satisfecho y agradecido.
Siguiendo con el calor por aquellos días antes comentados, el sol era implacable llegando a tal punto que andar por cubierta, parecía estar andando por encima de las hogueras de S. Juan, que quemaban como diablos, con el agravante de que la brea del calafateado se fundía y se pegaba en las plantas de los pies.
Había que correr bajo el castillo para poder quitarla antes de que las quemaduras fuesen a más, por lo que no se podía andar, había que correr para no sufrir quemaduras en los pies.

El personal de los puestos de guardia de cubierta tenían que estar constantemente moviéndose, a los de la caña había que refrescarlos con agua de mar, en algunas ocasiones se desplegaban los toldos para tal efecto, eran muy duros los dos extremos, bien se podía haber llamado Extremadura.
Cuando había que subir a los palos para hacer cualquier tipo de maniobra, era temeroso ya que tanto las vergas como los verduguillos para sujetarse eran metálicos, si a eso le añadimos que había que subir solo con el pantalón de deporte, con el vientre descubierto que era el único punto de apoyo que te unía al barco, pues no dejaba de ser muy duro, como ya comenté en otra ocasión dirigiéndome a Castrillon.

¡¡Que caros pagamos los galones de cabo segunda especialista en maniobra!!, ahora veo a la dotación de Elcano subidos en las jarcias con zapatillas, y cinturones de seguridad, lo cierto es que me hace daño a la vista, y pienso que es una barbaridad, ya sé que los tiempos han cambiado, pero no es menos cierto que el mar sigue igual.
Con mis mejores deseos de felicidad para todos, un cordial saludo desde estas calurosas tierras hasta pronto. Paz y Bien
Arminio dijo...
Buena historia Miguel, es interesante pues siempre hay algo que contar y seguro que el resto de la tripulación andaba tranquilamente con sus zapatos, ya que ellos bajo ningún motivo subían por la jarcia. Para eso estábais vosotros.
Y a colación me viene una pregunta, quienes andaban descalzos y hasta que graduación había que llegar para dejar de estar descalzo durante toda la travesía.
Los cabos segundos que aspiraban a primeros, iban ya calzados o sólo los cabos primeros aspirantes a contramaestres.

Bueno espero que os acordéis que en el mes de octubre pasado y principios de noviembre, nos parecía mal que al buscar el blog en internet, ni aparecía y decía yo que había que tener paciencia.
Pues ahora naga más poner Galatea, ya aparece el blog en cualquier buscador y encima con caso 25.000 visitas, que se dicen pronto. Un saludo a todos y a ver si comentáis algo sobre los lugares, sollados arboladura, etc...del Galatea, que ese apartado está un poco abandonado.
Castrillon dijo...
Hola a todos, compañeros y amigos, cuanto me alegro de ver, que a pesar de las vacaciones y estos rigores del sol estáis al pie de la jarcia. Ahora estoy con un ordenador, muy deficiente, de un momento para otro se anula todo, pero intentar époner una pregunta que hace Arminio. Mira, a bordo, navegando, excepto de los suboficiales para arriba, todos íbamos descalzos, a son de mar, como era normal, y aligerados de atuendos y ropas, ya que nos impedian andar ligeros por toda la arboladura y demás trabajos por el buque.

Solamente en puerto, nos permitíamos el lujo de ponernos alguna prenda más.
Así, que los cabos que estaban haciendo el curso para contramestres también estaban sujetos a estas normas, o, sea de contramaestre para abajo todosssss.
Bueno ya veo, que quieres recuperar los lugares del donde se solía hacer vida relajada, jajajajajajajaaaa, ¿ echas de menos el bauprés, ? y ¿el chinchorro de donde pasabas tus horas para intentar seducir a aquella bella dama? jajajajajaaaa.

Bueno Miguel y demás voy dejarlo poque me parece que ya le esta llegando la hora a este trasto, aunque tengo bastante que hablar, pero por si acaso lo dejaré aquí.
Estoy en Madrid secándome de calor, echo de menos el fresco de Asturias.
!!!!!!!!!Ureña donde estásssssssss¡¡¡¡¡¡¡¡ Recibir todos un muy fuertee abrazooooooooo.
F. LAGUNA dijo...
Queridos galateanos, he terminado de leer hace unas horas el libro de nuestro compañero Pablo DELGADO GUERRA " EL EMIGRANTE- Camino sin retorno" y la verdad es que es una gozada y os lo recomiendo, pues en el se ve a un auténtico galateano, fuerte, de carácter,trabajador incansable, sencillo,generoso, amigo de sus amigos, noble, etc..etc...

Entre otras cosas narra sus viajes con nuestro querido Galatea y sus aventuras por medio mundo y el temporal del viaje a Nueva York, todo ello acompañado por fotos inéditas realizadas en esos años 51 al 55 y de verdad que para un galateano es un lujo tener este libro.
Por si acaso lo quereis tener; su teléfono es el 97-2822405; os pasareis un buen rato en el castillo. Un abrazo a todos esperando esté pronto a la venta "Galatea "un guiño al pasado".
Arminio dijo...
Hola, a todos, parece que ya aparece la tripulación de sus vacaciones, pero de todas formas difrutar, que bien os lo merecéis.
Sobre el libro, he estado con los responsables de la editorial en Madrid y hemos quedado para el mes de Agosto, a fin de elegir fotos, y portada del libro o los libros, eso depende de ellos.
Quieren que esté a la venta para Navidades. Ya os mantendré informados.
Un saludo para todos, ya que gracias a este medio, llegan los saludos a cada rincón del lugar donde estéis.
Castrillon dijo...
!!!!!! Holaaaaaaaaa Arminioooooooo¡¡¡¡¡¡ ya estábamos un poco preocupados por tu ausencia, pero, bueno has salido a la supierficie a tiempo, nos alegramos mucho.

Yo, todavia estoy en estos tórridos lugares madrileños, no aguanto tanto calor, ya tengo ganas de ir para mi tierra a tomar el fresco, e ir a la playa cuando no llueva.
Oye, cuando tengas ya, los libros, me envias tres ejemplares, cueste lo que cueste, quiero hacer algun regalo y tener yo en mi biblioteca y recrearme en la lectura para volver a vivir aquellos lejanos años.

También, quiero comprar un ejemplar del libro que escribió Pablo, ya que hemos navegado juntos y, hemos pasado los mismos apuros, tengo que llamarle por telefono y encargarle que me lo envíe.
Bueno,en el anterior escrito, tuve que cerrarlo sin terminar por culpa de este trasto con el que estoy escribiendo, mejor era escribir con tinta y pluma aunque, se llenara de borrones. Bueno, ya veo que, los tertulianos se están asomando de continuo por el blog, porque lo delatan los números de visitantes. Ureña, Laguna, ¿que mosca os picó para tardar tanto en darle a las teclas?
No creáis que os vais de escapar así como así, claro que con estas calores es imposible pararse delante del ordenador, por lo menos para mi.

Hablando de los comandantes que teníamos a bordo del Galatea, (yo estuve con dos) Ramos Izquierdo, muy alejado y distante con la tripulación. Cuando desembarcó y embarcó Liaño de Vierna, fué para nosotros un cambio bastante pronunciado. Liaño de Vierna era más cercano a nosotros y mas dinámico, más comprensivo con la tripulación ó sea que, teníamos un poco más de confianza y trabajábamos con mas soltura y confianza a bordo.
Ya habían quedado atrás aquella presiones para nosotros, por lo menos veíamos al Jefe con optimismo y a nuestro lado. Bueno amigos y compañeros, no puedo seguir por este agobio de calor, ya seguieré. Recibir todos un muy fuerte abrazo de un veterano del Galatea, que Dios os bendiga a todosssssssssssss.
Miguel Gómez dijo...
Echa cantinera vino para todos,
quien sabe si cualquiera
de los que aquí cantamos
nunca volverá.
Haber Castrillon, te comenté que cuando escribieras, me echaras un agarre, pero veo que has tirado un salvavidas, que no tiene ni un solo cabo para trepar hasta a bordo, esto es como si alguno se está ahogando y le tiras unas gafas de buceo, que poco solucionan al náufrago, creo que el compañerismo es otra cosa muy distinta, y tu bien lo sabes, que por algo fuiste navegante del Galatea en tus años de jovenzuelo.

Respeto a los Comandantes yo también coincidí con dos de ellos muy distintos, D. Felipe Pita da Veiga, que no aparece en ninguna lista publicada que yo haya visto, pero existió, el otro D. Luis Arévalo Pelluz, que fue el último comandante que navegó en el Galatea activo.
Como Director de la Escuela estaba D. José Manuel Hernani, era teniente de navío, por aquellos años, también ostentaba el cargo de jefe de la cámara de oficiales al ser el más antiguo, supongo que pronto ascendería a Capitán de Corbeta.
Tengo que recordar que todos los oficiales eran buenas personas, cercanos y compresivos, mis recuerdos para todos ellos.

Observo a Castrillon, quejándose constantemente del calor, ya debe de saber de que en verano es lo más lógico, poco se acuerda de su estancia en Guinea Ecuatorial, aquello sí que era sudar tinta, también es cierto que la edad no es la misma, que la juventud, puede con todo lo que le echen, ahora se ha acostumbrado al clima norteño de su Asturias, y no hay quien lo saque de esa entrañable tierra, tenía que pasar los meses de Julio y Agosto por estas tierras Murcianas, para saber lo que es calor y sin belarmina.
Como supongo que la mayoría de la dotación estará de vacaciones, aprovecho para desearles una feliz y espléndida estancia a donde quiera que se encuentren, igual para los que tienen a bien seguir nuestros comentarios.
Saludos para todos, que sigáis pasando un feliz verano.
Arminio dijo...
Hola a todos, como siempre ojo avizor ante los errores y como bien dice Miguel, falta el comandante del Galatea D. Felipe Pita da Veiga y Sanz, que nació en Ferrol en 1910 y estuvo embarcado en los cañoneros Cánovas del Castillo y Canalejas, mandando posteriormente el guardacostas Zaragoza y como oficial embarcado en el crucero auxiliar Malaspina.
Posteriormente estuvo en el Canarias y comandando el cañonero Dato y también como comandante en el Buque Escuela Galatea.
Más tarde entre otros destinos fue profesor en el Juan Sebastían del Elcano.

Tengo algunos documentos en PDF que no puedo traducir a foto, por lo que hago esta reseña aquí hasta que averigue en que período de tiempo estuvo en el Galatea, ya que como bien decís no figura en ninguna relación de comandantes de nuestro velero. Intentaré averiguar estos datos que nos faltan.
Un abrazo a todos los asiduos y un saludo a todos los que nos leen y escriben.
Bitácora dijo...
Hola a todos, espero que las vacacines os sirvan para recuperar fuerzas y estéis a pleno rendimiento para septiembre, ya que el nuevo curso va a ser duro y hay que estar descansados.
Como véis hay un nuevo logotipo para el blog y espero que también sirva para el Galatea, lo he puesto en la página "recordando al buque escuela Galatea" y al final de cada página que se abre, al lado de los visitantes del blog.
Si no os gusta o quéreis modificar algo me lo decías.
Un abrazo a todos.
Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, no cabe duda de que este relajamiento es debido, al periodo estival vacacional, como bien dice Arminio, hay que reponer fuerzas para la entrada en el nuevo curso, que se espera que sea algo duro, pero de otras mucho más duras hemos salido, por lo tanto ya estamos habituados a las inclemencias de cualquier tipo, solo hay que ponerle algo de empeño y olvidar la cobardía, que no conduce a nada.

Quisiera dedicarle unos párrafos de ánimo, a Gerardo Ureña que se encuentra un poco alicaído, ingresado en un Hospital, según me ha comunicado el mismo vía telefónica, pues nada Gerardo te deseamos una pronta mejoría, ya sabes que eso debe ser polvo del camino, tomate unas pastillas del ancla y a continuar con el baldeo, no prolongues la estancia en la enfermería, bien sabes que andamos faltos de personal, te queremos pronto junto a nosotros en cubierta, pon de tu parte todo lo posible, que el ánimo es la mejor solución a los problemas de salud, adelante compañero.
Castrillon, ahora que estas en un lugar mucho más fresco, no tienes escusa para no asomarte al portillo, para amenizar estos templados días, que bien has conocido en tu destino vacacional, yo ando por estas tórridas tierras, que ahuyentan los temas a tratar en este blog, esperemos a que pase este mes de Agosto, haber si se refresca la memoria y podamos seguir con nuestros comentarios.

Arminio, en cuanto al logo no tengo nada que objetar, es mas lo encuentro muy acertado y positivo, mientras que algunos estamos de vacaciones tu andas mimando a este espacio que tantos recuerdos nos aporta, en donde nos encontramos súper satisfechos de su marcha, por estos senderos de las tecnologias actuales.
Con mis mejores deseos, saludos para todos y hasta otra.
Castrillon dijo...
!!!!!!!! Holaaaaaaa¡¡¡¡¡¡¡ ya estamos de vuelta. Miguel y Arminio, muy biennnn por permanecer atentos a todo el Galatea durante este tiempo de ausencia por vacaciones.
He visto una fotografía en el blog del Galatea, en la que, se vé el buque a toda vela e iluminado con focos ya que es noche.
Bien, yo creo que esa foto es de, cuando en unas maniobras generales de la flota, que se efectuaban en la primavera y en el otoño todos los años, y que al terminar, en la bahia de Cádiz se congregó toda la flota para pasar
revista a todos los buques de guerra.

Iban pasando por la proa del Crucero Canarias donde se encontraban, Franco y el Ministro Marina, a toda velocida. Ahí se congregó toda la flota y nosotros con el Galatea también acudimos, era el atardecer, pasamos a toda vela y tuvimos que encender los proyectores de luz para que se vieran bien las velas, ya que teníamos que pasar a cierta distancia del Canarias.
Los buques de guerra ya se habían alejado de aquella bahía,ya era noche cuando terminamos de pasar revista, hacia mucho frío y bastante viento, tuvimos que ponernos el traje azul con peto de gala. No se hizo el saludo a la voz ni al cañón porque ya era noche, pero todos estábamos sobre la cubierta, luego continuamos navegando a nuestro siguiente puerto.
En esa ocasión yo estaba rebajado, por una lesión de una mano debido a una infección por la alambre de un cable de la jarcia, pero todos los que estabamos rebajados teníamos que, estar también sobre la cubierta vestidos también de azul.

Cuando se terminó todo, y nos alejamos de aquella zona, se apagaron los focos y se tocó maniobra general para navegar con velas bajas, se aferraron los juanetes y velachos altos, sí, se pasó frio, los oficiales estaban por la cubierta vestidos también de azul.
Lo que no recuerdo es el año, puede que sea de fecha 11.10.53 ó 21.03.54, ya que coincidieron, con nuestra presencia en ese puerto, lo que recuerdo muy bien fué eso de navegar con los focos encendidos y Franco pasando revista desde el Canarias.

Bueno Amigos y compañeros, me alegro muchos de que todos estéis atentos a este blog que con mucho tesón lleva nuestro amigo Arminio. Bueno recibir todos un muy cordial saludo y un abrazo a todossssss.
domingo, 05 agosto, 2012


Arminio dijo...
Vaya Castrillón ya apareces por la cubierta recordando esos momentos que hacen historia y fijan para la posteridad esas imágenes del Galatea con los focos encendidos y navegando por la noche. Gracias a estos detalles podemos saber mucho más del Galatea. Casi siempre son más importantes esas personas que trabajan a la sombra y con empuje, esas personas como vosotros que sin pedir nada a cambio los habéis dado todo. Esas personas son las imprescindibles y son las que verdaderamente han dado a conocer al Galatea rescatándole del más triste y oscuro olvido.


Arminio dijo...
Canción.

Al descansar de la dura pelea
que sostuvimos todos con la mar,
en tres meses de crucero, Galatea,
navegar, navegar, navegar.

Todos marchamos muy contentos,
todos cantamos con amor
a esa tierra que añoramos
y llevamos en el corazón.

Ya venimos de la mar,
vamos a descansar,
vamos a descansar,
volvemos al hogar.

Cantemos pues todos al Galatea
donde viví amarguras e ilusión,
mi velero qué solo te quedas,
siempre te recordaremos con amor.

No olvidaremos viejos tiempos
de aventuras sin igual,
cuando amenazaban los vientos,
cuando rugía el temporal.

Ya venimos de la mar,
vamos a descansar,
vamos a descansar,
volvemos al hogar.

Saludos.
Castrillon dijo...
!!!!!!!! Muy biennnnnnn Arminiooooo¡¡¡¡ eres un genio con las poesias náuticas, ya hacía tiempo que no asomabas por aquí.Yo me encuentro un poco alejado, por que tengo en mi casa a toda la familia, de Madrid y de Ibiza, en muy particular a la nietas, por eso estoy un poco alejado, pero siempre tengo un rato para ojear el blog.
Para el lunes ya me encuentro otra vez solo, ó sea que se marchan los veraneantes a sus casas, entonces tendre más tiempo para dedicarme a estos encuentros.
Miguel estoy esperando tus barriletes, no creas que se me pasan de largo, de eso ni hablar.
Bueno amigos y compañeros todos, recibir un muy cordial saludo.
Arminio dijo...
Hola a todos:
Mientras comíamos en el rancho, mi mente volaba tratando de imaginar en que consistirían las enseñanzas que el destino, o el teniente de navío, profesor de Maniobra nos tenía reservado.
Una vez devorado un potaje de garbanzos y una carne estofada con patas fritas, que realmente estaban muy bien cocinadas y que se convirtió en adelante en mi plato favorito, y tras arranchar y estibar la mesa del rancho en el
techo del sollado, nos dirigimos al castillo.
Como lagartos, tomábamos el sol sobre la madera de cubierta cuando Valladolid me preguntó.
-Madriles, que te parece si tenemos que subir a los palos esta tarde Supongo que no me da miedo, no creo que sea excesivamente peligroso si vas bien agarrado.

-Pues a mí tampoco me lo parece, pero claro hay que estar ahí arriba primero y luego opinar, pues desde aquí abajo todo parece muy fácil.
En esta disertación estábamos, cuando un cabo primero aspirante nos interrumpió bruscamente.
- Si tenéis tantas dudas en subir a los palos, para que habéis escogido esta especialidad.
- De todas formas al principio solo os van ha mandar subir hasta la cofa desde la jarcia de babor y tras entrar por la boca de lobo, descender por la jarcia de estribor.
-Eso si, tenéis que hacerlo descalzos, aunque os van a doler un poco los pies, pues los flechastes son muy finos y nos estáis acostumbrados.
Con este pequeño comentario nos tranquilizamos bastante, pues en nuestros pensamientos nos veíamos subir hasta la punta de los palos, a una altura que rondaba los más de cuarenta metros sobre la superficie del agua.

El cálido sol de los comienzos de la tarde, y la tranquilidad que nos dio el cabo, acabó por sumirnos en un ligero y corto sueño sobre la madera gastada del bricbarca.

 Miguel Gómes dijo...
Me es súper agradable cruzar la plancha que hace de portalón entre el muelle y nuestro velero, ver que aun siguen allí los compañeros, trabajando diariamente para que no se vuelva a dar otra ocasión, de indiferencia y olvido de nuestro Galatea.

Me viene a la mente aquellos días de navegaciones, atlánticas cuando el viento era nulo por aquellas latitudes tropicales, con las velas al pairo, el buque no avanzaba ni un solo milímetro es mas algunas veces hasta retrocedía, la mar parecía una balsa de aceite, pero las escoras eran bastante pronunciadas, así como los cabeceos o balances de proa a popa, parecía imposible creer que aquella mar ocasionara dicho balanceo tan acusado, era la traicionera mar de fondo, la que hacía que algunos novatos se marearan y tuvieran que acudir a la borda para arrojar lo que vulgarmente le decíamos la mascada, en estos casos no había barlovento ni sotavento, por lo que era igual acudir a cualquier parte de ambas bandas, para esos menesteres.

Cuando ya estábamos en la escuela, en las guardias de mar diurnas cuando teníamos clases éramos relevados para acudir a las mismas, por los marineros que aun no estaban enrolados en la escuela, ya que los nueve meses de embarque se hacían en el mismo Galatea, era totalmente distinto en otras especialidades, que ese embarque se hacía en los buques de guerra.

Castrillon yo esa imagen de nuestro Galatea navegando con los focos encendidos, solo la había visto en fotos, ya que no se dio el caso en ningún momento que yo recuerde, nunca estuve en una revista naval de ese tipo, es una imagen preciosa, me alegra que tú la presenciaras, otra cosa de los barriletes nada de nada, espero no tener que volver a esa guerra que ya paso en la que el ganador fui yo.
Arminio una vez más te destacas por tu gran labor en este blog, tanto en la parte poética como en la grafica, a nosotros ya nos tienes habituados a todos estos detalles, pero de todas formas siempre vienen muy bien estos momentos tan relajantes, ante las adversidades que constantemente nos acechan, por estos duros caminos de la mar, gracias por el grado de ánimo para con nosotros, creo que solo intentamos cumplir nuestro compromiso con nosotros mismos.

Esperando que todos estéis pasando un feliz verano, agradeciendo a nuestros seguidores su gran numero de visitas, y deseando lo mejor para todos, solo me queda decir hasta otra.
Saludos Paz y Bien

Arminio dijo...
A los ausentes del Galatea

Di, Galatea , amiga de los marinos,
di, Nereida, hermana de los solidarios,
¿dónde dejaste al que ayer fue mi amigo,
dónde dejaste al que ayer fue mi hermano?.

La diosa le dejó junto al mar tranquilo;
Galatea le dejó junto al mar callado.

Armninio dijo...
Al Galatea

Oh velero!
que a mi imaginación asomas
y que en mis sueños te balanceas
como ligera embarcación.

Oh ilusión!
con tus mástiles y velas para navegar
te haces imperceptible en el inmenso mar
cumpliendo mi gran ambición.

Galatea!
contigo haré lo que siempre soñé
navegar, adentrándome en el mar
para mirar la tierra por última vez.

Oh Galatea!
al fin solo estaré.
Mi velero, el cielo, las estrellas
las olas, el viento y el mar.

Ahora podré descansar,
disfrutar del sosiego,
la noche, el día, la luna, el sol,
y la paz de navegar.

Arminio dijo...
Buenos días, Gerardo Ureña, timonel del Galatea. En compañía de todos me alegro de que estés algo mejor. Espero que poco a poco vayas retomando tu vida, pues el Galatea y nosotros te echamos de menos a tí y a tus escritos.

Un abrazo muy fuerte del Buque Escuela de Maniobra Galatea que te cobijó entre sus cuadernas y no se olvida de tí.

Arminio dijo...
Buenos días a todos, parece ser que hemos recibido nuevas fotos, quizás gracias al llamamiento incluido a la derecha de la página del blog, donde se piden aportaciones. También en la página "recordando al Buque Escuela Galatea" hay unas copias de mi expediente, con foto y todo, aclarando lo de los dos días de arresto.
Gracias a todos por vuestra constancia y volvemos a navegar como hace muchos años, los de siempre. Falta Meizoso que dice que no puede ver el blog desde su navegador de internet, pero esperemos que lo arregle pronto

Miguel todas las adversidades son polvo del camino, nos mojamos y nos volvemos a secar y ahora que recuerdo y hablando de mojar me viene a la cabeza una canción que cantábamos a los nuevos:
En la proa del Galatea
hay agua y no ha llovido,
son lágrimas de pelones
al ver marchar los cumplidos.

Atraca el chinchorro y vuelve a atracar,
estamos cumplidos queremos marchar,
queremos marchar, queremos marchar,
atraca el chinchorro y vuelve a atracar.

Un saludo a todos y, a los que nos leen les decimos que ánimo a escribir, a opinar, a preguntar, y a enviar alguna de esas fotos perdidas del Galatea.
Castrillon dijo...
Hola a todos, ya estoy cerca del comienzo de la vida rutinaria, es decir, ya nos encontramos en Avilés y con nuestros familiares en sus respectivos lugares de residencias, Madrid y Guadalajara.
Así que, ya he revisado el blog, tanto las fofografías como los escritos; eso fué como si pasara una película completa de mi vida, desde el momento en que me alisté a la Marina hasta este tiempo, en particular viendo la páginas en que estan todas las imágenes. Ahí es donde mas detengo, ya que veo a mauchos compañeros de aquella Galera, y de esa manera voy fomando una exacta vida de todo nuestro paso por la Armada, en auqellos muy lejanos años de nuestra juventud.

Cuando veo a los compañeros a bordo del Galatea en mi mente me pregunto, ¿ que será de éste, y de aquél?, ya nos hemos perdido de vista hace años, no sabemos nada los unos de los otros, sólamente en nuestras mentes quedan impresas y gravadas en nuestros corazones, aquellas vidas de unos jóvenes que estaban pasando de la pubertad a la mayoria de edad y que nos resusltaba muy difícil para nosotros. Era demasiado brusco que cambio, no lo soportábamos y, por si fuera poco aquél durísimo trato físico a nuestros cuerpos.

Por ello doy las gracias a nuestro buen amigo Arminio, por esa muy buena idea de confeccionar esa página con todas las fotografia de que dispone para poder recrearnos en nuestro pasado, y presente, fué la mejor idea que tuvo.

Bueno amigos y compañeros todos, (Miguel, tienes una deuda conmigo de treinta mil barriletes de cerveza).
Recibir todos un muy fuerte saludo y un muy cordial abrazo, muy en particular a UREÑA.
Arminio dijo...
Bienvenido señor Castrillón, comandante del Galatea, espero que a su regreso observe el estado de revista en el que le recibe el Galatea, todo en su sitio perfectamente arranchado, lampaceado, y cono los cabos perfectamente adujados en sus respectivos cabilleros, los bronces como el oro y en su toldilla la tumbona y la cerveza fresquita.
Le tengo una sorpresa que he empezado hace dos días y solo tiene que pinchar debajo de este comentario encima de la rosa de los vientos.

Un saludo a todos y especialmente al Señor Tena que pasó un año entero en el Galatea haciendo el curso de cabo primero, mientras yo hacía el de cabo segundo. En cuanto vi su foto le reconocí, creo que estaba en mi mismo rancho. Es el primero que conozco desde que hemos empezado con los blogs del Galatea.
A bordo siempre fue mi correcto con nosotros en el trato campechano y alegre, cosa que no puedo decir de su compañero el señor Largo que era un hueso recién desembarcado de Elcano.
Castrillon dijo...
Hola a todos, ese buque (el Galatea) que se encuentra inerte en un puerto ingles, y que estuvo a punto de ser intervenido por los sopletes, y que parecía un buque fantasma y, ahora un pétreo recuerdo de su pasado. Ese buque, aunque sus jóvenes visitantes lo ignoren, tuvo tuvo un pasado muy glorioso, y con una vitalidad tan grande que, no había embarcación sobre la mar navegando que le hiciera sombra.
Era la admiración de todos los marinos tanto en la mar como en puerto, y nosotros, los que hemos pertenecido a su dotación, cuando entrábamos en cualquier puerto, nos sentíamos muy orgullosos de formar parte de sus entrañas.

Mutuamentee la dotación del buque, nos dábamos vida unos a otros, aunque, muchísimas veces nos exigía unos esfuerzos inhumanos para poder salir airosos de los trances en que solíamos caer debido a las furias de los vientos y de la mar, esfuerzo que una vez pasados esos momentos, aunque muy agotados, quedábamos muy orgullosos de salir victoriosos de esa liz contra los elementos naturales, cosa que dábamos gracias a Dios por todo ello.

Por eso digo que, cuando lo vemos como unos profanos visitantes, solamente ven en ese inerte museo flotante, una figura sin vida, un objeto sin valor, nuestro interior se revela contra esa ignorancia; pero también nosotros vamos pasando, y llegara el momento en que no quedemos nadie de aquella vida pasada surcando todos los mares, siendo la admiracion de todo marino, siendo comprendido solamente por sus compañeros de su misma estirpe de veleros, que nos encontrábamos en diferentes puertos de otras naciones.

Mi reconociento a todas las dotaciones que formaron parte de ese buque ESCUELA MANIOBRA GALATEA, que Dios bendiga a todas esas dotaciones. Un muy fuerte abrazo a todas ellas.

Arminio dijo...
Hola a todos, si deseáis dejar de escuchar la canción del Galatea, solo tenéis que picar en la regleta de la canción del Galatea y una vez parada la canción, si os gusta como fondo el Galatea navegando, picáis en la regleta de más abajo y así mientras véis fotos, leéis o escribís comentarios estaréis acompañados de vuestro querido mar, os transportará a los años dorados del Galatea.

Miguel Gómez dijo...
Hola a todos, compañeros y demás personas que tienen a bien estar hay cada día al pie del cañón, mis gratitudes para todos ellos.
Lamento el no poder estar con vosotros en cubierta, tengo los días súper ocupados, y aun estaré así como mínimo lo que queda de este mes de Agosto, solo tengo tiempo para una ojeada esporádica, sigo la marcha de este nuestro espacio y sus progresos, que son muchos y muy diversos, gracias al buen hacer de sus componentes.
Castrillon en mi ausencia puedes ir sumando barriletes, ya que la guerra la empezaremos en Septiembre, cuánto más grades sean las cifras mayor será la derrota.
De momento por ahora solo me gustaría desear, lo mejor para todos, ánimos y hasta pronto, mis emotivos saludos.
Castrillon dijo...
!!!! UREÑAAAAAAA DONDE ESTASSSSSSS¡¡¡¡
Te echamos de menos en estas tertulias, ya sabemos que has estado en el hospital y que has salido bien de él, y te encuentras en recuperación, así que no tardes en salir de esa incomoda situación.
Ya sabes que no te olvidamos tan fácilmente, esperamos con paciencia tu regreso.

Tengo que hacerte algunas preguntas sobre unos compañeros del buque, que quizás te recuerdes bien de ellos, pero, ahora no voy a decirte nada para no forzar tu mente, así descansas mejor.
Recibe un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazoooooo, recuerdo muy bien tu estancia en el Galatea.
Que Dios te bendia y te guarde.
Fernando Tena dijo...
Me presento, me llamo Fernando Tena Díaz y aunque no he navegado en el Galatea si me he tirado dos años en dicho barco, primero como cabo segundo alumno y más tarde haciendo el curso para cabo primero.
Mi promoción es del 28 de Octubre de 1971, embarcando por primera vez en el Galatea en Enero del 1972.
Ahora estoy en la reserva y vivo con mi familia en Rota (Cádiz), pueblo tranquilo y marinero.
La primera vez que pisé la cubierta del Galatea, fue en Enero de 1972 como comenté anteriormente; llegué un día lluvioso y ventoso, bueno un día ferrolano, me dirigí a la Estaciona Naval y como no dejaron pasar al taxi hasta donde iba, tuve que ir andando hasta el buque, desde la barrera de la entrada en La Graña hasta el Galatea que estaba en el pantalón central.

Así que cuando llegué estaba empapado y muerto de frío, intentaba meter las manos dentro de las mangas del chaquetón azul para que el aire no me enfriara más las manos, pues ya no podía ni mover los dedos del frío que tenía.

Al subir a bordo el centinela me dijo que esperara al cabo de guardia, que era un especialista con seis meses más que yo de Marina, o sea un cabo segundo alumno, así que lo llamó con el pito de maniobra "Pirriiii, pirriii, cabo de guardia" el cual subió a la toldilla y me pregunto que si era especialista.
Después de darle los papeles de embarque me comentó que esperara un momento que iba a comunicarlo al Suboficial de Guardia, en ese momento y antes que bajara a comunicarlo la suboficial, le llame y sacándome un cigarro del bolsillo le dije, que si me daba fuego; como con un resorte se disparó su mano, me dio un bofetón y me metieron diez días de arresto Pedir fuego a un superior).
Este es mi comienzo y primera experiencia abordo del Buque Escuela Galatea. Un saludo a todos.
Arminio dijo...
Bienvenido a bordo, señor Tena, especialmente me alegro mucho de tu vuelta a este Galatea, donde tu entrada espero que sea totalmente diferente a la primera. Te recibimos con los brazos abiertos esperando que tu permanencia a bordo sea habitual y de vez en cuando nos comentes cosas.
Yo en especial me alegro mucho, pues que como sabes estuve contigo en el Galatea un año entero, tu de aspirante a cabo primero y yo a cabo segundo. Por eso nada más enviar las fotos que ya están colocadas en el blog y darte la bienvenida en la página de viaje a Glasgow, estaba deseando que pisaras la plancha y te adentrases en el velero.

Como presentación, y de mi parte tengo que decir que te recuerdo siempre, con tu cara risueña y tu buen trato para con nosotros, sobresalías para bien junto con otros compañeros de tu promoción, pues como sabes había que andar con pies de plomo y había algunos aspirantes a cabo primero, que eran unos huesos, por lo que además de estar ojo avizor con el resto de los mandos, también había que andar así con ellos.
Bueno lo del bofetón, no es el primero, pues ya sabes que "la insubordinación se castigaba en el acto” y la familiaridad en el trato a un superior era considerado insubordinación o algo similar. Ahora con el paso del tiempo se ven las cosas de otra manera y solo se recuerdan los momentos agradables, aunque eran pocos.
Yo hasta la fecha no he coincidido con ningún "curso" al menos aunque de cursos diferentes, ahora si puedo decir que Tena estuvo en la misma época que yo, y así me podrás corregir si me equivoco o no recuerdo algo.
Un abrazo de mi parte y de la de todos. ( este fin de semana no estoy ya veré los comentarios el lunes)
Castrillon dijo...
Hola Tena, soy Castrillon, como sabrás yo soy muy veterano, estuve embarcado en el Galatea desde el año 1.953, hasta el 1.956, navegando todo el tiempo.
Cuando leo lo del "bofetón" me eche a reir, y pensé, "no ha cambiado nada el comportamiento de los suboficiales desde mi época" ya que yo cuando embarqué, que fué en el mes de septiembre de 1.953, nada mas terminar el periodo de instrucción, salimos a la mar, rumbo a Hamburgo (Alemania).

Al día siguiente de estar navegando con buen viento, estando yo en cubierta con otro compañero, le dije "que buen aire hace para las velas", no me dio tiempo a terminar, cuando de repente por mi espalda me dan un gran bofetón que me tumbaron en cubierta, y una cara de pirata cerca de mi cara me dice "no se dice aire, se dice viento".
No veas tú Tena, eso acabó de echarme la moral por la borda, jamás se me olvidó esta forma de corregir a bordo, siempre era con esta clase de castigos.
Por eso me rei cuando leo tu comentario, ya sabes,"el zorro pierde el pelo pero no pierde la maña".
Bueno, muy bien venido a esta tertulia, de antiguos marinos del Galatea, ahora están todos con vacaciones pero ya los irás conociendo.
Yo continué en la Armada hasta mi retiro.
Recibe un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo.
Miguel Gómez dijo...
Estoy sin arrancada,me dirijo a dique seco, estaré unos días ausente, mi equipo informático no responde.Bienvenido compañero Fernando Tena.
Saludos para todos.
Castrillon dijo...
Hola a todos, parece que, este largo, y tórrido verano nos tiene adormilados, ya que hay bastante pereza para incorporarse a esta sección de comentarios, pero bueno, ya queda poco para que llegue el otoño y queden atrás todas las fiestas y golgorios de estos meses veraniegos, y quede en unos gratos recuerdos.

Nuestro amigo Miguel Gómez se encuentra en su Murcia achicharrándose de calor y, por si fuera poco se quedó sin ordenador, así que tenemos que esperar a que llegue el mes que viene para que vuelva a su casa y pueda continuar visitando esta página.
Arminio y demás compañeros, no creais que estamos olvidados de este blog, de eso ni hablar, os recordamos a todos muy bien.
Gerardo Ureña, esperamos que vayas cogiendo fuerzas poco a poco y que te recuperes rápidamente ya que te echamos de menos. Fernando Laguna, también nos acordamos de tí.
¿Quien es el que duda que de que habia ratas en el Galatea? el que asi piense, una de dos, ó no estuvo embarcado ó, no se enteraba de nada.

Bueno amigos y compañeros, seguir disfrutando de estos días de calor en las playas, el que pueda, y los que no tendrán que ir a los montes y ponerse debajo de los árboles.
Recibir un muy cordial saludo todos.
Gerardo Ureña dijo...
Hola amigos: Hoy me propongo asomarme por este magnífico y entrañable blog, que tan magistralmente navega con tan buenos timoneles.
Arminio, he visto las novedades, me gustan, como todo lo que tú haces. NOTA ALTA.

José Mª, me he quedado impresionado con tú precioso artículo, es tremendamente profundo. ¿He descubierto un nuevo José Mª? ¡NO!, ES LA SABIDURIA DEL VIEJO LOBO DE MAR,la grandeza que atesoras dentro de ti no tiene precio.
Como tú muy bien dices, cuando no quedemos nadie de los que navegamos en el Galatea todo se perderá.Confiemos en los libros, y que los espíritus de estos marineros sigan morando en las mamparas del nuevo y viejo GALATEA.

Excelente lección de BLIBIA la que me transmites. No puedes imaginar como me alegró el saber que este fue tu libro de cabecera y tu guía. Veo que tenemos un nuevo navegante, Fernando Tena Díaz, yo tambien te doy la bienvenida a bordo y te deseo lo mejor.
En cuanto a mi, os dire que voy mejorando, pero muy lentamente. Esta vez el impacto ha sido en la linea de flotación. Como no tengo compartimentos estancos, me tuvierón que poner el pallete de colisión y apuntalar mamparas hasta llegar a puerto bastante escorado.
Gran Miguel, una vez más, gracias amigo, gracias una vez más y todas las que hagan falta. Hace tiempo que no sabemos nada de Ortiz, Laguna y José Luis Martínez. Haber si dçais señales de vida, es importante para todos saber como navegáis este caluroso verano.

José Mª, te haré tres preguntas para agilizar la mente, que es algo que te gusta mucho. ¿En el año 1955 quien fue el cabo primera que sacó el numero 1 de su promoción? "El Cabo Lozano".
¿Te acuerdas del cabo Rico? El cabo Rico estaba muy estropeado, este hombre que estuvo destinado en Guinea, parece ser que cogió todas las enfermedades de aquellas tierras.
Estoy seguro que si que lo recuerdas. Y del cabo Alfaro, ¿te acuerdas del cabo Alfaro? Este solía decirnos, "cuando yo ascienda a suboficial, para vosotros siempre seré el cabo Alfaro" Estuvo destinado en el Malaspina y en el Tofiño. Ya tienes para calentarte la "testa" un rato. Un fraternal abrazo para todos.
Arminio dijo...
Gerardo, me alegro mucho que estés mejor y que te animes a escribir. Como buen maniobra ya te has dado cuenta del nuevo espacio, esperamos que lo utilicemos todos, le he puesto hasta sonido de mar para ambientarnos.

Espero que me mandes tu primer contacto con el Galatea para ponerlo en la página "la llegada al Galatea", con tu buena pluma de buen escritor será la delicia de los que nos leen.
Me lo puedes mandar por correo o como comentario en este blog.

Sobre Tena, estuvo un año conmigo a bordo, él de aspirante a cabo primero y yo de aspirante a cabo segundo, es una mánífica persona, lo demostró con el trato hacia nosotros que éramos sus subordinados.
Un saludo y espero que cada día vayas mejorando, con el descanso de nuestras lecturas en el reposo de tu hogar.
Castrillon dijo...
Hola a todosss, muy en particular a UREÑAAAA, que, me mando un gran y extenso correo con la historia de la Riada en Valencia en el año 57,cuando él se encontraba embarcado en el Sarmiento de Gamboa.
!!!!! ufffffff¡¡¡¡¡¡ cuantos años han pasado, ! si¡ recuerdo muy bien esa famosa Riada. Yo, estaba embarcado en el Dragaminas Bidasoa, ya había dejado el Destructor Velasco y embarcado en ese dragaminas destinado en Las Baleares, !! claro que me acuerdo muy bien de aquella famosa inundación,¡¡¡

Lo seguíamos al momento, estábamos con el buque en Stambay por si fuera necesario acudir a aquella ciudad, lo mismo que los demás buques que estaban destinado allí, en Palma. Ya pasó medio siglo, lo mismo que pasó ese tiempo para nosotros, !!si amigo Ureña¡¡ claro que me acuerdo, y demasiado bien.

Ureña,¿ quien iba a decir a aquellos dos jóvenes llamados por sobre-nombre, Valencia ( Ureña) y Asturias (Castrillon) que después de pasar cincuenta y cinco años hablarían de esos días? se veía un tiempo demasiado lejano, imposible de alcanzarlo, ! pués bien, ya hemos llegado a ese momento¡ ya pasó más de medio siglo, y aqui estamos gracias a Dios.
Ureña referente a si me recuerdo del cabo Alfaro, mira tú, no, no me acordaba de él, pero al mencionármelo claramente lo reconocí, lo mismo que al cabo Rico, pero al cabo Rico también me acuerdo de él por verlo en algún buque de Guerra en que estuvimos destinados juntos.
Ureña, tienes una memoria fotográfica, también me recuerdo de muchos más, pero no se si te tocó a ti también estar con ellos.
Oye, parece que te vas recuperando muy bien, de lo que nos alegramos mucho.
Ya le he dicho a Miguel que apareciste por este blog y se alegró mucho, lo que pasa es que se le estropeó el portátil, y hasta que no llegue a casa, no puede intervenir, me diómuchos saludos para ti.
Oye,¿ Recuerdas el nombre completo del segundo Comandante del Galatea ?
De momento no te hago hacer esfuerzos con la cabeza para que te recuperes primero.
Sin más recibir un muy cordial saludo todos y un muy fuerte abrazooooooooo...,
Gerardo Ureña Massa dijo...
Era domingo, la fragata Sarmiento de Gamboa estaba en Valencia. Llevávamos a bordo al almirante del Departamento de Cartagena, al día siguiente Lunes, salíamos con rumbo a Alicante.
Yo ese día tenia guardia, pero Valdez, cabo segundo de maniobras, me hizo la guardia para que pudiese estar con mi familia en Valencia. Valdez me dijo "yo te hago la guardia de día, pero la noche te la haces tú, convenido y agradecido.
Serían las diez o las once de la noche, cuando llegué al barco, mis padres me acompañaron, me despedí de ellos al pie del portalón y pasé a bordo.

Estaba de cabo cubierta, di las vueltas de rigor y pude comprobar que todo estaba en calma, el oficial de guardia descansaba y todo era calma total, en cubierta solamente estaba yo, pues el centinela estaba en tierra.
Bajo al sollado de proa hablo con el cuartelero y empiezo a escuchar unos raros ruidos que no sabia de donde y porqué.
Subo a cubierta rápidamente y me dio el tiempo justo meter al centinela a bordo, cuando me disponía a avisar al oficial de guardia. Este ya bajaba a popa con el segundo. No sabíamos que estaba pasando, lo bien cierto es que de tierra estábamos recibiendo una tremenda cantidad de agua. Me ordenan que llame al contramaestre de cargo, lo llamo, que despierte a la brigada de guardia, la despierto.

Reforzamos amarras, pues las cataratas de agua que llegaban de tierra estaban jugando con el barco. A las cuatro de la madrugada me relevan y me voy adescansar un poco.
Al amanecer el espectáculo era dantesco, el Sarmiento de Gamboa estaba rodeado de cadaveres flotantes, arriamos dos botes, el cabo primero Gálvez y Valdez se dedicaron a recogerlos y depositarlos en tierra, estábamos incomunicados, nadie sabía que pasaba, todo eran preguntas sin respuesta.

A las diez de la mañana hablo con el segundo y le pido permiso para ir a mi casa, no sabía que les podia haber pasado a mis padres, esta incertidumbre me podía. El segundo comandante era D. Eduardo de Velasco Gomez, y me dice, "te puede parecer muy cruel pero no puedo darte permiso, pues no sabemos que esta pasando".
A Media mañana me llama el segundo y me pregunta, ¿tú conoces el camino que hay de aqui a la Comandancia de Marina?, "como la palma de la mano mi segundo". "Prepárate que vas a salir con el teniente de navío López Serón, el cabo Valdez y seis marineros voluntarios a intentar llegar a la Comandancia.
Gerardo Ureña Massa dijo...
Continúa...
Todos amarrados con el mismo cabo y con agua hasta el cuello partimos para la Comandancia. Cuando llegamos, aquello parecía un hospital, frente a la Comandancia estaba el economato de Marina, nuestro oficial nos dice que le sigamos, entramos en el economato y nos encontramos a un teniente de navío de la reserva, un teniente de la guardia civil y dos números, éstos pretendían llevarse todos los víveres y se los estaban repartiendo, al notar nuestra presencia se dirige al oficial del buque y que iba conmigo. Le pregunta, "tú que quieres", mi oficial le dice, "que salga la guardia civil, que se quede sólamente el teniente y que dejen aquí todos los viveres".

El otro le replica, "yo hablo en nombre de el comandante de la Comandancia", mi oficial " y yo en nombre del almirante del Departamento", el otro traga saliva y calla, mi oficial le dice, "traigo dos cabos y seis marineros, la Comandancia esta llena de gente que también tiene necesidades de ser atendidos".

Mi oficial habla con el teniente de la guardia civil y pronto se ponen de acuerdo, víveres para la guardia civil y sus familias, si, pero también para todos los refugiados en la Comandancia . Mientras nosotros atendíamos a todos los necesitados, Valdez se comunicaba con el barco a través del código de banderas desde la terraza de la Comandancia.
A las cuatro de la tarde vino una segunda riada, impresionante. La Escuadra estaba de maniobras en Santa Pola, a las diez de la noche ya estaba en Valencia el Cervera y varias unidades más de nuestra Marina. El segundo me dice, "ahora puedes aprovechar que un oficial tratará de entrar en Valencia con un camión y que te dejen en casa, dicho y hecho, me subí al camión y este me dejó en la misma puerta de mi casa, como no había luz, tuve que silbar, mi padre bajo a abrirme con un cirio en la mano, veo que todos están bien y respiro tranquilo.

El Sarmiento de Gamboa fue el primer barco de nuestra Marina que prestó servicio y socorrió en la riada del 57. Yo estaba recien salido del Galatea, a Valdez y a seis marineros más los condecoraron, se lo merecieron, sin ninguna duda.
Seis días estuvimos en Valencia, al final de estos seis días, a los Valencianos nos dieron 15 días de permiso.
Un saludo a todos.
Fernando Tena dijo...
Muchas gracias por la acogida del nuevo grumete, a los veteranos y a los no veteranos.
He estado leyendo con mucha atención vuestra vivencia en el Galatea y las mías son un poco menos amenas, cosas cotidianas que nos pasaba a todos, (a unos más que a otros).
Por ejemplo: Los gaveteros, si, si, los gaveteros y no los gavieros, los que se tenían que levantar media hora antes que los demás para ponerse en la cola del desayuno, y no ser el último, pues el último monta guardia ( recargada).

Si ese día no llovía tenías suerte, pues si el tiempo se ponía feo, tenías que aguantar en cubierta hasta que llegara tu turno y poder bajar el desayuno al rancho, el cual estaba compuesto de cuatro marineros especialistas, cuatro cabos segunda alumnos, dos cabos primeros alumnos y uno ó dos suboficiales alumnos, de los cuales los especialistas eran los encargados del turno de “Gaveteros” de dos en dos y por semanas.
Ese período creo, al menos par para mi, era lo mas penoso, aunque durara solo seis meses, pues en ese tiempo ascendemos a cabo segundos alumnos y otros pasaban a nuestros puesto.

Pues en esos seis meses, que yo me acuerde pasé por lo menos cuatro meses de gavetero, pues además de la guardia recargada por el cabo de turno, si el suboficial de rancho no veía los platos y los tenedores (Bueno la vajilla) muy limpia, pero que muy limpia, te ponían una semana de gavetero recargada, pues los platos de cristal y los vasos los miraban a tras luz y si había una manchita por una gota mal secada tenías premio.
Los aspirantes a cabo primero y a suboficial podían permitir migarse el pan en los platos y así utilizaban plato, vaso y cuchara, lo cual para los gaveteros era más trabajo.

A los especialistas y los cabos segundos alumnos, no es que se le prohibiera, sino que al ser nosotros mismos los que lo teníamos que limpiar, en los imbornales de babor del barco y los cabos alumnos tenían que vigilar, por lo tanto era mejor tomarse el chocolate ¿? o el café, (cosa que nunca distinguí) bebido para de esa manera no ensuciar muchos enseres.
La comida creo que merece un tratamiento aparte, así como se efectuaba la limpieza de los enseres en cubierta, encuclillas, y con cuatro ojos, para no aburrir lo contaré en otra singladura.
Un saludo a todos.
Arminio dijo...
Gracias a todos por los comentarios y por la alegría que nos dáis cuando al abrir el blog, vemos gente con ganas de contar su anécdotas.
A Ureña le digo que dada la importancia de su relato, está el suceso puesto en la página central de "Relatos del Buque Escuela Galatea El Galatea Navega de Nuevo" con dos fotos de la riada de Valencia ya que la mágnífica presentación que me enviaba no la he podido poner.

A Fernando le digo que muy buena descipción de los gaveteros, que como el dice tenían que tener un ayudante para quitar y poner la gorra a la salida y entrada de los sollados, para evitar guardias recargadas. Con gorra dentro, guardia, sin gorra fuera guardia, botón desabrochado, guardia etc... etc...

Ahora le digo si recuerda, cuando los marineros de la dotación dando golpes en las mesas cantaban: huevos y más huevos, estamos hasta los huevos de comer tantos huevos.
Aunque a Tena le tengo que decir que cuando había en el rancho algún cabo primero eventual se cortaban y no lo cantaban. Siempre lo hacían en la cena.

No me olvido de los verdaderos marinos del Galatea, Castrillón y Miguel, ni de Ureña, aunque Tena y yo nos perdimos las navegaciones de ese buque.
Un saludo a todos.
Fernando Tena dijo...
Arminio, esa ha sido mi espina, no haber podido navegar en el Galatea.

No me hables de los huevos, pues me acuerdo que salí de Almendralejo, mi pueblo, para regresar al Galatea después de un permiso; en los trenes de antes no había bar donde tomar nada y cuando llegué al barco sobre las once de la noche no había nada para comer, excepto una bandeja de huevos que había sobrado en la cocina y estaba dispuesta para tirarla, unos 12 huevos.

Los huevos del Galatea parecían de plástico, además de ser chicos los hacían a la plancha y nunca tenían yema para mojar y si los veía de perfil eran planos, parecían una pegatina.
Pues como no había otra cosa me comí los que había en la bandeja y sin pan, a palo seco; por lo menos me quitó el hambre y aunque parezca mentira creo que me sentaron bien.

En el Galatea se hace verdad el refrán “Lo que no mata, engorda”, lo peor del Galatea era la comida y apunto estuvo de costarme un disgusto. Saludos
Castrillon dijo...
Jajajajajaaaaa, jajajaaaa, muy bien Tena, muyyy bien explicado lo de los huevos, jajaaaa, bien, pero tuvísteis la suerte de tener cubertería, cuhara, TENEDOR, PLATO DE CRISTAL, VASO DE CRISTAL, ¿cómo es posible que tuviérais tanto lujo? no me lo creo, pero bueno tu testimonio tan detallado lo veo todo en colores.
Como sabes, nuestra cubertería era, más simple y muy abreviada, plato y cuchara de aluminio y, un tanque del mismo material, y para de contar, claro tambien la GAVETA.  Bueno ya seguiré que ahora tengo que ir a la playa. Hasta luegoooooooooooo....
Fernando Tena dijo...
…En la comida, el trabajo era más penoso, por la cantidad de enseres que se usaban; Castrillon cuando navegaba en el Galatea, tenía la suerte de tener pocos enseres y además de aluminio, que no se puede mirar a contraluz, yo no.

El ritual es el mismo que el desayuno, intentas dejar la que estás haciendo, para poder llegar pronto a la cola de la comida y no ser el último por lo de las guardias recargadas; mientras uno se pone en la cola y guarda el sitio, el otro gavetero va al rancho y coge dos gaveta y una paellera, así que teníamos en las manos una gaveta en cada una agarrada por el asa y entre las dos manos la paellera.

Como bien ha contado Arminio, los cabos de guardia en cubierta estaban a la caza de cualquiera para reclutarlo para la guardia nocturna y así poder ser los tramos de los turnos de guardia de menos tiempo.
Los gaveteros íbamos de la cocina en cubierta al rancho con las dos gavetas y la paellera, ( una especie de bandeja de aluminio que creo que eran las que puso Aníbal para pasar los pirineos y los Alpes en las patas de los elefantes*) lo digo por las abolladuras que tenían) así que no nos quedaba más manos para quitarnos la gorra para bajar al sollado.
Si poníamos un pie dentro con la gorra puesta teníamos premio y si nos la quitamos en cubierta antes de entrar también, así que venía un compañero y nos la quitaba en el momento justo de pasar la puerta.

La comida como ya he comentado, no creo que pasara las normas de sanidad de hoy en día, pero no había otra cosa, así que cuando ponían “caldo gallego” en las gavetas ponían una especie de liquido blancuzco con unos trozos de tocino flotando. El gavetero que servia la comida, tenia la ocasión de distribuirlos equitativamente o como dice el refrán, “El que reparte, se lleva la mejor parte”, algunos compañeros que eran más pudientes, pasaban del tocino y luego en la cantina se compraban un bocadillo de salchichas de las de siempre, por cinco pesetas, salchichas que nunca las vi en el rancho, pues las que ponían eran las estilo Frankfurt.

Con el caldo gallego, la cuarta parte de una tortilla de patata, que más bien parecía una radiografía de lo fina que estaba y con sus manchas negras correspondientes y dos salchichas Frankfurt. Esta era la cena del Galatea los domingos para unos chavales de 17 años. Pero lo que quiero explicar es como era el trabajo del gavetero, que me lío y me pierdo.
Después de la comida o la cena, los gaveteros subíamos a cubierta y nos poníamos en los imbornales con una gaveta llena de agua limpia y la otra para ir poniendo los enseres.
Si algún plato o vaso se rompía, lo pagábamos de nuestro bolsillo, así que si pasaba y se rompía algo, sin decir ni media palabra intentamos quitárselo a otro.

El suboficial del rancho además de hacernos pagar los desperfectos nos metía una semana más de gavetero. En cubierta, agachados y con los cuellos de las marineras subidos para que el agua de lluvia que caía casi constante no entrara y nos calara más, y mirando contínuamente a los que se acercaban y a los que tenías al lado para que no te quitaran ni un tenedor.
Cuando terminabas, recogías todo bajabas al rancho y se guardaba todo en una taquilla después de haberlo secado concienzudamente, cosa que tenías que hacer otra vez antes de la próxima comida, por si acaso tuviera algún desperfecto o una gota que no se limpió bien.
El gavetero tenía menos tiempo para descansar, había veces que tocaban a formar para la instrucción y todavía seguía lavando platos.

TN. Don Antonio Cartelle Pena.- Hombre Tena, llegas tarde.
Tena.- D. Antonio, vengo de guardar las gavetas y no me ha dado tiempo por que…
TN.- No hombre, no, usted viene de dormir la siesta, póngase en la fila y no me cuente nada.
Tena.- Que no Don Antonio, que vengo de las…
TN.- Pero por Dios hombre y sigue usted protestando por llegar tarde, hable
usted con el cabo y pídale el alba. (guardia recargada).
Este fue mi sino.
Un saludo a todos y para Arminio que está en dique seco.
Castrillon dijo...
Muy bueno Tena, si señor muy bueno, contando los pormenores de la vida a bordo de aquella Galera cuando dejó de navegar.
Los castigos no parecian tan malos, sólamente de guardia para el alba, pero para estar tan modernizados os atosigaban bastante, claro eran los mismo contramaestres que nosotros teníamos en nuestras navegaciones.

A nosotros los castigos eran, pasar unas horas en los juanetes altos o en las jarcias de cara a la mar, tanto de día como de noche, así navegando durante horas, recibiendo los vientos y fríos de las correspondientes zonas de navegación, pero, si eran unos tiranos tanto para nosotros como para vosotros.
Nosotros les cogíamos el tranquillo y también les dábamos el esquinazo, o simplemente nos escondiamos y no nos encontraban.

También solíamos subir a los palos, y como íbamos con todo el aparejo largado era bastante difícil localizarnos, y si nos localizaban decíamos que estábamos reparando algun tomador de la vela o flechaste, en fin era el mejor sitio.
Pero, para vosotros claro que eran unos tiranos también.

Los domingos era cuando menos nos molestaban ya que nos dedicábamos a dormir sobre cubierta o si hacía viento lo hacíamos en el sollado, sobre el suelo o en las batayolas, era el único día de semana que respetaban escrupulosamente nuestro descanso, a no ser que tuvieramos que hacer maniobra general.
Bueno, !!!!!! Ureñaaaaa¡¡¡¡ te estamos esperando, no te hagas el remolón.
Recibir todos un muy cordial saludo,y buen día.
FernandoTena dijo...
Me alegro que os gustara el relato, desde luego no creo que se parezcan los castigos de arrestos de vuestra época a la nuestra, aunque alguno pasó alguna vez un par de hora en el palo.
Por mi parte fueron muy "didácticos" los arrestos, los tuve de todas clases, algún día los comentaré.
Pero les doy las gracias a mis profesores, desde Don Manuel Sisniega Hoyos, Don Antonio Cartelle Pena, Don Robustiano Álvarez Blanco, Don Moisés, D. José Seco Franco, también tengo muy buenos recuerdos para el Sargento Bouza.
Todos ellos nos enseñaron a ser buenos profesionales y buenas personas.
Os dejo que tengo una actuación esta tarde y tengo mucho que preparar, saludos.
Arminio dijo...
Parece que esto se anima, que pena no poder participar, pues me pasa lo mismo que a Miguel con el ordenador.
Creo recordar que el sargento primero Bouza era ese joven, siempre impoluto y del que hay alguna foto por ahí, aunque quizás me equivoque. Iba a darnos clase acompañado del cabo primero Veiga.

Hablando de comida y de los gaveteros que lavaban los utiensilios en los imbornales de babor, fue cuando me resbalé nada más bajar del castillo con el jabón del lavado de los perolos por parte de los cocineros y de las gavetas y cubiertos por parte nuestra.
El cabo largo al verme caer imitó a Cartelle y me aconsejó que me apuntase una guardia esa noche en el cuerpo de guardia.

Así eran las cosas, y otro cabo primero que iba con él, intentó disuadirle, llegando a decirle en mi presencia, que se había pasado y Largo se enfrentó a él y le dijo que no le quitase autoridad.

A Largo me lo encontré dos veces en Madrid, la primera, él iba de uniforme pues estaba haciendo tiempo para coger un tren y yo estaba de permiso. Me dijo que tenía prohibido vestir de paisano y que en el Galatea nos veríamos. Yo contesté que en que cabeza cabía pensar que en Madrid y de permiso iba a estar de uniforme.
La otra vez fue en el año 1981 a principios y él iba de paisano y yo licenciado, coincidimos los dos saliendo del Ministerio de Marina y me comentó que estaba destinado en ese Ministerio, acompañando a un Almirante. Le pregunté que si en el edificio había algún contramaestre y me contestó que si, que se dedicaban a organizar el aprovisionamiento, mantenimiento y limpieza del Ministerio de Marina.mBueno un saludo a todos.
Pablo dijo...
En primer lugar, dar las gracias a Fernando Laguna por los elogios que me hace, referente a mi libro, y a mi pasado en general, y muy en particular en los 4 años que navegué a bordo de nuestro querido “GALATEA”.
Es cierto que en ese periodo: del 51 al 55 por desgracia, o, por suerte, fueron unos años de los más duros, loquee se refiere a temporales y vida a bordo.
Si, en las 283 páginas de mi libro; que no es más que mi biografía, relato en 60 páginas, con fotografías excepcionales, mi vida a bordo, con mucha certeza: La verdad, es que en realidad, mentalmente todavía no he desembarcado del Galatea.

Como podéis ver, y a pesar de haber visitado el barco en Glasgow, donde tuve un gran acogimiento por los principales miembros de la asociación y donde dejé una buena colección de fotografías, he sido un “Galateano solitario”.
Ha sido: gracias a Manuel Ortiz; que años después visitó el Galatea, y es por esta razón que le permitió tener contacto conmigo, y a través de él he podido conocer a un galateano extraordinario: “Jaume Matamala” con el que tengo un contacto permanente; el cual ha quedado enamorado de mi libro y de las fotografías.

Toda esta historia me ha hecho descubrir, y aportándome una alegría inmensa, de saber que no estaba solo, que todos aquellos que pisaron la cubierta del Galatea no estaban dormidos.
¿Pues aquí tenéis otro más?. Me llamo Pablo Delgado Guerra, soy de un pueblo de Badajoz (Santa Marta de los Barros) fui el cabo 2ª de maniobra más joven de la Armada, por la sencilla razón, que al ser Flecha Naval embarqué a los 17 años, y una vez terminado los cursos me quedé destinado en el Galatea.
Mi destino: responsable de todos los botes y balsas, con dos extraordinario Contramaestres: D. Robustiano y D. Jacobo Plaza, todos a las órdenes de un gran Alférez de Navío D. Juan Berengue, un gran Contramaestre de cargo Don Antonio Queiro, y como Comandante: un gran señor y un gran marino Don Manuel Ramos Izquierdo.

Mi maniobra y mantenimiento: palo "Trinquete" con un extraordinario cabo 1º de dotación(Benito de Valladolid). Aprovecho esta oportunidad, a ver si por suerte a través de Internet, pudiera encontrar a un tío muy cojonudo Cabo 2º de Radio, del Ferrol, al que le eché una mano para instalar las antenas de Radio, al mismo tiempo que todo el velamen fue arrancada en la noche vieja del año 1954. Pero que con mucho coraje pudimos colocarlas de nuevo: el día 4 de Enero. Tanto él como yo, estoy seguro que no lo ha olvidado, y que también se acuerda De mi.

Hoy: después de 56 años de casado, con mi esposa compartimos el tiempo, entre los Pirineos franceses y la Costa Brava, lo cual me permite tener una forma física, que hoy en día subir a los palos no seria un problema.
Muchas gracias por todo lo que habéis hecho Un abrazo Pablo.

Referente a la perra, conozco muy bien su historia, por la sencilla razón, que soy un poco responsable de lo que le sucedió. Yo me encontraba de guardia en la bitácora, pienso que fue al amanecer. A la perra yo y otros más le pusimos de nombre "Tea" diminutivo de Galatea. El animal, a las personas que no podía ver era a los cornetas y a los tambores.

No estoy muy seguro, pero creo que fue un regalo que le hicieron al segundo comandante en Funchal en el 1º crucero del 53. Poco tiempo después nos dio una sorpresa, parió tres cachorros, que instalamos en el "pañol de velas" donde iba y venía darle de mamar. Yo jugaba mucho con ella y era yo solo quien podía coger los cachorros.
El tiempo lo pasaba delante del camarote de su amo. Había un fuerte temporal, subió al castillo de popa y al verme a mi en la caña, se dirigió hacia mi, y en ese instante hubo un golpe de mar que la arrastro, pasando entre los barrotes de la regala. Visto el temporal que había y la oscuridad, no se pudo hacer nada para socorrerla
Yo me ocupé de los cachorros, con leche condensada hasta llegar al Ferrol, y el 2º Comandante se los llevó a su casa. Y aquí acabo la triste historia.
Gerardo Ureña dijo...
Un saludo muy especial para todos. En primer lugar, darle una vez más mis más generosas gracias a Arminio. Gracias, me puse muy contento cuando pude ver mi articulo de la riada de Valencia, en el lugar que le pones, gracias, Y MIL VECES GRACIAS!!!.
José María me pides el nombre del segundo. José Rey Pantín, este era su nombre, por cierto, buena persona.
Felizmente, tenemos un nuevo, pero viejo tripulante, ya tenemos a bordo, dos viejos lobos de mar. Bienvenido Pablo Delgado Guerra. Como diria "Gran Miguel", pasa y acomódate como mejor te plazca.

Pablo, yo soy del primero del 55, más no te recuerdo. ¿Desembarcaste tú ese año del Galatea? Tengo interés en comprar tú libro, me puedes decir cual es su titulo y la editorial. Fernando Laguna, nos dice, El Emigrante,Camino sin Retorno. Si es asi confírmalo por favor.

Reitero, bienvenido a bordo, como dices muy bien, en realidad nunca desembarcaste, esto se lleva en la sangre para siempre. ¿El segundo comandante dueño de la perra era D.Manuel Manso Quijano?
Recibe un fraternal abrazo de todos.
TABERNA DEL PUERTO: Los viejos tritones de ojos apagados y labios temblones, apuran su tosca copa de aguardiente, con el pensamiento puesto en la mar.
Fernando Tena dijo...
Pablo, me alegro de que dijeras de donde eres, pues yo soy paisano tuyo, nací cuando tu navegabas en el Galatea en Octubre de 1954 en Almendralejo, a unos 30 Km. de tu pueblo.
Para que luego digan que los extremeños no somos aventureroslunes, 27 agosto, 2012

Arminio dijo...
Ya he recuperado el ordenador y manos a la obra, esperando que todos os encontréis bien y sobre todo Gerardo Ureña, al que le doy las gracias por ese maravilloso comentario de Valencia. Así será el nuevo espacio para que se pueda leer todo sobre el Galatea.
Bienvenido Pablo, a este espacio que desde siempre ha sido tuyo y espero que desde ahora así lo tomes, pues es tu Galatea, como el de todos nosotros. Ya hablaremos de historias, libros y relatos, pues también espera por salir a la luz dos textos sobre el Galatea que suman más de 420 páginas.
Bueno voy a arranchar el ordenador para empezar la navegación.
Un saludo para todos.

Arminio dijo...
Nuevo texto de navegaciones, espero que los disfrutéis. Casi literal del cuaderno de bitácora del comandante.

Recelando la proximidad de un mal tiempo, se metió aparejo en la tarde del 26 de junio, para dejar el buque marinero y en condiciones de poder pasar la noche del 26 al 27, prevenido para lo que ocurriese.
A primera hora de la noche saltó la brisa de S.E. que se fue entablando y refrescando de tal modo, que a la una de la madrugada el andar era de más de seis millas, ciñendo con las gavias.

Poco antes de las tres, el barómetro inició un descenso que llegó a tres m/m continuando después la bajada rápida, mientras el viento refrescaba hasta hacerse muy duro y racheando, revelándose la mar correspondiente.
Se metieron las gavias altas y las mayores y a la expectativa se cerró la capa de amura de estribor con dos foques, velacho bajo, gavia baja, estay de gavia y la cangreja. A las seis de la mañana se mandó envergar la trinquetilla al momento que se rifaba uno de los foques.

A las seis y treinta el viento era huracanado y el buque tomaba bien la capa, castigándolo la mar y destrozando dos de los botes. En el transcurso de una hora el viento roló de S.E. a N.N.O. continuando la bajada del barómetro y aumentando la mar, por lo que comprendió el comandante que debía seguir capeando por la amura de estribor, siendo más tarde y ante la inutilidad de esta maniobra, se decidió romper la capa y correr en doce cuartas por estribor.

Para facilitar al arribada y iniciar la corrida, se dio el trinquete que también se rifó, pero consiguiendo vencer el punto muerto y que el buque arribase hasta tener el viento por la aleta. Continuará...
Un saludo para y especialmente para los recientemente llegados.
Fernando Tena dijo...
Bitácora, podrías poner el año, creo que sería interesante.
Arminio:
No se ve el año lo pongo haber si alguien lo averigua, pues hay todavía un par de comentarios largos para terminar. Un saludo
Pablo Delgado Guerra dijo...
Compañero Gerardo Ureña. En a lo que me rectificas referente al segundo apellido del 2º comandante no te contradigo, por la sencilla razón, que unas veces nos llamábamos por nuestro nombre, otras por el apellido y otras simplemente, por el nombre del pueblo.
Don Robustiano con el que pasé todo el tiempo , ahora he sabido su primer apellido y a Don Juan Berenguer, y Don Jacobo Plaza, ignoro su segundo apellido, pero con él segundo que más estuve, fue con Don Jorge García Parreño.

En cuanto al nombre de la perra yo se que traía su nombre de origen, el que no recuerdo, pero si, el que le dimos unos cuantos que nos aproximábamos mucho al animal, que no éramos muchos, visto que la perra se pasaba el tiempo delante del camarote de su amo.
Si digo que nunca desembarqué, es cierto ¿pero mentalmente? Desde estas fechas han pasado casi 60 años.

En cuanto a tu nombre, no me recuerda nada, pero como ya digo, eso no quier decir
nada. Una vez que acabé el Cuartel de Instrucción, me mandaron 15 días a un viejo guardaminas en espera de la llegada del Galatea. Esto fue entre finales de Marzo o primeros de Abril, del año 51 y desembarqué a finales de Diciembre del 55, por la razón que a la llegada al Ferrol del crucero de Dublín me ingresaron en el hospital militar del Ferrol. Tú embarcaste cuando yo me licencié.

Paisano Fernando Tena
En mi libro hablo mucho de Almendralejo, por que para ir a Santa Marta, no me quedan más cojones que pasar por allí y antes de coger la carretera de Azauchal, me hago un pequeño recorrido, para refrescar los buenos recuerdos que conservo de ese bonito pueblo, y por ser donde yo hacía mis trapicheos de tabaco y también por lo mal que lo pasaba ,si el autobús "Leda" se había marchado.
Viva Almendralejo, sus vinos y el licor de bellota Un abrazo de Pablo Delgado
Miguel Gómez Ruiz dijo...
Hola a todos, compañeros de antaño de ahora y de siempre, sin olvidar ni un sólo momento a los que tienen a bien seguir nuestras vivencias en este espectacular blog, donde espero que se encuentren perfectamente, como si de su propia casa se tratara.
Dicho esto, paso a expresar mi gran satisfacción por la buena marcha de esta movida galateana, que cada día va mas en auge, lo que celebro efusivamente.

Recuerdo cuando iniciamos nuestra andadura, hace ya algunos años, de la mano de Arminio, cuando éramos cuatro aprendices a aventureros, que nos lanzamos mar a dentro con muy poca dotación y menos recursos, no cabe duda de que nuestra constancia y empeño por rescatar a nuestro Galatea del profundo abismo del olvido, ahora está dando sus frutos.
Atrás quedaron muchos momentos de desánimo, y otras vicisitudes que nos impedían seguir adelante, hasta naufragamos un par de veces, hoy podemos decir que aquel velero llamado Galatea que se perdió por el horizonte del más triste olvido, gracias a sus antiguos y audaces marinos ha sido recatado, si no físicamente, si su memoria y su esplendida historia, desahuciada por nuestros políticos de turno.

Agradecemos la inestimable colaboración de todo aquel que se ha acercado a este espacio para de la forma que buenamente ha podido le ha dado un soplo de viento a sus velas, con el objetivo de que fuese avanzando más y más.

Observo que durante mi ausencia, el comportamiento del viento y el buen hacer de la tripulación ha sido esplendida, se han incorporado otros compañeros que hacen que la navegación sea mucho más amena, yo por mi parte celebro que así sea, esperando muchas más incorporaciones, que algunas ya están en camino.
Esta es la llamada a nuestros inicios en el mundo de la mar, los exgalateos nos buscamos por toda la geografía de nuestro planeta, a veces llegamos demasíado tarde a esos encuentros, y los resultados son algo dolorosos, cuando dejamos caer alguna lágrima por nuestras mejillas, otros en cambio son eufóricos y placenteros, y nos prometemos no volver a perder ese contacto que tanto hemos ansiado.

Me gustaría darle la bienvenida a nuestra última y no por eso menos importante incorporación, Pablo Delgado y ya puesto en mi estilo desearle una confortable estancia entre nosotros, como sobradamente conoce el buque, que se aloje en el lugar que más le apetezca, que siga navegando con nosotros, esta y otras muchas singladuras, que es muy importante la presencia de todo aquel que se sienta Galateano sea o no navegante de aquel viejo velero.

Pablo agradezco que te hayas dedicado a escribir un libro con tus relatos a bordo del Galatea, lo cierto es que sólo he leído algunos párrafos que Jaume Matamala desprende por algún correo y facebbok, lo encuentro muy ameno e interesante, comentas algún detalle que yo no viví, creo que es normal que el paso de unos años se noten en las distintas vivencias.
Por ejemplo lo de la sopa de ajo, ese tema ha sido debatido en varias ocasiones en este espacio con Castrillon, yo jamás tuve sopa de ajo en el Galatea y algunas cositas más que ya las trataremos con el trascurrir del tiempo.

Bueno ahora ya estoy en mi residencia habitual de Barcelona, después de unas tortuosas vacaciones por la comunidad de Murcia, tortuosas por el calor reinante por aquellos lares, de todas formas tengo un muy grato recuerdo de ellas, por primera vez y después de 54 años nos reunimos a la mesa de un restaurante tres antiguos compañeros del ya referido Galatea, junto a nuestras esposas, se trata de Manuel Ortiz Yagüe, Manuel Martínez Carretero y Miguel Gómez Ruiz y servidor de todos ustedes, ese encuentro fue algo maravilloso que difícilmente se pueden encontrar palabras para describirlo, fue súper emotivo, quedamos para próximas ocasiones Dios mediante, con mas componentes de nuestra época en aquel bricbarca.

Agradezco la generosidad de Gerardo Ureña, en su trato para con mi persona, así como la eficaz colaboración de todos, no pronuncio nombres por miedo a omitir alguno. Con mis mejores deseos de felicidad, un caluroso abrazo para todos.
Paz y Bien

Arminio dijo...
Gracias a los verdaderos navegantes del Galatea, que este blog tiene el privilegio de recibir.
Para este espacio es un honor contar con gente tan imprescindible, tan voluntariosa por sus acciones y tan buenos contadores de vivencias que son únicas e históricas.
Descde aquí y ante la mayor humildad me quito el sombrero ante los verdaderos y auténticos navegantes del Galatea, como dijo hace poco Fernando Tena, los que no hemos navegado en el buque tenemos esa espina de por vida, que gracias a vosotros apenas la notamos, pues nos hacéis vivir lo que nos gustaría haber vivido y por circunstancias no pudimos hacer.

Aprovecho para pedir a Pablo, alguna de sus maravillosas fotos para poder iluminar este espacio, para que sirvan para dar luz y recreo a todos los visitantes.

También a continuación voy a poner un escrito en mayúsculas para haceros conocedores de algo, pero que en un par de días se eliminará para no ensombrecer los ánimos, ya que por mi parte os digo de antemano, que estoy aquí y nada cambiará, pues os llevo a todos en el corazón. Un saludo.

Moguel Gómez dijo...
Cuando los proyectos se fraccionan, difícilmente se consiguen los objetivos iniciales, en el caso de conseguirlos siempre estarán muy descafeinados, no cabe duda que cada parte de la sociedad, tiene sus incondicionales, no se concibe entre ex-galateos semejante actitud.
Lamento que entre nosotros existan estas distancias, ruego perdón si mi escrito hiere alguna sensibilidad.
Luchemos por la concordia y la verdadera amistad, que tanto se prodiga entre los auténticos galateanos, SALUDOS.
Gerardo Ureña dijo...
Hola a todos:
Pablo Delgado, me parece que no entendiste bien lo que quise decirte. Te preguntaba, si el nombre del segundo comandante, y dueño a su vez de la perra, era D. Manuel Manso Quijano.
Esto no es nada importante, simple curiosidad.
Pablo, si tú desembarcaste del Galatea a finales de DICIEMBRE del año 1955, tuviste que hacer el viaje de Pernambuco y el de Bremen. En ese período de tiempo, yo estaba en el Galatea. Te digo que quiero comprar tu libro, te pregunto por su titulo y la editorial, más no me dices nada.

Al que supuestamente se supone que conoces bien, es a José Mª. Castrillón, ya que las fechas que tú das, Castrillón estaba a bordo.
"Gran Miguel", el pito del contramaestre ha sido largo y generoso con tu llegada. Como tú sueles decir, acomódate bien, pues te espera un otoño muy movidito.

Del Sr. Jaime Matamala, yo soy el menos indicado para dar mi opinión, pero como muy bien dices bitácora, libremente que cada cual elija su camino, camino que respetamos,como no podria ser de otra forma.
Yo estoy aqui por que quiero, nadie me obliga, estoy muy agusto, cada día más contento.

A Don Juan Don Diego hirío
y aunque arrepentido luego
curó al Don Juan el Don Diego,
la cicatriz le quedó.

De esto a inferir vengo yo
que nadíe, si es cuerdo y sabio,
debe herir, ni aún con el labio,
pues aunque curarle pueda,
siempre al ultraje le queda
la cicatriz del agravio.

Un gran abrazo para todos.
Arminio dijo...
Espero que sigáis cómodos entre estas cuadernas del humilde Galatea, que no presume de altivo y nunca lo ha hecho, a pesar de su humildad siempre navegó con formidables hombres como vosotros y al llegar a puerto como decía Castrillon, sacábais pecho y os enorgullecíais de ser parte de su dotación.

Espero que en este espacio os sintáis guarecidos de los temporales de la mar y que el Galatea como siempre lo ha hecho, os guarde, os guíe y os protega, llevando esa carga de sentimientos humanos que desprendéis, a los confines de la mar donde siempre será bien recibida.

Gerardo Ureña espero que en breve se presente en toldilla, con un escrito contando su llegada al Galatea para ponerlo en lugar de honor en el anexo de este blog, "Relatos del Buque Escuela Galatea" y si lo desea el señor Pablo, también. De esta manera conseguiremos una página entera dedicada e esa primera impresión que todos recibimos cuando pisamos por primera vez la cubierta del velero Galatea, el primer buque que pisamos y y el que volvemos a recuperar después de muchos años. También va dirigido a todos los visitantes que tuvieron como destino el velero. Un saludo efusivo a todos.
Arminio dijo...
También se rifaron el foque y el estay de gavia, por lo que partiendo el buque de puño, corría el peligro de atravesarse. Concluido de envergar entonces, entonces la trinquetilla la dio, restableciendo el equilibrio, pero rifándose entonces el velacho bajo, se quedó con la trinquetilla y gavia baja, andando once millas y equilibrando la orzada con el timón, siendo indispensable dar otra vela a proa, para restablecer el equilibri y dejar descansar el timón.

Se mandó envergar y cazar el velacho de respeto, ara lo que hubo que subir a picar las relingas del que se había rifado que gualdrapeaba con furia impidiendo la faena y entonces mostrando un valor heróico, saltaron los contramaestres, Díaz, Rodriguez y Navarrete y seguidos por el marinero Chacartegui trepando, consiguiendo picarlas, envergándose después la vela nueva.

Continuando la corrida, comportándose el barco de un modo admirable, empezó a subor el barómetro, alejándose el buque del vórtice, cediendo la violencia del huracán durante la noche y pudiendo gobernar a rumbo en la mañana del veintiocho.

Se rescatan los nombres de los contramaestres y del marinero siendo éstos: Contramaestres D. Santiago Díaz López, Don José Rodriguez Seoane y D. Francisco Navarrete Ceniza y el marinero de segunda D. Cruz Chacartegui Arrida.
Los nombrados, voluntariamente y revelando en todo momento que los hechos que realizan, no tenían más impulso que sobrponerse al peligro que amenzaba al buque, si no podía arranchar su aparejo en las condiciones marineras que estimaba su experto comandante, salvaron al buque del peligro que amenzaba y conél a su dotación. A todos ellos se les propone para recibir La Cruz de San Fernando.

Hasta ahora ignoro la fecha de estos acontecimientos y si pertenecen al Galatea o quizás pudiera ser a bordo de la corbeta Nautilus, antecesora del Galatea. Haber si alguien con los nombres de los contramaestres pudiera saber algo más.

Arminio dijo...
Gracias a Fernando Tena que ha indagado el texto, sobre el temporal, se sabe que fue el 27 de junio de 1921 y lo protagoniza la corbeta Nautilus en su travesía de Martinica a Santander.
Gracias a los estupendos colaboradores el Galatea sigue su rescate del olvido en el que hace unos años estaba sumido.
Un saludo a todos.
Pablo Delgado dijo...
Amigo Arminio: Como ya digo en mi blog, que era un galateano solitario, no por egoísmo personal,solo por ignorancia, pero gracias a un camarada que me hizo conocer Jaume Matamala, por el que tengo mucho estimo y admiración, y por que fue el primer pionero de esta fantástica aventura.

Muchos de ustedes no navegaron en el Galatea y como ya digo, por suerte y desgracia, en el periodo de mi paso por él, pienso que fue el peor de su historia en España. A mi lo que me ha gustado de todos vosotros y que tiene tanto valor, como haber navegado, es la pasión que tenéis todos,"y yo no soy sino uno más".

Yo no soy un escritor ni un intelectual, solo fui marino y después un trabajador de la construcción, y como tal me considero.
Escribí mi biografía bajo la presión de mi familia y amigos, sin intenciones de publicarla y con la condición de contar mi vida tal y como ha sido "lo bueno y lo malo"
Solo hice 50 libros para la familia y amigos íntimos, que una vez que fue leído, algunos se pasaron la noche leyéndolo y todos me decían lo mismo: ¿como te puedes acordar de tantos detalles? ¿ este libro lo tienes que publicar? y así fue.

Entre mi señora y yo lo traducimos en francés, y ha sido publicado durante dos años en todo el territorio de lengua francesa. En España los comités de lectura no les he sido muy agradable, o bien piensan que esta historia ha sido un invento mío, pero estoy seguro que todas estas personas, no han vivido lo que yo he vivido, solo me felicitan aquellos que me conocen muy bien.

Por tanto "Juro delante de Dios que el contenido del libro,se basa de la pura realidad, sin haber tenido ningún diario, pues todos estos episodios están sellados en mi mente. La mayoría de los lectores han sido de tiera adentro, que lo que menos le interesaba, al no conocer nada de barcos, ha sido solo las fotografías.

Arminio: yo leo todo lo que escribís, cosas de más o menos importanncia, pero si con los mismos sentimientos y la misma pasión, que es lo que le da valor a lo nuestro; y así debe seguir.
Yo pienso como Jaume, todos podemos contar la misma historia por haberla vivido, pero sin deformar la que ha vivido otro, solo por querer valorizarse más que el otro.
¿Esto nos lleva a la desunión? Y en este grupo, todos tenemos el mismo peso y los mismos galones, solo: NOSTALGIA Y PASION. Un abrazo ha todos Pablo

Amigo Geraldo Uraña. Es cierto que que no te contesté como es debido, solo porque soy un peludo en informática, cuando lo hago es gracias a mi nieto, cuando lo puedo pescar, para que me saque de apuro.  Referente al 2º comandante, dueño de la perra, no te contradigo en su segundo apellido pues siempre he creido que era cañe, Don Robustiano ha sido ahora que conozco su primer apellido, pero si que me acuerdo del segundo con el que más estuve Don Jorge García Parreño.
Mi último crucero fue el de Dublín. Las Palmas Gran Canarias, Huelva, Funchal y Ferrol, que al llegar me hopitalizaron y fue en Enero del 55 cuando abandoné el Galatea, pienso que hay un error de interpretación con el año 1955.
Si tu eres del primer crucero del 55 no creo que nos conozcamos, pero Castrillon, si es del 53 por fuerza hizo el crucero de Nueva York conmigo, y aunque el nombre no me diga nada, por fuerza nos conocemos.

En cuanto a mi libro, el titulo: EL EMIGRANTE CAMINO SIN RETORNO, que es mi biografia, de las cuales en 60 páginas del libro cuento mi vida de los 552 día 552 noches que vivi a bordo. Mi Tlf. es 972. 82.24.05 y mi dirección San Feliu de Guixols 17220 Girona (Apartado de correo 44)
Un abrazo Pablo
Arminio dijo...
Hola de nuevo Pablo, es grato que contemos contigo en estas singladuras, lástima no haber contactado antes, pero bueno mejor tarde que nunca.

Cuantas anécdota podrías contar además de las que están en tu libro, seguro que otro libro entero dedicado a eso. Todo se puede lograr como bien dices, solo hay que proponérselo como has hecho hasta ahora.

En cuanto a la versión que conoces, creo que no es la verdadera, esto es como las religiones que cada adepto de una confesión religiosa piensa que que la suya es la verdadera, pero no tiene importancia, es "polvo del camino" como decía el contramaestre Don Robustiano, cuando una ola empapaba a algún novato aprendiz.
El verdadero pionero de todo esto, es Alberto Vera Meizoso, junto con Castrillon y Miguel a los que me uní hace ya casi cuatro años, lo que ocurre es que sabes la versión a medias, pero eso no importa, lo que importa es que se rescató por fin al Galatea.
Bueno un saludo a todos.
Castrillon dijo...
Hola a todossss. Bueno, no se por donde empezar, ya que se unió a este buen grupo Pablo, pero comenzaré por Ureña, ya que a Pablo va a ser más larga la conversación ya que estuvimos más tiempo juntos.

Ureña,¿te suena algo el nombre del Segundo Comandante y, que a continuacion menciono? MANUEL ROMERO MANSO, ése era el segundo, y el dueño de la perra, que por cierto, era muy buen jefe, muy amable y muy sencillo, era muy asequible al trato y al preguntarle algo, ya os contaré sobre este tema.
Lo que no me recuerdo fue, cuando desembarcó ni me acuerdo del nuevo segundo comandante. Bueno Ureña, espero que haya acertado con el nombre del Segundo, pero casi estoy seguro de era ése.
Oye ¿recuerdas que cabo segundo tenía destino en la batea?.
Bueno espero que todos lo pasesis bien este fin de semana.
Sin más recibir un muy cordial saludo y un muy fuerte abrazo, a todosssssss.
Castrillon dijo...
Hola Pablo. Soy Castrillon, de Asturias, me alegro mucho de que embarcaras de nuevo en el Galatea, yo, si me acuerdo de tí, eras el Flecha, tenías la cara de un niño, parecías un güaje de 15 años, también me acuerdo muy bien cuando subiste al palo mayor a poner la antena de la radio que había arrancado aquel fatídico temporal, si señor, me parece que lo estoy viendo todo tal como sucedió.
Pero bueno, te diré, yo embarqué en el mes agosto del año 53 recién salido del cuartel de Instruccién de Marinería de Ferrol, y el día 15 del mes de septiembre salimos a la mar rumbo a Hamburgo. Era mi primer embarqué, hacia buen tiempo por el paso de Calais,pero con un viento fresco, estando yo, y otro más de mi curso, en la banda de estribor, fue cuando le dije al compañero, "que buen aire hace para las velas" Mira Pablo, por detrás me dieron tal bofetón que me tiró sobre la cubierta, y cuando estaba en el suelo se agacha y me dice "no se dice aire, se dice viento".

¿Sabes quien fué ese contramaestre? don Jacobo Plaza, ya lo tenia olvidado, pero cuando lo has mencionado tú en uno de tus escritos en el libro, lo ví muy claro, ahí en ese momento fue cuando se me vino el mundo encima, ¿dónde me habia metido yo? pero bueno, todo pasó.
¿Recuerdas las rocas blancas de Dover (Inglaterra) por el Canal de Mancha?
¿Recuerdas en la costa inglesa por el paso de Calais, aquel cementerio de barcos, que se veían muchísimas crucetas fuera del agua, de los palos de los barcos hundidos? era impresionante.

Recuerdas cuando llegamos a Hamburgo, el día 23 de septiembre como estaba aquella ciudad, por los alrededores de ellas, todo eran ruinas, en ese puerto estuvimos 4 días, y salimos el dia 27 del mismo mes para Cádiz.

Yo, no recuerdo si fué en esa fecha cuando hubo una revista naval por parte de Franco desde el Canarias, nosotros llegamos por la noche, estoy en duda si fue en esa fecha o fue en el segundo viaje, el día 21 de Marzo del 54, ya que las maniobra generales se solían hacer en la primavera y en el otoño.

Si Pablo, tengo todos los viajes, desde Septiembre del 53 hasta julio del 56, con sus fechas de entradas y salidas de los puertos, lo mismo que los dias de mar y puerto, y las millas navegadas en las singladuras, todo lo tengo muy anotado en una libreta de pastas de cartón, lo mismo que muchos apuntes de las clases que nos daban a bordo.

Bueno, Pablo no te molesto más por ahora, seguiré en contacto contigo durante mucho tiempo, hablando de nuestros recuerdos. Recuerdas la navegacion por el mar de los Sargazos, y antes de llegar a Nueva Yor que salio un Zepelin y dio una vuelta por encima de nosotros y se volvio a puerto, ya que habíamos cogido mal tiempo y llegábamos con el tiempo demasiado ajustado.
Recuerdas la estatua de la Libertad, y cuando atracamos al muelle 44 como lo embistió con el bauprés.

Si Pablo, han pasado muchísimos años, pero yo lo tengo en la mente como si fuera hoy mismo, ya que era el primer viaje que hacíamos, y los recuerdos fluyen a raudales por mi mente.
Bueno amigo y compañero Flecha, ya seguiré con los recuerdos y los comapñeros y aquel gélido frío en Nueva Yor de 20º grados bajo cero, ¿ lo recuerdas?.
De momento te dejo, ya vendrán muchísimos detalles de aquellas legendarias navegaciones a vela en aquella galera y de los compañeros.
Recibe un muy cordial saludo
Gerardo Ureña dijo...
Arminio:
Me dices que escriba mi llegada al Galatea, entro, pico donde hace referencia a nuestra primera llegada, veo con sorpresa que estais casi todos, me dispongo a escribir, no puedo, no me deja. Por favor decirme como lo tengo que hacer. Un abrazo.
Arminio dijo...
Gerardo perdona, quise decir que me mandes un correo con el escrito y yo lo pongo, en ese blog no hay comentarios y no se puede escribir, pues es un anexo cultural a este blog. Se pretende que sea una enciclopedia del Galatea. Aprovechando animo a totos a picar en la página "La llegada al Galatea" y veréis nuevos escritos. Un saludo.

Arminio dijo...
El marino de los grandes veleros ( Juan Sebastián de Elcano y Galatea) Alberto Vera Meizoso, al que tengo el honor y la gratitud de conocer, expone en Ortigueira las maquetas de su libro Naves Celtas.

No solo son maquetas son embarcaciones reales y que han superado las pruebas de navegabilidad. Enhorabuena por tu feliz empeño, espero que te sientas tan orgulloso como nos sentimos muchos de nosotros.
La publicación en prensa la podéis ver un la página "Recordando al Buque Escuela Galatea"
Pablo Delgado Guerra dijo...
Querido amigo y compañero Castrillon
Primero, te voy decir que me has hecho saltar las lágrimas por la manera tan exacta que me detallas, me ha dado la impresión que estábamos frente a frente sentados en el cabillero.

Es cierto que tenía una cara de niño, pero niños éramos todos. Es cierto que yo al haber sido Flecha Naval, embarqué un año o dos antes que muchos. Es cierto que tenia el rostro de un guaje, es por eso que me llamaban el negro de cabo verde. Esto me da mucha alegría, también de que recuerdes cuando subimos a poner las antenas yo y un cabo segundo del Ferrol, en las condiciones que nos encontrábamos. Mi hazaña no era nada, comparada con ese histórico Cabo de radio, del Ferrol, que nunca había subido a los palos y al que me gustaría encontrar.
Es cierto todo lo quee cuentas, el paso por el Canal de la Mancha, con rumbo Hamburgo, aunque yo me tiré 4 horas en la caña del puente en compañía del Comandante, el 2º Comandante y el oficial de Guadia que cada 5 minutos venia a ver el compás para ver si lo llevaba bien, lo que me impedía quitar los ojos del compás.

Recuerdo que de golpe le dijo el Comandante al oficial de guadia, que por que no me habían relevado, y aún recuerdo cuando hizo venir al cabo primero de banderas, era de Santiago, y que al estar acostumbrado a no dar ni golpe, se presentó con malas pulgas. El oficial le dijo: trata de llevarla como la ha llevado él.

Y los ferris que cambiaban la derrota, para ver más de cerca aquella blanca "Fragata" a toda vela prioritaria en todo el Canal de la Mancha, y al amanecer llegamos a la desembocadura del río Elbe donde nos esperaba el práctico, y de la miseria de Hamburgo, y el barrio San Pauli (prostitutas en escaparates) ¿todo eso no se olvida?. Aquel crucero fue un crucero de placer, aparte que en Puerto Rico unos de raza negra le saltaron un ojo con palo de béisbol a un chico vasco.
Pero el lugar donde más ilusion nos hacía, se convirtió en un infierno "Nueva York" que del purgatorio fuimos al infierno.

Las maniobras de Cádiz fueron en el primer crucero del 54 salimos de Hamburgo el 27 de Septiembre y llegamos Cádiz el 11 Octubre, las maniobras fueron tal y como tú lo explicas, el iluminado de las velas fue por que se hizo de noche. Cuando Jaume me mando algunas fotos y vi la tuya y me dije esta cara me es familiar, pero esto sucedió hace casi 60 años.
Para mi que casi no entiendo nada de Internet, se me pone la cabeza como un bombo, pero haciendo renacer el pasado todo esclarece.

sábado, 01 septiembre, 2012